Un 'topo' en la polic¨ªa municipal

Antoni Guirado entr¨® a trabajar en la polic¨ªa local de Olot a mediados de 1984, aunque ocup¨® el puesto de jefe de ese cuerpo policial en Torell¨®, en comisi¨®n de servicios, entre los a?os 1990 y 1991. En esta ¨¦poca pudo conocer a los detenidos de Osona, el matrimonio Ramon Ullastre y Montserrat Teixidor, y empezar a planear el secuestro de la farmac¨¦utica Maria ?ngels Feliu.Despu¨¦s de mantener algunas discrepancias con los responsables municipales volvi¨® a incorporarse a su puesto de Olot. Primero estuvo trabajando con el grupo de polic¨ªa judicial y despu¨¦s pas¨® a la patrulla normal. Guirado no particip¨® en la investigaci¨®n del secuestro, que durante las primeras horas corri¨® a cargo de la polic¨ªa local de la capital de la Garrotxa, aunque los investigadores no dudan de que actu¨® con enorme efectividad como topo de la banda y comunic¨® a sus compinches todas las incidencias de la investigaci¨®n. Se da por hecho que desbarat¨® diversas entregas de dinero pactadas entre la familia de Maria ?ngels Feliu y los secuestradores porque les avis¨® de la operaci¨®n que se hab¨ªa preparado para detenerles.

La Guardia Civil trabaja con la hip¨®tesis de que Guirado era quien conduc¨ªa el coche con el que Maria ?ngels Feliu fue secuestrada, a punta de pistola, en el garaje de su domicilio. Los agentes locales explicaron ayer que a la hora en que se llev¨® a cabo el secuestro, las 21.45 del 20 de noviembre de 1992, no hab¨ªa patrullas en las calles de Olot porque se realizaba el cambio de guardia.

Actitud sospechosa

Guirado lo sab¨ªa. S¨®lo cometi¨® un error: dejarse ver en una actitud sospechosa ante la farmacia poco antes de perpetrarse el secuestro. Una vecina comunic¨® este hecho a la Guardia Civil, que incluso lleg¨® a interrogar a Guirado. Finalmente, sin embargo, se acab¨® descartando la investigaci¨®n sobre el agente. El jefe de la polic¨ªa local de Olot asegur¨® ayer que ni ¨¦l ni la alcald¨ªa, que entonces ocupaba el actual consejero de Pol¨ªtica Territorial y Obras P¨²blicas de la Generalitat, Pere Macias, tuvieron conocimiento de que desde la Guardia Civil se investigara a un guardia urbano.Algunos de los hombres del cuerpo municipal de polic¨ªa s¨ª ten¨ªan conocimiento de este extremo y uno de ellos afirmaba ayer: "Siempre me ha quedado una espina clavada. Me preguntaba: "?Y si fuera verdad? ?Y si fuera ¨¦l?".