La hacienda del candidato a concejal
Horacio G¨®mez, presidente del Celta y "n¨²mero dos" del PP en Vigo, tiene buenas relaciones con la Agencia Tributaria e hizo fortuna como subastero
El 21 de febrero, domingo, durante el descanso del partido de f¨²tbol que el Celta de Vigo jugaba contra el Barcelona, se registr¨® en el palco presidencial del estadio Bala¨ªdos una tensa escena, ajena a los puntos en litigio.Alfredo Rodr¨ªguez Millares, empleado de Horacio G¨®mez Ara¨²jo, quien le sac¨® de sus empresas para hacerle director general del club cuando ¨¦l mismo lleg¨® a su presidencia, se acerc¨® a Dolores Villarino, diputada y portavoz municipal socialista, para advertirle en mal tono que dejaran de investigar a G¨®mez. "O haremos lo mismo con vosotros, porque todos tenemos algo que esconder", le espet¨®.
Ese mismo d¨ªa, el campo estaba empapelado por el diario oficial del club con la foto del presidente llenando la portada y un solo t¨ªtulo a toda pastilla tipogr¨¢fica: "Salv¨® al Celta, ahora puede salvar a Vigo".
Xos¨¦ Cui?a, secretario general del PP gallego, hab¨ªa definido d¨ªas antes a G¨®mez como "un modelo de empresario trabajador y honrado", al presentarle como n¨²mero dos de la candidatura popular en las elecciones municipales del 13 de junio. G¨®mez desempe?ar¨¢ las concejal¨ªas de Urbanismo, Hacienda y Deportes si el PP gana y vuelve a gobernar en la ciudad viguesa. Javier Arenas, secretario general del partido, pas¨® por Vigo para confirmarle y felicitar a sus compa?eros por tan estupendo fichaje.
El presidente del Celta no quiso ser candidato a alcalde aunque el PP se lo hab¨ªa propuesto. "Mientras presida el Celta, no entrar¨¦ en pol¨ªtica", prometi¨® entonces. "El club est¨¢ por encima de partidos e ideolog¨ªas", a?adi¨®. Pero G¨®mez se demuestra m¨¢s cumplidor de sus promesas al ap¨®stol Santiago.
Despu¨¦s de eliminar al Aston Villa en la Copa de la UEFA y renegar de la pol¨ªtica, G¨®mez se enfund¨® un traje de peregrino, cosido a medida y con la mejor estame?a, para andar el tramo gallego del Camino de Santigo y, como buen cristiano, agradecer al Ap¨®stol los ¨¦xitos deportivos del equipo.
Gesto de humildad
En los medios locales fue presentada esta caminata como un gesto de humildad. Y, rodeado G¨®mez de c¨¢maras, se apreci¨® en la Xunta y el Arzobispado la promoci¨®n que supon¨ªa para el propio Xacobeo 99.En su peregrinaje, curiosamente, G¨®mez estuvo acompa?ado de un amigo vestido de igual guisa, Jos¨¦ Mar¨ªa N¨²?ez, que en Vigo fue jefe de Recaudaci¨®n y, como tal, responsable de la adjudicaci¨®n de subastas de embargos por Hacienda.
Sin dem¨¦rito para su capacidad gestora en la distribuci¨®n de bebidas, a G¨®mez se le reconoce sobre todo su fortuna como subastero. No es una actividad brillante, pero tampoco sencilla. ?l ha tenido que pasar muchas horas en los juzgados. Y hay que saber esperar. Esperar a que los dem¨¢s no pujen por encima de la propia puesta o a que la breva caiga por su propio peso. Algo as¨ª sucedi¨® con la adquisici¨®n de una nave de 7.000 metros cuadrados en Vigo.
Hacienda valor¨® en 1990 esa nave en 125 millones de pesetas. Su subasta fue declarada desierta en 1992 despu¨¦s de dos convocatorias, por lo que se procedi¨® a su adjudicaci¨®n directa, que recay¨® en la sociedad Disgobe, propiedad de G¨®mez, que pag¨® 12,5 millones de pesetas.
"Todo el procedimiento fue transparente y cumpliendo la legalidad", asegura N¨²?ez, que aventura que la baja cotizaci¨®n de la nave pudo estar motivada por sus cargas, que sumaban m¨¢s de 300 millones s¨®lo por las hipotecas de diversos organismos -todas fueron levantadas despu¨¦s por Hacienda-, y porque Disgobe compr¨® ¨²nicamente las licencias para actuar sobre el solar, que fue dividido y reedificado en cinco partes.
