Los ¨²ltimos datos refuerzan la hip¨®tesis de la influencia humana sobre el clima

Mientras siguen acumul¨¢ndose las pruebas que demuestran que la atm¨®sfera terrestre se calienta, los cient¨ªficos progresan lentamente a la hora de encontrar respuesta al gran interrogante que plantea la evidencia: ?en qu¨¦ medida se debe el calentamiento a la actividad humana y en qu¨¦ medida a causas naturales? El Panel Intergubernamental de Naciones Unidas sobre Cambio Clim¨¢tico (IPCC), el grupo de cient¨ªficos con mayor autoridad en el tema, ya sac¨® como conclusi¨®n en su ¨²ltima evaluaci¨®n cient¨ªfica peri¨®dica a gran escala sobre el cambio clim¨¢tico que hay una "influencia humana apreciable" en el clima global. Ahora el panel se encuentra sumido en la siguiente, que finalizar¨¢ dentro de a?o y medio. Aunque a¨²n no han adquirido forma las conclusiones del grupo, algunos expertos en la materia afirman que la influencia humana en el clima est¨¢ cada vez m¨¢s clara, e incluso puede que haya sido el factor dominante en el calentamiento global de las ¨²ltimas d¨¦cadas.

Variedad de opiniones

No todo el mundo est¨¢ de acuerdo -hay variedad de opiniones- y pr¨¢cticamente todos los expertos afirman que, en cualquier caso, a¨²n se est¨¢ lejos de lograr un c¨¢lculo fiable de la magnitud de esta influencia.Una serie de influencias, tanto naturales como artificiales, son la causa de la variaci¨®n en la temperatura del planeta. Entre las naturales se incluyen los cambios en la radiaci¨®n solar, y las gotas de sulfatos denominadas aerosoles que los volcanes en erupci¨®n arrojan al aire y que enfr¨ªan la atm¨®sfera al reflejar la luz del sol. La influencia humana se deriva fundamentalmente de las emisiones de gases industriales como el di¨®xido de carbono que atrapan el calor en la atm¨®sfera, y de los aerosoles de sulfatos procedentes de las chimeneas industriales. El impacto combinado de los aerosoles industriales y los gases de efecto invernadero crea unos patrones de temperatura complejos y caracter¨ªsticos. El an¨¢lisis de esos patrones llev¨® al comit¨¦ intergubernamental a abandonar en 1995 su idea anterior de que el calentamiento global observado durante el siglo pasado pod¨ªa ser tanto natural como inducido por el ser humano. Le parec¨ªa que los factores humanos desempe?aban un papel, pero no ofrec¨ªa ning¨²n juicio sobre si ese papel era grande, peque?o o mediano.

Recientemente apareci¨® en la revista Nature una observaci¨®n que sugiere una fuerte influencia humana y que probablemente tendr¨¢ alg¨²n peso en el panel intergubernamental. Los cient¨ªficos del Centro Hadley de Investigaci¨®n y Predicci¨®n del Clima, un organismo del Gobierno brit¨¢nico, analizaron los antecedentes del clima global en los ¨²ltimos 100 a?os con intenci¨®n de aislar y cuantificar los principales factores que han hecho que la temperatura media de la superficie terrestre aumente en aproximadamente medio grado este siglo.

El equipo de investigaci¨®n dirigido por Simon F B Tett descubri¨® que en la primera parte del siglo el aumento se pod¨ªa explicar por un incremento en la radiaci¨®n solar, o por la combinaci¨®n de una radiaci¨®n solar m¨¢s fuerte y unos gases de efecto invernadero que atrapan el calor, y que son emitidos por las econom¨ªas industrializadas. Pero hallaron que despu¨¦s de mediados de los setenta, cuando tuvo lugar pr¨¢cticamente la mitad del calentamiento del siglo, ¨¦ste se debi¨® en gran medida a los gases de efecto invernadero. Otros investigadores han obtenido posteriormente una conclusi¨®n parecida.

El estudio Tett representa "otra pieza del rompecabezas", seg¨²n afirma un experto, Tom M L Wigley, del Centro Nacional para la Investigaci¨®n Atmosf¨¦rica de Boulder (Colorado). Wigley fue uno de los principales autores de la secci¨®n del informe de 1995 del IPCC que trataba la detecci¨®n de la impronta humana sobre el clima, pero no ha participado en las ¨²ltimas evaluaciones. En un reciente debate del comit¨¦ afirm¨® que, si escribieran su informe hoy, tanto ¨¦l como sus coasesores de cuatro a?os atr¨¢s "har¨ªan una declaraci¨®n m¨¢s fuerte". Pero otros participantes del debate fueron m¨¢s cautos.Uno de ellos, Michael E. Schlesinger, de la Universidad de Illinois (EE UU) afirm¨® que los expertos no saben lo suficiente acerca de la magnitud de las variaciones clim¨¢ticas naturales, especialmente de la radiaci¨®n solar, como para calibrar exactamente la proporci¨®n del impacto humano.

El a?o m¨¢s calido

Mientras tanto, siguen acumul¨¢ndose las pruebas sobre el calentamiento y sus efectos. Los an¨¢lisis han hallado que los a?os m¨¢s calientes de todos de los que se dispone de datos tuvieron lugar durante los noventa, siendo 1998 el m¨¢s c¨¢lido de los registrados. El Ni?o, la gran avalancha de agua caliente del oc¨¦ano Pac¨ªfico tropical que de vez en cuando calienta la atm¨®sfera y trastoca los patrones del tiempo atmosf¨¦rico, fue el responsable de parte del calentamiento en 1998. Sin embargo, un an¨¢lisis preliminar llevado a cabo por Wigley, ha demostrado que cuando se eliminan los efectos de El Ni?o del registro estad¨ªstico de la temperatura global, 1998 sigue siendo el a?o m¨¢s c¨¢lido. Este a?o tambi¨¦n est¨¢ siendo inusualmente c¨¢lido, pero no tanto como 1998. En otro estudio publicado en Nature este mes, basado en las burbujas de aire atmosf¨¦rico que se encuentran en cilindros de hielo extra¨ªdos de la plataforma ant¨¢rtica, se observa que los niveles atmosf¨¦ricos actuales de di¨®xido de carbono son los m¨¢s altos que ha habido en los ¨²ltimos 420.000 a?os.A 360 partes por mill¨®n, son un 20% m¨¢s altos que en cualquier otro per¨ªodo c¨¢lido entre glaciaciones, y el doble de las concentraciones t¨ªpicas que se encontraron durante un per¨ªodo glacial.