Aznar afronta en Venezuela la escala m¨¢s complicada de su gira suramericana

ENVIADO ESPECIALEl presidente Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar comienza hoy en Venezuela, pen¨²ltima escala de su gira latinoamerica, la etapa m¨¢s complicada del viaje, dado el delicado momento pol¨ªtico que vive ese pa¨ªs. Aznar lleva a Caracas un mensaje de apoyo a las profundas reformas pol¨ªticas y sociales que quiere emprender el presidente Hugo Ch¨¢vez, siempre que sean democr¨¢ticas. "O las reformas son homologables por la comunidad internacional o Venezuela arriesga la marginalidad pol¨ªtica y econ¨®mica", se?al¨® una fuente diplom¨¢tica.

La negativa del Gobierno que preside Ch¨¢vez a expulsar a Espa?a a un militante de ETA que fue detenido en el aeropuerto de Caracas con documentaci¨®n falsa, violando las condiciones de estancia en Venezuela, origin¨® hace dos meses una crisis diplom¨¢tica entre los dos Ejecutivos. Fuentes diplom¨¢ticas informaron de que, aunque el tema se llev¨® con la m¨¢xima reserva, la situaci¨®n de casi plena libertad que disfruta el grupo de 50 etarras que reside en Venezuela ser¨¢ tratado hoy por Aznar y Ch¨¢vez en su entrevista.

Ch¨¢vez, de 45 a?os, un militar populista que en 1992 sublev¨® su unidad de paracaidistas en un intento de golpe de Estado que le cost¨® dos a?os de c¨¢rcel, lleg¨® a la presidencia de la Rep¨²blica en diciembre de 1998 cabalgando una inmensa ola de protesta social por el grado de corrupci¨®n y descr¨¦dito en el que ha ca¨ªdo la clase pol¨ªtica tradicional. Ch¨¢vez se comprometi¨® entonces a iniciar una reforma total del Estado y, tras ganar por abrumadora mayor¨ªa un plebiscito que cont¨® con una fuerte abstenci¨®n, ha iniciado un proceso constituyente para reformar el sistema pol¨ªtico y el poder judicial.

Aznar lleg¨® a Caracas anoche procedente de Guayaquil, segunda ciudad de Ecuador, donde realiz¨® una breve escala para entrevistarse con el alcalde de la ciudad y ex presidente de la rep¨²blica, Le¨®n Febres Cordero. La jornada del jueves, la de menor intensidad pol¨ªtica de la semana, permiti¨® al equipo de Aznar preparar la agenda venezolana.

Deriva populista

El Gobierno espa?ol, que vela por las importantes inversiones financieras e industriales realizadas por bancos y empresas espa?olas en los ¨²ltimos a?os, sigue con preocupaci¨®n la deriva populista de Ch¨¢vez. "El presidente venezolano est¨¢ en una encrucijada y creemos que todav¨ªa no ha tomado un rumbo definitivo. Espa?a comprende y apoya las reformas que quiere realizar siempre que no se aparten de los cauces democr¨¢ticos. Y en democracia todo est¨¢ inventado y no es cre¨ªble intentar sustituir los partidos por otro tipo de sistema de representaci¨®n. En Espa?a sabemos muy bien lo que era la democracia org¨¢nica", se?al¨® una fuente diplom¨¢tica. En el plano internacional, Ch¨¢vez ha comenzado a alejarse de Estados Unidos y se ha acercado a Cuba, China e Ir¨¢n, lo que inquieta en las canciller¨ªas occidentales. El discurso del presidente Ch¨¢vez en la reciente cumbre de la UE y Am¨¦rica Latina de R¨ªo de Janeiro, en el que critic¨® el sistema de partidos que ha situado al 80% de la poblaci¨®n venezolana en la pobreza pese a ser un pa¨ªs rico, provoc¨® preocupaci¨®n en la mayor¨ªa de las delegaciones europeas por su tono populista y un punto autoritario.

En lo referente a ETA, las diferencias entre Madrid y Caracas vienen de lejos. Ya con el anterior presidente, el democristiano Rafael Caldera, la colaboraci¨®n de los servicios secretos venezolanos con los espa?oles era nula. El Gobierno espa?ol ha pedido la detenci¨®n preventiva y ha iniciado procesos de extradici¨®n contra seis de los 50 etarras que residen en Venezuela, tras un acuerdo alcanzado por el Ejecutivo de Felipe Gonz¨¢lez con el de Carlos Andr¨¦s P¨¦rez. El caso m¨¢s llamativo fue el Miguel ?ngel Aldana Barrena, cuya extradici¨®n fue autorizada por la Corte Suprema pero qued¨® paralizada por el presidente Caldera.