Internautas con canas

En el aula de inform¨¢tica del Centro de D¨ªa San Ildefonso de Granada el mundo parec¨ªa ayer haberse vuelto del rev¨¦s. Los alumnos eran chavales y chavalas de entre 65 y 80 a?os y el profesor, un se?or muy serio de 19 a?os. ?Y la asignatura? La pendiente para la gran mayor¨ªa de la poblaci¨®n espa?ola y m¨¢s a¨²n para la de avanzada edad: los ordenadores y, especialmente, Internet. La Consejer¨ªa de Asuntos Sociales de la Junta, de la que depende el mencionado centro, y la Fundaci¨®n La Caixa han puesto en marcha en Andaluc¨ªa un programa para acercar la inform¨¢tica a los m¨¢s mayores. El proyecto ya funciona en las aulas que la Consejer¨ªa tiene en Sevilla, M¨¢laga y C¨®rdoba y ayer comenz¨® en Granada. El objetivo, seg¨²n explica la delegada de Asuntos Sociales en esta provincia, Mar¨ªa Jos¨¦ S¨¢nchez, "es que los mayores aprendan a conectarse y navegar por Internet, sepan c¨®mo mandar y recibir un correo electr¨®nico, se familiaricen con la reproducci¨®n de los CD-Rom multimedia e, incluso, se inicien en el manejo de procesadores de texto y hojas de c¨¢lculo". Para ello, la Consejer¨ªa ha creado un curso de iniciaci¨®n en el que se han inscrito 40 alumnos y otros 31 permanecen en lista de espera, al no poder ser atendidos en este primer grupo debido a la gran demanda. La mayor¨ªa de ellos no han utilizado nunca un ordenador y ayer mostraban el mismo desconcierto que un ni?o ante las primeras clases de caligraf¨ªa. "Esto es para m¨ª como un mueble", comenta Pepita Escalante, de 60 a?os, se?alando el ordenador, "y me tienen que explicar para qu¨¦ sirve cada cosa". Los 19 a?os del profesor, Fernando Rodr¨ªguez, parecen confirmar que es la juventud quien mejor se lleva con las nuevas tecnolog¨ªas. En la clase de ayer, la segunda de las 12 que impartir¨¢, mostr¨® a sus alumnos c¨®mo manejar el rat¨®n y algunas operaciones b¨¢sicas del sistema operativo Windows 95. "Lo primero que hice fue desmitificar el ordenador. Llegan con mucho respeto a la m¨¢quina y creen que hace m¨¢s cosas de las que realmente puede", recuerda. Rodr¨ªguez, que tambi¨¦n ha trabajado con ni?os en otras ocasiones, asegura que la ense?anza con mayores requiere "paciencia y mano izquierda". "Cada persona quiere llevar las clases seg¨²n sus intereses. Y el principal problema consiste en que no es un grupo homog¨¦neo. Algunos ya han usado ordenadores antes y aqu¨ª se aburren un poco y a otros les cuesta mucho aprender las tareas b¨¢sicas". Francisco Garc¨ªa y Rafael P¨¦rez, de 69 y 76 a?os respectivamente, han acogido con ilusi¨®n lo que ellos consideran "una nueva experiencia". No conocen mucho sobre Internet, pero saben que a trav¨¦s de ella "uno puede echarse novia y mandarle cartas". Ambos reconoce que "al principio" les resultar¨¢ dif¨ªcil hacerse con el manejo del ordenador, "sobre todo por los nombres tan raros que tienen las cosas". El profesor, consciente de esta dificultad, trata de no usar t¨¦rminos t¨¦cnicos y de ofrecer una ense?anza personalizada. "El lenguaje inform¨¢tico es complicado. No se les puede hablar de hardware o software. Para referirme a la CPU les digo que son las tripas del ordenador y dejo que cada alumno asimile lo que pueda, sin pretender que todos alcancen el mismo nivel de conocimientos". Fernando Rodr¨ªguez explica, en cualquier caso, que el objetivo del curso no es convertir a los mayores en unos expertos inform¨¢ticos, sino que "pierdan el miedo a los ordenadores y aprendan a desenvolverse con ellos sin muchos problemas".