Barak solicita la mediaci¨®n de Mubarak para renegociar la retirada israel¨ª de Cisjordania

El primer ministro israel¨ª, Ehud Barak, intenta convencer a los pa¨ªses ¨¢rabes de que la aplicaci¨®n inmediata y sin modificaciones del acuerdo de Wye es una "bomba de relojer¨ªa" para la zona que puede hacer estallar el proceso de paz. El l¨ªder laborista israel¨ª as¨ª se lo dijo ayer personalmente al presidente egipcio, Hosni Mubarak. Quiere que ¨¦ste persuada al pesidente palestino, Yasir Arafat, para que acepte renegociar y aplazar la puesta en pr¨¢ctica del acuerdo, firmado en octubre de 1998 y en el que el Ej¨¦rcito israel¨ª se comprometi¨® a efectuar un repliegue del 13% en Cisjordania.

"Si los palestinos no quieren modificar los acuerdos de Wye, no lo haremos y lo aplicaremos. Pero debemos dar muestras de responsabilidad; si escogemos una carretera llena de baches en lugar de la carretera principal, podemos preguntarnos enseguida por qu¨¦ sufrimos estas sacudidas", insisti¨® ayer el jefe del Gobierno israel¨ª en el transcurso de una conferencia de prensa celebrada en el palacio de verano de Ein el Tina, en Alejandr¨ªa, donde celebr¨® una reuni¨®n de dos horas con el presidente egipcio, Hosni Mubarak.Barak hab¨ªa explicado previamente a Mubarak las razones que le llevan a pedir formalmente a los palestinos la renegociaci¨®n y el aplazamiento de los Acuerdos de Wye, firmados e incumplidos por el anterior Gobierno conservador, presidido por Benjam¨ªn Netanyahu.

En opini¨®n del jefe del Gobierno israel¨ª, la aplicaci¨®n del pacto, tal como est¨¢ redactado, pone en entredicho cualquier defensa de entre 15 y 19 asentamientos jud¨ªos de las regiones b¨ªblicas de Judea y Samaria, en Cisjordania. Esto comporta un riesgo de inestabilidad para la zona y puede convertirse en un foco de tensi¨®n permanente como ya lo es la ciudad compartida de Hebr¨®n.

El Ejecutivo israel¨ª, bas¨¢ndose en estos argumentos, ofrece a los palestinos la posibilidad de llevar a t¨¦rmino un repliegue de un 5% en Cisjordania, dejando el otro 8% para cuando se discuta el estatuto definitivo de Palestina, en el que se tratar¨¢n cuestiones vinculadas a este repliegue como la definici¨®n o establecimiento de fronteras y la espinosa cuesti¨®n de Jerusal¨¦n.

Barak conf¨ªa en la capacidad disuasoria de Mubarak, puesta en evidencia en numerosas ocasiones y que ha sido fuente de innumerables an¨¦cdotas. Como la acaecida en 1995, cuando el presidente egipcio, nervioso por las dilaciones y desconfianzas de Arafat con respecto unos documentos que deb¨ªa firmar, inst¨® de manera brusca al l¨ªder palestino, llegando incluso a insultarle p¨²blicamente, para que los rubricara. Lo consigui¨® ante la sonrisa de los presentes, algunos de ellos rojos de verg¨¹enza al escuchar la palabra malsonante. La situaci¨®n ahora parece ser m¨¢s complicada, pues el pasado martes, en el transcurso de la cumbre bilateral celebrada en el puesto fronterizo de Erez, Yasir Arafat rechaz¨® hasta 17 veces la propuesta de Ehud Barak de renegociar y aplazar los Acuerdos de Wye. Argument¨® que deb¨ªan ser puestos en pr¨¢ctica sin ninguna modificaci¨®n y sin m¨¢s dilaciones.

Ayer, la propuesta de Barak empez¨® a ser estudida y examinada por un grupo de expertos israel¨ªes y palestinos que se reunieron en el hotel Rey David de Jerusal¨¦n, cumpliendo as¨ª el compromiso aceptado por las dos partes de debatir el tema y dar una respuesta definitiva en dos semanas.