"Mi marido muri¨® porque ocultaron el peligro"
"Me lo han matado. Me han matado a mi marido los que no informaron de que pod¨ªa haber bombas en la playa". C¨¢ndida Lasbats, la viuda de Juan Manuel Sarmiento Somoza, el jubilado de Manresa que perdi¨® la vida en la explosi¨®n del primer artefacto en las playas de Salou, est¨¢ convencida de que la muerte de su marido se debe en gran parte a que el Ayuntamiento de Salou no inform¨® de que hab¨ªa una campa?a contra los intereses tur¨ªsticos de la costa en este municipio. No s¨®lo perdi¨® su marido, sino que vivi¨® un mal sue?o cuando vio que en un primer momento se apuntaba la hip¨®tesis, ahora descartada por la Guardia Civil, de que pod¨ªa haber sido ¨¦l mismo el que estaba manipulando el artefacto para dejarlo en la playa. Para la viuda de Sarmiento, la campa?a contra los intereses tur¨ªsticos de Salou es una evidencia e intentar esconderlo ha roto su familia. Cuando han pasado s¨®lo dos semanas de la explosi¨®n que cost¨® la vida a Juan Manuel Sarmiento, su mujer a¨²n tiene abiertas las heridas de todo lo que pas¨® en el que era su primer fin de semana de la temporada en la playa. Recuerda todo lo que dijeron y publicaron los medios de comunicaci¨®n sobre la posible relaci¨®n de la v¨ªctima con la colocaci¨®n del explosivo. Convencida de la absoluta inocencia de su marido, C¨¢ndida Lasbats no entiende c¨®mo se le relacion¨® con el trabajo con explosivos cuando su marido "s¨®lo hab¨ªa trabajado en la central t¨¦rmica de Cercs" y "no hab¨ªa tenido nunca ni una escopeta de balines". Pero lo que m¨¢s la sulfura es que no se informase de las amenazas que hab¨ªa recibido el municipio. "Lo hicieron s¨®lo para no alarmar a los turistas y no perder clientes". Le gustaba andar Juan Manuel se hizo el remol¨®n antes de ir a Salou. En septiembre perdi¨® a su madre despu¨¦s de una larga enfermedad, antes hab¨ªa perdido a su padre, tambi¨¦n despu¨¦s de largos a?os de invalidez, y el luto familiar casi coincidi¨® con la llegada de los primeros fr¨ªos. Despu¨¦s, la familia se traslad¨® de Cercs a Manresa, donde viv¨ªa desde hac¨ªa s¨®lo un mes y medio. Y todas estas circunstancias hab¨ªan retrasado la visita a su apartamento de Salou. Mal d¨ªa eligieron para ir. Recuerda que a "Juan Manuel le gustaba mucho andar" y el s¨¢bado por la ma?ana sali¨® a hacer un poco de ejercicio. "Hab¨ªamos llegado al apartamento el viernes pasadas las ocho de la tarde con la intenci¨®n de volver el lunes a Manresa", explica C¨¢ndida. "El s¨¢bado, Juan Manuel sali¨® a pasear. Era muy andador y antes de salir le dije: "No vuelvas tarde, que tenemos que ir a comprar". Yo me qued¨¦ arreglando un poco la casa y esper¨¢ndolo. Pero eran casi las diez de la ma?ana y me extra?¨® su tardanza. Mi hija se visti¨® y sali¨® a buscarle. Antes de llegar a la arena ya se encontr¨® un guardia civil que, despu¨¦s de identificarla, le explic¨® que mi marido hab¨ªa tenido un accidente. Es horrible. Mi hija lleg¨® a casa deshecha, acompa?ada de miembros de la Cruz Roja. Me intentaron explicar el accidente. Primero pens¨¦ que le hab¨ªan atropellado, luego que hab¨ªa ca¨ªdo por un acantilado, y cuando me dijeron que le hab¨ªa explotado una bomba me exalt¨¦ mucho y me puse muy nerviosa". "Me han matado a mi marido sin que ¨¦l tuviese ninguna culpa", asegura la viuda, que se lamenta de que tuviese semejante muerte una persona que hab¨ªa superado una seria intervenci¨®n quir¨²rgica por un derrame cerebral como consecuencia de un accidente laboral. Ha perdido lo que m¨¢s quer¨ªa y la esperanza de pasar una feliz jubilaci¨®n despu¨¦s de a?os de sufrir por su familia y por la enfermedad de su marido. Y ha perdido tambi¨¦n su amor a Salou, adquirido en los ¨²ltimos cinco a?os, desde que compraron el apartamento. "No volver¨¦ m¨¢s", dice.
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