Erica Jong: "A la mujer que vive el sexo libremente se la juzga con severidad"

Creer que para la mujer han cambiado mucho las cosas en los ¨²ltimos 20 a?os es un derroche de optimismo, y no es verdad que la p¨ªldora le haya proporcionado la libertad sexual, seg¨²n la escritora Erica Jong, que ayer present¨® en Madrid su novela Bendita memoria (Alfaguara). "A la mujer que vive el sexo muy libremente se le sigue aplicando un juicio muy severo, y cuando busca esa libertad, se la considera casi como una prostituta", opina Jong.

Vestida de exquisito sport (traje pantal¨®n de lana fr¨ªa color gris y camiseta negra, muy escotada), pocas joyas pero rotundas (lujo americano), Erica Jong, jud¨ªa de Nueva York y una de las escritoras m¨¢s le¨ªdas de Norteam¨¦rica, considera que entre hombres y mujeres todo pod¨ªa ser m¨¢s sencillo. "Al final buscamos lo mismo: amor, salud, un buen trabajo y seguridad, pero a las puertas del siglo XXI queda mucho por solucionar", dice la autora de Miedo a volar, un cl¨¢sico de la literatura feminista con el que revolucion¨® a medio mundo en los a?os setenta en busca de satisfacci¨®n emocional y sexual y del que Henry Miller dijo que era como un Tr¨®pico de C¨¢ncer femenino.Perteneciente a una familia liberal ilustrada, Erica Jong, de 57 a?os, precisa que por feminismo entiende la igualdad pol¨ªtica y de derechos entre hombres y mujeres que, a su juicio, no se ha logrado. Tampoco a la hora de practicar el sexo. Preguntada sobre si los anticonceptivos han aportado a la mujer una mayor libertad en ese terreno, la autora de Miedo a los cincuenta responde: "Parece que hay una gran libertad sexual, pero no la hay. Los j¨®venes descubren que el sexo libre no es lo mismo para ellos que para ellas y la libertad sexual en la mujer es una contradicci¨®n. Cuando busca esa libertad se le aplica un juicio muy duro y ellas se dan cuenta de que no era eso lo que buscaban".

"Caso Lewinsky"

Para esta escritora, educada en la Universidad de Columbia y columnista de The New York Times y The Washington Post, el caso Lewinsky es el ejemplo que expresa c¨®mo en esta cultura la mujer "nunca tiene la raz¨®n".

Su nueva novela, Bendita memoria, mitad ficci¨®n y mitad documentaci¨®n hist¨®rica con algo de autobiograf¨ªa, es la historia de cuatro generaciones de mujeres que cuentan, a trav¨¦s de su memoria, el convulso siglo XX. Arranca con un momento dram¨¢tico: ambientada en Odessa, Rusia, en 1905, una joven jud¨ªa emigra a Estados Unidos tras haber perdido a su hijo de meses que se asfixi¨® mientras le daba el pecho ante un ataque de los cosacos. "He querido comenzar con este episodio porque me gusta situar a las mujeres en esas situaciones extremas que las mueve a dar grandes pasos en su evoluci¨®n. Es un texto de hero¨ªnas que demuestran que la memoria nos convierte en seres humanos", explica la autora de obras que han sido traducidas a m¨¢s de 20 idiomas.

Mucha ret¨®rica y muchos discursos en favor de la igualdad de la mujer, pero no estamos a¨²n en la era posfeminista y la muestra es que a¨²n hay muchos pa¨ªses en los que la mujer empieza a votar ahora, afirma esta escritora. "S¨®lo es el inicio. La poblaci¨®n femenina supone el 52% de la poblaci¨®n mundial, pero s¨®lo ocupa un 7% en cargos de responsabilidad. Y hasta que no tenga el poder pol¨ªtico y se nos juzgue por nuestras capacidades, y no s¨®lo por ser mujeres, las cosas seguir¨¢n igual", a?ade Jong.

Jong reconoce que su hija lo tiene m¨¢s f¨¢cil que ella: "Pero algo sigue siendo decepcionante en la relaci¨®n entre ambos, como la educaci¨®n de los hijos y las tareas dom¨¦sticas". La escritora no sabe si la mujer es m¨¢s feliz o no que antes. "S¨®lo s¨¦ que seguimos siendo algo secundario, el segundo sexo", insiste.