MILAGROS GARC?A CRESPO EX PRESIDENTA DEL TRIBUNAL DE CUENTAS "Ninguna instituci¨®n p¨²blica puede evitar al 100% el enchufismo"

Milagros Garc¨ªa Crespo (Bilbao, 1934) recibir¨¢ hoy la medalla de oro del Tribunal Vasco de Cuentas P¨²blicas por su relevante actuaci¨®n como primera presidenta de esta instituci¨®n entre 1989 y 1991. En una mirada retrospectiva, recuerda que los recelos que depertaban los informes del tribunal en sus primeros a?os de vida se han ido atemperando con el paso del tiempo, aunque la incomodidad que suscita la actuaci¨®n del ¨®rgano fiscalizador se mantiene. Tras su paso por esta instituci¨®n, march¨® a Madrid donde fue consejera (1991-1994) y m¨¢s tarde presidenta (1994-1997) del Tribunal de Cuentas del Estado. Ahora, con la experiencia que le dan los diez a?os en ¨®rganos fiscalizadores, reconoce que ninguna instituci¨®n p¨²blica puede evitar al 100% el enchufismo. Pregunta. ?C¨®mo valora los diez a?os de vida del Tribunal Vasco de Cuentas? Respuesta. El tribunal est¨¢ muy consolidado. No se ha mermado en nada el respeto que se tiene hacia la instituci¨®n. Se habla de sus informes, pero no se pone en duda la categor¨ªa t¨¦cnica de ellos. Controlar al sector p¨²blico despierta una situaci¨®n de incomodidad entre los auditados, pero jam¨¢s he visto un menoscabo de los trabajos del tribunal. P. Usted dirigi¨® el tribunal en sus primeros a?os de vida. ?Generaba mucha desconfianza en la Administraci¨®n hace diez a?os el trabajo del ¨®rgano fiscalizador? R. El tribunal es un vigilante permanente que crea incomodidad. En mi tiempo tuve que pelear mucho, porque en los primeros a?os la desconfianza y los recelos eran mucho m¨¢s grandes que ahora. Hab¨ªa que demostrar una exquisita neutralidad, que tanto el Ejecutivo como el Parlamento nos permitieron. Esa incomodidad sigue hoy en su justa medida. Nunca se sabe lo que puede encontrar en una de sus investigaciones. P. ?Es el tribunal un l¨¢tigo de los gestores p¨²blicos? R. Ning¨²n ¨®rgano de control tiene que ser un l¨¢tigo. El tribunal cumple dos funciones: detecta si hay situaciones graves dentro de la Administraci¨®n -que es muy dific¨ªl que se produzcan-, y obliga a trabajar correctamente porque los responsables de la Administraci¨®n saben que van a ser auditados. El Gobierno vasco suele seguir, por lo general, sistemas adecuados en lo que se refiere a organizaci¨®n de ingresos y gastos y a contrataci¨®n de personal. S¨®lo se le puede recomendar alg¨²n m¨¦todo para mejorar la eficacia. Es en los otros niveles administrativos, ayuntamientos y diputaciones, donde se ha conseguido que trabajen mejor al exigirles ciertas garant¨ªas. P. ?Cree que la mala fama que tiene la Administraci¨®n entre los ciudadanos por su lentitud en algunos casos y el enchufismo es merecida? R. Controlar el enchufismo al 100% es imposible. P. ?Por qu¨¦? R. Pues porque los que juzgan una oposici¨®n o una selecci¨®n son humanos. Pero no creo que la situaci¨®n de enchufismo sea especialmente grave en el Pa¨ªs Vasco. No se puede negar que alg¨²n caso de enchufismo se puede dar en alguna instituci¨®n porque es algo inherente a las personas. Cuando estaba en la Universidad me recomendaban tranquilamente, incluso por escrito, que aprobara a determinadas personas, lo que me provocaba una gran extra?eza. Ahora nadie se atrever¨ªa a sugerir nada por el estilo. P. ?Las recomendaciones del Tribunal Vasco de Cuentas han calado en la Administraci¨®n? ?Sirven para algo? R. Desde luego que s¨ª. P. ?Est¨¢ la labor del tribunal condicionada al ser elegidos sus siete miembros por los partidos pol¨ªticos? R. ?Hay un sistema menos malo? Para m¨ª que tenga siete miembros es una garant¨ªa porque existe un equilibrio y una ampl¨ªsima representaci¨®n de los partidos. Jam¨¢s me ha dicho un pol¨ªtico lo que tengo que poner en un informe. P. El actual presidente del Tribunal Vasco de Cuentas se ha propuesto comprobar si la Administraci¨®n cumple sus objetivos y gasta el dinero con eficacia. ?Es posible? R. Me parece una meta muy loable, pero tengo dudas de que existan medios suficientes como para poder realizarla. Algunas aproximaciones a la eficacia se pueden hacer a trav¨¦s de los informes, pero si el list¨®n se pone muy alto, a lo mejor no se puede saltar esa altura. La vida hace tener unos objetivos modestos que se van cumpliendo y por ese camino tiene que seguir avanzando el tribunal.