Indonesia acepta por primera vez considerar la independencia de Timor Oriental

El Gobierno de Indonesia se mostr¨® ayer dispuesto por primera vez a considerar la independencia de Timor Oriental, la antigua colonia portuguesa que Yakarta se anexion¨® en 1975 y en donde han muerto unas 200.000 personas, una cuarta parte de la poblaci¨®n, v¨ªctimas de la represi¨®n o por enfermedades derivadas de la inanici¨®n. La inesperada propuesta de Indonesia, que hasta ahora s¨®lo barajaba conceder un r¨¦gimen de autonom¨ªa para Timor Oriental, fue recibida con escepticismo en Lisboa tanto por el Gobierno como por los l¨ªderes independentistas en el exilio.

Pocas horas antes de que representantes de Indonesia y Portugal se reunieran en la sede de Naciones Unidas en Nueva York para reanudar el di¨¢logo sobre Timor, el ministro de Informaci¨®n indonesio, Yunus Yosfiah, daba la sorpresa al t¨¦rmino de una rutinaria reuni¨®n del Gabinete: "Va a ser concedida una amplia autonom¨ªa a Timor Oriental. Si la mayor¨ªa de la poblaci¨®n no la acepta, se sugerir¨¢ a la Asamblea Consultiva del Pueblo [Parlamento] tras las pr¨®ximas elecciones [7 de junio] que considere que Timor Oriental pueda romper con Indonesia".Yosfiah tambi¨¦n anunci¨® que su Gobierno iba a excarcelar al l¨ªder de la resistencia independentista timorense, Jose Xanana Gusmao, detenido en 1992, para que salga de la prisi¨®n de alta seguridad de Cipinang, en las afueras de Yakarta, y pase a la situaci¨®n de "arresto especial". El ministro de Exteriores, Al¨ª Alatas, aclar¨® poco despu¨¦s que, aunque el sistema legal indonesio no admite la detenci¨®n domiciliaria, "Xanana saldr¨¢ de la c¨¢rcel para permanecer en una casa".

El 28 de noviembre de 1975, el Frente Revolucionario para la Independencia de Timor Oriental (Fretilin) proclam¨® la independencia del territorio, ocupado por los portugueses desde el siglo XVI, tras haber tomado por las armas la capital, Dili. Una semana despu¨¦s, las tropas de Yakarta invadieron la antigua colonia portuguesa para anexionarse a Ingeniosa, en una decisi¨®n que no fue reconocida por la ONU, que sigue considerando a Portugal como ¨²nica potencia administradora. A lo largo de m¨¢s de 20 a?os de represi¨®n de la insurrecci¨®n independentista y de hambrunas provocadas por los recortes de suministros y los desplazamientos forzosos de poblaci¨®n, m¨¢s de 200.000 personas han muerto en Timor Oriental, seg¨²n datos de grupos humanitarios y religiosos, que han sido rechazados por Yakarta.

La concesi¨®n del Premio Nobel de la Paz en 1996 al obispo de Dili Carlos Felipe Ximenes Belo y al dirigente de la resistencia en el exilio Jose Ramos Horta sac¨® al conflicto de Timor del olvido internacional, y, tras la ca¨ªda de Suharto, en mayo del a?o pasado, el nuevo presidente indonesio, Yusuf Habibie, propuso por primera vez la concesi¨®n de un estatuto de autonom¨ªa para el antiguo territorio portugu¨¦s. La necesidad del Gobierno de Yakarta de salir de su aislamiento internacional para superar la grave crisis econ¨®mica que sufre el pa¨ªs ha sido, seg¨²n los observadores diplom¨¢ticos en Indonesia, la causa de su radical giro ante el conflicto de Timor.

Las autoridades de Lisboa recibieron ayer con escepticismo la iniciativa indonesia. Aunque el presidente Jorge Sampaio salud¨® en un primer momento el paso dado por Yakarta, un portavoz del Ministerio de Exteriores precis¨® poco despu¨¦s que se iba a "verificar a trav¨¦s de canales adecuados, en especial de Naciones Unidas, el sentido exacto de la declaraci¨®n del Gobierno indonesio".

Tambi¨¦n desde Lisboa, Ramos Horta asegur¨® que la resistencia timorense "sigue desconfiando del grupo de mentirosos de Yakarta, mientras se incrementa la represi¨®n sobre el terreno". En los ¨²ltimos seis meses han muerto 50 civiles en Timor y miles de personas se han visto forzadas a huir de las zonas rurales, donde el Ej¨¦rcito indonesio ha armado a los partidarios de mantener el territorio bajo el control de Yakarta.

Sin embargo, el ministro de Exteriores brit¨¢nico, Robin Cook, consider¨® que la propuesta indonesia era "un paso en la buena direcci¨®n".