Por las dos primeras, de 840 y 566 metros cuadrados, Disgobe recibi¨® en 1995 las cantidades de 35 y 18 millones de pesetas respectivamente. En total, el inmueble reformado fue vendido por 240 millones, seg¨²n datos del Registro.
Para ¨¦sta y otras operaciones de importancia, G¨®mez ha contado siempre con el asesoramiento de otro de sus mejores amigos, Francisco Javier Alonso Fern¨¢ndez, a quien llev¨® en 1995 al Consejo de Administraci¨®n del club como vicepresidente responsable de asuntos econ¨®micos.
Alonso es adem¨¢s propietario de Temasa, una conocida gestor¨ªa viguesa que ha ca¨ªdo en el ojo de la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n despu¨¦s de una denuncia presentada por un arquitecto local, Jos¨¦ Antonio Mart¨ªn Curty.
El jefe de Inspecci¨®n de la Agencia Tributaria en Vigo, Jos¨¦ Antonio Gil del Campo, fue destituido hace unas semanas de su cargo por los indicios que se derivan de los documentos aportados por Mart¨ªn. Gil escribi¨® en colaboraci¨®n un libro titulado C¨®mo pagar menos a Hacienda y ha ganado millones impartiendo cursos y conferencias de formaci¨®n profesional a asesores fiscales.
Alonso transfiri¨® en 1994, subrepticiamente, un coche Mitsubishi Montero a la esposa de Gil. Y uno de sus principales clientes, la constructora Vialmar, SA, vendi¨® a Gil y otro inspector de la Agencia Tributaria, Fernando Trujillo Urdanoz, actual jefe de Inspecci¨®n de la de Pontevedra, pisos de lujo a precio de ganga en una operaci¨®n que, seg¨²n la denuncia, tambi¨¦n defraud¨® a Hacienda.
Afici¨®n com¨²n
Trujillo ha evitado conversar con este peri¨®dico. S¨ª lo hizo, en cambio, Asdr¨²bal Casares, hasta hace ocho meses jefe de Inspecci¨®n de la Agencia Tributaria en A Coru?a. ?ste entabl¨® amistad con G¨®mez hace nueve a?os, cuando era inspector en Vigo. "Por nuestra afici¨®n com¨²n a andar en moto por el monte", explic¨®.Desde que volvi¨® de A Coru?a a la Inspecci¨®n de Vigo, Casares ha frecuentado el chal¨¦ ilegal de G¨®mez
[ver EL PA?S del pasado martes], ahora para jugar al f¨²tbol, aunque dice no ser "un asiduo".
El presidente del Celta re¨²ne cada jueves a sus amigos para disputar un partidillo en el campo que ha dispuesto en los jardines de su vivienda. En esas pachangas no suelen fallar nunca Alonso y Germ¨¢n Mart¨ªnez Serodio, consejero delegado de Vialmar, SA.
Acaso fuera esto lo que Rodr¨ªguez tem¨ªa que se supiera al amenazar a la socialista Villarino.
M¨¢s obras ilegales
El Ayuntamiento de Redondela (Pontevedra) orden¨® en 1996 suspender cautelarmente unas obras de ampliaci¨®n de Disgobe, empresa hiperrentable de Horacio G¨®mez, por carecer de licencia municipal. La alcald¨ªa ordenaba tambi¨¦n "la retirada o precintado de los materiales preparados para ser utilizados (...) y la maquinaria (...) en el caso de que el interesado no lo hiciera en (...) cuatro d¨ªas". Esta semana han ca¨ªdo en saco roto las llamadas de este peri¨®dico a esa corporaci¨®n para conocer los cap¨ªtulos siguientes del expediente, aunque sus resultados son evidentes: donde se denunciaba la construcci¨®n de un forjado de 50 metros de largo por 7,50 de ancho ahora hay una nave.G¨®mez ha fundado seis empresas, dedicadas todas a la fabricaci¨®n y distribuci¨®n de bebidas y productos asociados. Con un capital global de 35,5 millones, facturar¨¢n m¨¢s de 5.000 millones.
Disgobe de Bebidas fue la primera y es la estrella del grupo. En 1996, con un capital social de diez millones, factur¨® 1.730 millones y obtuvo 21 de beneficios. En 1997 aument¨® en un mill¨®n su capital, factur¨® 2.453 millones y obtuvo 500 millones de beneficio neto. Fuentes del sector lo consideran inveros¨ªmil "si realmente se limitan a trabajar en lo que dicen".
La utilizaci¨®n de Disgobe en la compra y venta parcelada de una nave en las afueras de Vigo demuestra que se han a?adido otras actividades a las que declara.
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