Dimite el presidente de Compaq, el l¨ªder mundial de ordenadores dom¨¦sticos

"En Internet no hay festivos". Era una de las frases favoritas de Eckard Pfeiffer, el presidente de Compaq, l¨ªder mundial de ordenadores dom¨¦sticos. Quiz¨¢ por eso Pfeiffer anunci¨® su dimisi¨®n el domingo en un escueto comunicado que no dec¨ªa por qu¨¦ ni para qu¨¦. Pfeiffer ha sido v¨ªctima de su propia pol¨ªtica de guerra de precios de ordenadores, que ¨²ltimamente llegan a venderse en Estados Unidos a 300 d¨®lares, cuando no se regalan. La pasada semana, las acciones de Compaq bajaron un 22%. Eckard Pfeiffer, un tejano de origen alem¨¢n, cogi¨® la m¨¢xima responsabilidad de Compaq en 1991. En ocho a?os la compa?¨ªa pas¨® de tener un 3,5% de cuota de mercado de PC al 17% actual, que le han dado el liderazgo mundial del sector. En este tiempo, Pfeiffer, de 57 a?os de edad, impuls¨® la compra de Tandem y, el pasado julio, de Digital, una adquisici¨®n que, seg¨²n muchos analistas financieros, se le iba a indigestar a Compaq. Gracias a las adquisiciones y a una agresiva pol¨ªtica de precios, Compaq conquist¨® el pasado a?o el liderazgo mundial de ordenadores dom¨¦sticos, desbancando a IBM.

Sin embargo, el reinado le lleg¨® en un momento en que el mercado flaquea. Recientemente, Compaq particip¨® en una promoci¨®n para regalar 10.000 ordenadores a cambio de que el agraciado recibiera publicidad por el ordenador y a trav¨¦s de Internet. Aparte de esta iniciativa, en estos momentos los ordenadores dom¨¦sticos de gama baja se venden a 300 d¨®lares (45.000 pesetas) en EE UU.

Desde hace unos meses, Pfeiffer, viendo el cambio de tendencia, quiso reorientar su compa?¨ªa. "No hay alternativa para las empresas; o est¨¢n en Internet o no tienen futuro. Compaq quiere pasar de l¨ªder mundial como fabricante de PC a l¨ªder mundial de tecnolog¨ªa Internet", declaraba Pfeiffer hace dos meses a Ciberp@¨ªs.

Pfeiffer no ha tenido tiempo para su nuevo reto. La pasada semana, en medio de la bienal de Compaq organizada en Houston, su sede social, se filtraban los resultados financieros de la empresa. Pese a ganar 40.000 millones de pesetas en el primer trimestre, sus ganancias eran la mitad de los previsto por los analistas de Wall Street. ?stos le achacan a Compaq el haberse canibalizado a s¨ª mismo a costa de ganar cuota de mercado.

Compaq, a la vez, intent¨® la cuadratura del c¨ªrculo al vender ordenadores en las tiendas y, a la vez, en la red, en una estrategia para detener la marcha imparable de su competidor Dell, que crec¨ªa desde hace tres a?os a ritmos superiores al 50% y le iba comiendo mercado.

Buena salud

Para los analistas del sector inform¨¢tico, la crisis de Compaq nada tiene que ver con el sector, que sigue gozando de excelente salud. El problema de Compaq es el mismo al que se enfrentan otros grandes fabricantes como Dell y Gateway, aunque en beneficio de ¨¦stos juegan unas estrategias de menos vaiv¨¦n. Todos ellos intentan lo que intentaba Pfeiffer antes de dimitir: ampliar su negocio por arriba y por abajo, es decir, vender toda la tecnolog¨ªa de Internet que necesitan las empresas para ser competitivas y, por abajo, vender los peque?os aparatos, los internetdom¨¦sticos (agendas electr¨®nicas), que dejan un buen beneficio. Era el lema que lanz¨® Pfeiffer a su empresa pocas horas antes de dimitir. En Internet, la econom¨ªa nunca se para. Ni en domingo.