?tica, pasi¨®n, ilusi¨®n
Antonio Romero, coordinador de IU en Andaluc¨ªa, dice que su formaci¨®n tiene muchas ganas de gobernar y, una vez concluyan las municipales, se abre a posibles acuerdos con el PSOE para conseguir alcald¨ªas. Hasta aqu¨ª, todo normal. Est¨¢n claras las ganas de mandar de IU en Andaluc¨ªa y de situarse en corporaciones, como las de C¨®rdoba y Ja¨¦n. Lo que ya no resulta tan normal es que acompa?e y justifique esta intenci¨®n con un cambio de actitudes en el grupo pol¨ªtico al que invita a su convite y, afirma, porque est¨¢n dispuestos a gobernar "con ¨¦tica, pasi¨®n e ilusi¨®n". Mal empezamos, no ya porque no dice que gobierne con estas tres notas, sino porque se las atribuye el que pide como si les pertenecieran, como si m¨¢s all¨¢ de su personal universo no existiera un pensamiento ¨¦tico, apasionante e ilusionante. Carece de cualquier l¨®gica y raz¨®n que una coalici¨®n, reducida a su m¨ªnima expresi¨®n porque ha expulsado a quienes, dentro de un programa de izquierdas, rechazaron la obediencia ciega a la filosof¨ªa anguitiana, que se ha mantenido, a?o tras a?o, en perfecta sinton¨ªa con un gobierno de derechas con el objetivo de impedir el gobierno de izquierdas, al tiempo que alcanzan pactos estellares con HB, cuya huella qued¨® impresa en Andaluc¨ªa, exija un comportamiento ¨¦tico. Eso podr¨ªa llamarse ver la paja en el ojo ajeno y no ver la viga en el propio. No parece que se reclame lo que se posee, ni sea expresi¨®n de un pensamiento coherente y maduro cuando se cierran los ojos al genocidio albano-kosovar, se apuesta por el principio de territorialidad en la Yugoslavia de Milosevic y en este Estado defiende una opini¨®n bien distinta. Este proceder y otros, como el de mantener las siglas Los Verdes en las candidaturas que presenta su coalici¨®n en Andaluc¨ªa, cuando este grupo se separ¨® de IU en el a?o 1997, lo que podr¨ªa revelar es que, al igual que el bien del enfermo es la salud, el fin del que no gobierna es el gobierno, aunque, en este caso, para conseguirse tengan que atribuirse tantas virtudes de pasi¨®n como las que niega al que necesita y dice el refranero espa?ol, dime de qu¨¦ presumes...
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