Los rostros en los carteles

Cada uno de los candidatos aspira a que su rostro en los carteles transmita una imagen que se gane la confianza o por lo menos los votos. En los carteles de Barcelona, casi todas son caras nuevas. Clos ha querido mostrar un aspecto senatorial y a la vez juvenil. En la fotograf¨ªa, de orla de instituto, su rostro, agraciado por la cabellera blanca, ha sido coloreado tan a conciencia que parece pasado de coloraines y de fotoshop. La imagen sugiere la drag-queen y la momia del ultraespacio. La pose aplomada, la expresi¨®n serena, se compadecen bien con el mensaje, que hace hincapi¨¦ en la evidencia de que ¨¦l es "el alcalde", cargo que aqu¨ª recobra contundentes resonancias administrativas. El cartel de Molins recuerda aquella infausta campa?a de Roca en la que ¨¦ste invitaba a los espa?oles a sumarse a su "otra manera de entender Espa?a". ?Frase y sonrisa maquiav¨¦lica que espantaron a la clientela potencial! El robusto, atl¨¦tico Molins, que se postula confianzudo "para que Barcelona sea imparable", parece al borde de la carcajada, carcajada de orate que se r¨ªe del personal. Quiz¨¢ se ha percatado de ese efecto indeseado, pues ¨²ltimamente est¨¢ sustituyendo esa imagen por otra en la que se parece m¨¢s sombr¨ªo, patricio y meditabundo. Fisas tambi¨¦n sonr¨ªe feliz. "Joc d"equip" es su lema. Y en algunos carteles aparece a su lado un ciclista esprintando, parece que la cosa no va muy en serio, que la fantas¨ªa del publicista derrapa. La alegr¨ªa de Fisas tambi¨¦n es desconcertante, la suya tanto podr¨ªa ser la del amigote salado que cuenta chistes en cubiertas de yate o cenas de colegas de oficina como la del killer paranoico que incordia a De Niro en pel¨ªculas como Uno de los nuestros o Casino. A nadie inquiete el futuro de Portabella: si no obtiene cargo, ya le har¨¢n un hueco en alg¨²n culebr¨®n de TV-3 tipo Nissaga de poder: con chaqueta Toni Mir¨®, camisa oscura y melenita aseada, presenta todo el aspecto de un joven JASP, preparado y tal, sexy, moderno. Redondean esa impresi¨®n detalles de estilo como la foto en blanco y negro, que aunque un poco tenebrista y marginal queda elegante, y el mensaje hedonista ("fem una BCN m¨¦s f¨¢cil") y la inclusi¨®n de su direcci¨®n electr¨®nica. Rahola ha apostado esta vez por una imagen Barbie total. Las cosas que haga ya no las har¨¢ movida por abstractos ideales, sino sencillamente "per tu" . Y lanza una mirada al sesgo, una mirada so?adora, quiz¨¢ contemplando horizontes de l¨²brica independencia, mirada turbadora para cualquier machorro, extreme?o o no. Imma Mayol, rubia y n¨®rdica, clara y pulcra, correcta, padece las malas consecuencias de esas mismas virtudes: insipidez, transparencia, casi dir¨ªamos invisibilidad. Coherentemente, en algunos carteles ni siquiera aparece su rostro. Y Gasull se muestra decididamente proletario y antiguo. El lema "ara l"alternativa" lo transcribe en ¨¢rabe: simp¨¢tica, aunque insustancial extravagancia digna de los tiempos del proverismo.