La Comisi¨®n Europea advierte a Londres sobre la opacidad financiera en Gibraltar

Las quejas de Espa?a sobre la opacidad de Gibraltar han recibido por primera vez un espaldarazo que puede perjudicar al desarrollo de la plaza financiera del Pe?¨®n. La Comisi¨®n Europea aplaz¨® la semana pasada la apertura de un procedimiento de infracci¨®n contra Espa?a por los excesivos controles en la verja, pero decidi¨®, en cambio, denunciar al Reino Unido ante el Tribunal de Justicia de la Uni¨®n Europea por no aplicar en su colonia cuatro directivas que garantizan una mayor transparencia de las sociedades all¨ª afincadas.

Hace ya 19 a?os que deber¨ªa estar vigente en Gibraltar una directiva comunitaria sobre la obligaci¨®n para las sociedades de elaborar balances y cuentas de p¨¦rdidas y ganancias y posteriormente publicarlas. Hace ya 12 a?os que las autoridades del Pe?¨®n deber¨ªan haber traspuesto otra directiva que exige a las empresas establecer cuentas consolidadas y un informe anual consolidado de gesti¨®n en el que deben figurar, entre otros datos, los principales accionistas, las cargas fiscales y las remuneraciones a los consejeros. Ambas directivas, que fueron completadas en 1993 con otros dos textos legales, est¨¢n vigentes en el Reino Unido, pero no en su colonia, a cuyas autoridades Londres ha transfererido la competencia de introducirlas en su legislaci¨®n. Aun as¨ª, Bruselas considera al Gobierno brit¨¢nico responsable de la aplicaci¨®n en la Roca de la legislaci¨®n comunitaria y, dos a?os despu¨¦s de formularle sus primeras advertencias, ha llevado a Londres al Tribunal de Justicia.

Ning¨²n Gobierno gibraltare?o ha traspuesto las directivas, porque, en opini¨®n de un alto cargo del Ministerio de Exteriores espa?ol, "hacerlo da?ar¨ªa su car¨¢cter de para¨ªso fiscal". "Causar¨ªa problemas al sector privado establecido en la colonia, que podr¨ªa tener la tentaci¨®n de emigrar a lugares como las islas Antigua y Barbuda o Caim¨¢n, en las que nunca estar¨¢ vigente la legislaci¨®n europea y se permite una total opacidad".

Domiciliarse en Gibraltar s¨®lo le cuesta a una sociedad unas 57.000 pesetas. En los ¨²ltimos dos a?os, las empresas de estas caracter¨ªsticas han aumentado de 53.000 a 76.000, de las cuales el 11% (8.466) ha tenido actividad en Espa?a, seg¨²n datos de la Agencia Tributaria revelados en junio en la comisi¨®n parlamentaria para el estudio de las drogas. "Un elevado n¨²mero de estas sociedades estar¨ªa implicado en el blanqueo de capitales", denunci¨® ante la comisi¨®n el diputado Manuel Mill¨¢n. "Algunas de estas sociedades estar¨ªan siendo utilizadas por espa?oles con fines claros de evasi¨®n fiscal".

Para la diplomacia brit¨¢nica no cabe la menor duda de que las cuatro directivas ser¨¢n introducidas en Gibraltar mucho antes de que el Tribunal de Justicia dicte sentencia. A principios de a?o, Londres fue denunciado, por primera vez, por el incumplimiento, por su colonia, de sendas directivas sobre el ruido de los aviones. Dos meses despu¨¦s empezaban a aplicarse.

En Exteriores se duda de que esta vez se muestre tan diligente, porque es consciente del perjuicio que puede causar al peculiar modelo de desarrollo gibraltare?o. "Si Bruselas se pone pesada y Londres acaba presionando para que cumplan la legalidad, algunos responsables gibraltare?os so?ar¨¢n con la independencia para evitar que las sociedades fantasma se marchen".

Hay otras 11 directivas que no han sido traspuestas porque, seg¨²n Londres, no lo requiere el estatuto particular de la colonia, una opini¨®n que no comparte la diplomacia espa?ola. Hay tambi¨¦n otras muchas directivas bloqueadas a causa de las desavenencias entre Madrid y Londres.