Luksic intenta un jaque mate a Bot¨ªn

El lunes 3 de mayo, Andr¨®nico Luksic Craig cobr¨® los 600 millones de d¨®lares (555,3 millones de euros, 92.400 millones de pesetas)del Banco Santander Central Hispano (BSCH) por vender su mitad en la sociedad OHCH (O"Higgins Central Hispano Holding), en la que, adem¨¢s del 43,5% del Banco Santiago, el primer banco chileno, est¨¢n las participaciones en el Banco Tornquist de Argentina, en el Asunci¨®n, de Paraguay, y Bancosur, de Per¨², y acto seguido present¨® su dimisi¨®n al cargo de presidente; un d¨ªa m¨¢s tarde, el 4 de mayo, fue a buscar sus cosas al viejo despacho del banco y se traslad¨® con ellas a la sede del grupo Qui?enco, el poderoso holding familiar, en el barrio residencial de Las Condes.A las 15,30 horas (nueve y media de la noche en Madrid) de ¨¦se mismo d¨ªa 4, estaba citada una reuni¨®n del directorio (consejo de administraci¨®n) de Qui?enco. Algo importante se estaba cociendo. No s¨®lo porque Andr¨®nico Luksic Craig o Luksic chico, como se le llama, hab¨ªa pasado algo menos de veinte a?os en el Banco Santiago, sino porque su grupo no pod¨ªa permanecer cojo, sin entidad financiera de referencia.

El viernes 30, Guillermo Luksic, hermano menor de Andr¨®nico, y presidente de Qui?enco, tuvo que desmentir rumores en el mercado: "Para nosotros el tema del Banco Santiago es un asunto cerrado", dijo. Ser¨ªa la ¨²ltima tarea de desinformaci¨®n, ante la apertura de los mercados, el lunes 3.

Oferta de compra

Lo que estaba cerrado, en rigor, era precisamente lo contrario: el lanzamiento de una oferta de adquisici¨®n de acciones (OPA) para comprar hasta el 45% del Banco Santiago a un precio de 9,6 pesos por acci¨®n, una operaci¨®n global de 900 millones de d¨®lares (833 millones de euros, 138.600 millones de pesetas).En medio de un clima de xenofobia creciente antiespa?ola, la oferta de grupo Luksic tuvo un efecto bals¨¢mico. Al fin, un grupo de capital nacional, el primero, en lugar de quejarse, apostaba. Y fuerte.

El primog¨¦nito de una familia originaria de Croacia lanzaba as¨ª un bombardeo en toda regla sobre Emilio Bot¨ªn, el hombre que un d¨ªa antes, el lunes 3, le hab¨ªa enviado el cheque.

Hijo de Policarpo Luksic, emigrante croata que se instal¨® en en la ciudad de Antofagasta en 1915 y cas¨® con una boliviana, Andr¨®nico Luksic Abaroa, esto es Andr¨®nico padre, estudi¨® derecho en la Universidad de Chile y regres¨® m¨¢s tarde a Antofagasta, donde contrajo matrimonio con Elena Craig, inglesa e hija de gerente de la compa?¨ªa minera Anaconda. En 1954, Luksic vendi¨® su primera mina de cobre, la fuente de su fortuna, a Nippon Steel. Pero ¨¦se mismo a?o, la familia tuvo heredero: nac¨ªa Andr¨®nico, el chico.

Luksic padre no s¨®lo hizo una gran fortuna sino que pas¨® casi ileso la prueba de fuego del capitalismo chileno: el Gobierno de Salvador Allende. Tuvo tanta mu?eca (como se identifica aqu¨ª la capacidad de negociaci¨®n) que lleg¨® a negociar con Allende en persona la venta de sus paquetes en algunas empresas y conserv¨® la propiedad en otras. Despu¨¦s de sufrir cierta hostilidad por su astucia, la familia Luksic, ya en el r¨¦gimen pinochetista, expandi¨® sus tent¨¢culos hasta convertirse en el primer grupo chileno. Por eso dicen en Santiago que el grupo Luksic es uno de los que contribuyen con la Fundaci¨®n Pinochet para solventar los gastos del ex dictador bajo arresto domiciliario en Londres.

Andr¨®nico chico y su dedicaci¨®n al sector financiero, especialmente al Banco Santiago, desde finales de los a?os setenta, tuvo bastante que ver con esa consolidaci¨®n. Los analistas coinciden. Tras visitar Madrid, en febrero pasado, cre¨ªa que las cosas con sus viejos (BCH) y nuevos socios (Santander) seguir¨ªan m¨¢s o menos igual. Pero se vio sorprendido cuando poco m¨¢s tarde recibi¨® en Santiago, de manos de un enviado especial de Bot¨ªn, un sobre con una oferta para comprarle su mitad en el OHCH.

?Le hab¨ªa hecho Bot¨ªn una oferta que, parafraseando a El Padrino, Luksic no podr¨ªa rechazar? Los expertos consultados en Santiago se?alan que Luksic intent¨®, antes de responder, conseguir apoyos internacionales para resistir la oferta. No los consigui¨®. "Nunca me olvidar¨¦ la informaci¨®n que el grupo Luksic envi¨® a la Superintendencia de Valores y Seguros. Era escueta. Aceptamos, dijeron por escrito, pura y simplemente la oferta", se?al¨® a ¨¦ste peri¨®dico el director de un banco de inversiones en Santiago.

Otro analista consultado estima que, al aceptar formalmente la oferta de Bot¨ªn el pasado 13 de abril, basada en las proyecciones del primer ejecutivo del BSCH, ?ngel Corc¨®stegui, el grupo Luksic ya sab¨ªa lo que iba a hacer. Se hab¨ªa desprendido, al vender su parte en OHCH, de las participaciones de bancos que no le interesaban o que por su envergadura en el mercado argentino, como era el caso del Banco Tornqusit, supon¨ªa riesgos muy elevados. Por tanto, Andr¨®nico chico puso en la mira a una pieza ¨²nica: el Banco Santiago.

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En Santiago, cuando se anunci¨® la oferta, nadie dud¨® en considerarla una operaci¨®n de jaque a Bot¨ªn. En Madrid, donde todo siempre tiene que ser el fruto de una componenda o pacto, se hablaba de una jugada controlada, que Bot¨ªn conoc¨ªa.Pero lo cierto es que ni el responsable de ¨¢rea de Am¨¦rica Latina, Francisco Luz¨®n, que volaba hacia Santiago, ni Bot¨ªn ni Corc¨®stegui tuvieron, si acaso, algo m¨¢s que rumores. Los mismos, bastante difusos, que circularon el viernes 30 en el mercado burs¨¢til santiaguino. Ante la sorpresa, el BSCH, que posee el importante Banco Santander Chile, anunci¨® que no mover¨ªa ficha y que se mantendr¨ªa en el Santiago, con una inversi¨®n que, seg¨²n la oferta de Luksic, vale 870 millones de d¨®lares (805 millones de euros, 133.980 millones de pesetas).

Pero es dif¨ªcil ver a Bot¨ªn como minoritario en el Banco Santiago si el grupo Luksic, tras el acuerdo alcanzado con el Hong Kong & Shangai Bank Corp (6,9% en el Santiago), consigue atraerse el paquete del 34,5% del Banco Central -la autoridad monetaria chilena- que intenta vender su participaci¨®n desde hace tiempo, y otros paquetes que flotaban en el mercado (un 8% real). Esta semana se podr¨¢ saber si el jaque lanzado por Andr¨®nico chico es, como todo indica, un jaque mate.