Los aliados autorizan el bloqueo naval para dejar sin petr¨®leo ni armas a Yugoslavia
"La OTAN est¨¢ decidida a ganar", dijo ayer Bill Clinton. Fue un mensaje repetido en Washington por todos los l¨ªderes de la Alianza al hablar de la guerra de Kosovo. En la primera jornada de la cumbre de su 50? aniversario, la OTAN expres¨® con una sola voz el modo de proseguir la guerra: intensificaci¨®n de la campa?a de bombardeos contra Yugoslavia; incremento de la presi¨®n econ¨®mica, con particular ¨¦nfasis en el suministro de petr¨®leo, y aparcamiento de la decisi¨®n sobre el env¨ªo de tropas terrestres. La primera medida concreta se ha conocido esta madrugada: el bloqueo naval a todo barco que transporte combustible o armas a Yugoslavia.
"Enviamos hoy", dijo Clinton, "un mensaje de unidad y determinaci¨®n sobre la continuidad de la campa?a a¨¦rea por el tiempo necesario". Como prueba de que esa campa?a quiere hacer el mayor da?o posible, en las dos noches anteriores al comienzo de la cumbre los aliados bombardearon una residencia del presidente yugoslavo y destruyeron la sede central de su televisi¨®n. "Nuestra estrategia de ataques a¨¦reos no va a cambiar", dijo anoche Javier Solana, secretario general de la OTAN, sintetizando el consenso de la cumbre. Pero a?adi¨® que la campa?a s¨®lo cesar¨¢ si Milosevic se pliega sin condiciones a las exigencias internacionales. Ya en la ma?ana, Clinton y el primer ministro brit¨¢nico, Tony Blair, adelantaron lo que luego ser¨ªa expresado por el resto: propuestas como la transmitida por el exprimer ministro ruso V¨ªktor Chernomirdin "quedan muy lejos".
En la reuni¨®n de dos horas que se consagraron a Kosovo antes de la ceremonia del aniversario, los aliados proclamaron que la OTAN no piensa perder esta guerra, pero que, de momento, cree que puede ganarla desde el aire. "Estamos ganando, Milosevic est¨¢ perdiendo y ¨¦l lo sabe", les dijo a los jefes de Estado y de Gobierno el general Wesley Clark, comandante militar de la operaci¨®n aliada.
"Los bombardeos van a concentrarse cada vez m¨¢s en los nervios centrales del r¨¦gimen", se?al¨® luego Robin Cook, ministro de Exteriores brit¨¢nico. "Intensificaremos la campa?a a¨¦rea hasta ganar", proclam¨® Solana.
Algunos de los participantes aludieron a la necesidad de prepararse para una posible campa?a terrestre pero, seg¨²n fuentes de la secretar¨ªa general de la OTAN, lo hicieron de modo te¨®rico. El debate fue r¨¢pidamente cerrado con el apoyo a la decisi¨®n adoptada por Solana de pedir al mando militar que actualice sus planes para una hipot¨¦tica ofensiva terrestre. "Tomaremos la decisi¨®n en el momento apropiado, pero ¨¦ste no es el momento", dijo luego Cook.
Los nuevos elementos que, seg¨²n el portavoz de la Alianza, Jamie Shea, justifican esa actualizaci¨®n de los planes elaborados el pasado oto?o son los da?os causados a Yugoslavia por los bombardeos a¨¦reos, la aceleraci¨®n de la limpieza ¨¦tnica en Kosovo y la mayor presencia de fuerzas serbias en esa regi¨®n. Fuentes militares de la OTAN se?alaron que la puesta al d¨ªa no requerir¨¢ demasiado tiempo.
El incremento de la presi¨®n econ¨®mica sobre Yugoslavia fue el segundo acuerdo. Todos apoyaron el embargo petrolero decidido por la Uni¨®n Europea. "Se trata de que no llegue una gota de petr¨®leo a las fuerzas militares y policiales de Milosevic", dijo Cook. De hecho, esta madrugada, un alto funcionario de la OTAN confirm¨® que los ministros de defensa de la Alianza ya han ordenado al comandante supremo de las fuerzas aliadas en Europa, Wesley Clarck, que inicie los preparativos para "el bloqueo naval a Yugoslavia". Las fuerzas navales de la OTAN en el Adri¨¢tico "abordar¨¢n e inspeccionar¨¢n todo barco sospechoso de transportar combustible o armas a Yugoslavia". La medida, que tendr¨¢ que ser confirmada por el Consejo Atl¨¢ntico en los pr¨®ximos d¨ªas, confirma el ¨¦xito de la tesis defendida por EE UU frente a la negativa de pa¨ªses como Francia.
El bloqueo naval ya es efectivo. La ofensiva terrestre qued¨® pendiente de futuras reflexiones. En la reuni¨®n, la OTAN no quiso cerrar puertas a posibles futuras escaladas pol¨ªticas y militares pero prefiri¨® seguir apostando porque los bombardeos terminen convenciendo a Milosevic de que la Alianza no va a perder el pulso.
"Vamos a ganar esta batalla contra Milosevic y vamos a combatir hasta alcanzar nuestros objetivos", dijo Solana. Dos argumentos eran citados para justificar esta determinaci¨®n: la gravedad del desaf¨ªo que la limpieza ¨¦tnica supone para los valores aliados, y que la credibilidad de la OTAN y el futuro de su visi¨®n del mundo est¨¢n ahora en juego en los Balcanes.
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