ACUERDO EDUCATIVO El imperativo de la educaci¨®n

A estas alturas del siglo ya no es ninguna novedad afirmar que la educaci¨®n se ha convertido en el centro y en la clave del acceso de toda sociedad al proceso de construcci¨®n de un mundo cuya estructura y configuraci¨®n gira en torno al conocimiento. Si bien es una verdad incuestionable que la educaci¨®n tiene como misi¨®n posibilitar el desarrollo y la realizaci¨®n personal, no es menos cierto que estos objetivos son inseparables de la dimensi¨®n comunitaria de la existencia humana. Por otra parte, est¨¢ suficientemente probado que la pr¨¢ctica educativa no es un fen¨®meno aislable. Se puede pensar, igualmente, que a la administraci¨®n educativa le compete representar un papel de importancia en materia de planificaci¨®n, de fomento, de tutela... debido a la extensi¨®n universal que ha alcanzado el servicio educativo y a la complejidad que caracteriza a los actuales sistemas educativos. Pero, con todo, ninguno de estos elementos esenciales ni el conjunto de ellos podr¨¢ llevar a buen puerto un proyecto educativo si no cuenta con el apoyo y la colaboraci¨®n del ¨¢mbito familiar y el entorno social. Es en este horizonte de ¨ªntima vinculaci¨®n entre la colectividad y el modelo educativo adoptado, que estimula la participaci¨®n social en la vida de la escuela y la colaboraci¨®n, donde hay que situar el Acuerdo por la Educaci¨®n que planteamos desde la Consejer¨ªa de Educaci¨®n y Ciencia de la Junta de Andaluc¨ªa. Ya en septiembre de 1997, la Consejer¨ªa, FETE-UGT y la Federaci¨®n de Ense?anza de CC OO, suscribimos un Acuerdo de Bases hacia un Pacto por la Educaci¨®n. Posteriormente, se fueron uniendo a la iniciativa FSIE, CODAPA y las organizaciones patronales de centros docentes de titularidad privada. El mencionado acuerdo ha resultado una contribuci¨®n notable a la mejora de la calidad de la ense?anza y el balance es claramente positivo, habi¨¦ndose ejecutado antes de final de 1999, un total de 91.143 millones. El Acuerdo representa un planteamiento esencial de la pol¨ªtica educativa en Andaluc¨ªa, que responde a la idea b¨¢sica de que la educaci¨®n es responsabilidad del conjunto de la sociedad y es por la v¨ªa del di¨¢logo y del acuerdo entre todos los interlocutores sociales como ser¨¢ posible lograr la consolidaci¨®n de un sistema educativo de calidad. El punto de confluencia de todas las actuaciones previstas es reforzar y potenciar la acci¨®n educativa de la ense?anza p¨²blica, de la cual no excluimos, por supuesto, a la ense?anza concertada, la cual ofrece un servicio p¨²blico de educaci¨®n que es preciso reconocer y alentar. El centro docente va a ser el referente esencial de muchas de estas medidas. No s¨®lo nos comprometemos a finalizar en la fecha establecida de aplicaci¨®n total de la LOGSE, las construcciones, ampliaciones, reformas, de los centros y la correspondiente dotaci¨®n de equipamientos, sino que vamos a prestar una especial atenci¨®n a las cuestiones de funcionamiento de los centros, dotando a estos de mayor autonom¨ªa pedag¨®gica, organizativa, econ¨®mica y de gesti¨®n. Es preciso incentivar econ¨®mica, profesional y formativamente a las personas dedicadas a la direcci¨®n de los centros. En la misma l¨ªnea de mejora de la organizaci¨®n se va a dotar a los institutos de la figura del administrador prevista en la LOGSE. En la perspectiva de la formaci¨®n integral y de aprovechamiento y rentabilizaci¨®n de instalaciones, vamos a promover y aumentar la oferta de actividades complementarias y extraescolares en horario no lectivo, para lo cual proponemos crear una empresa p¨²blica encargada de gestionar la organizaci¨®n y extender la realizaci¨®n de dichas actividades. Estas actividades integradas en el proyecto educativo de cada centro van a suponer en la idea de la educaci¨®n entendida como proceso global de desarrollo de todas las potencialidades de la persona; por otra parte, abren la posibilidad de rendir un servicio a la poblaci¨®n como promotor de una cultura de ocio y del tiempo libre. Impulsar la Red Telem¨¢tica Educativa Averroes e intensificar el aprendizaje de lenguas extranjeras son dos objetivos claros que este acuerdo se propone abordar. La importancia de la tecnolog¨ªa y de los idiomas es tal que est¨¢ previsto adelantar la iniciaci¨®n del alumnado en ambas dimensiones introduci¨¦ndolas en la etapa de educaci¨®n infantil. Se crear¨¢ en estos centros un "rinc¨®n del ordenador" para iniciar a los ni?os y ni?as en el contacto con la inform¨¢tica. Igualmente, se trata de ir introduciendo a este alumnado en el conocimiento de un idioma extranjero. El otro gran cap¨ªtulo es la atenci¨®n al profesorado; se contemplan medidas de reconocimiento de la figura del profesor, as¨ª como otras salariales, ampliaci¨®n de plantillas y, fundamentalmente, ofrecer renovados cauces para la formaci¨®n del personal docente: cursos, licencias por estudios, estancias y visitas en universidades y centros de investigaci¨®n, etc¨¦tera. Todas las medidas recogidas en el acuerdo tienen una traducci¨®n espec¨ªfica en el campo de los programas de Solidaridad en la Educaci¨®n, en el convencimiento de que cualquier proyecto educativo carece de sentido si prescinde de los principios de la justicia y de la igualdad de oportunidades. En fin, son muchas las facetas que se propone abarcar el acuerdo y que no s posible abordar en esta ocasi¨®n. En cifras, la cantidad adicional prevista para llevar a cabo estos planes es de 113.607 millones de pesetas. No obstante, la financiaci¨®n en educaci¨®n es condici¨®n necesaria y muy importante, pero no suficiente. Este Acuerdo por la Educaci¨®n cuenta con los recursos materiales, pero apela directamente a la generosidad, a la creatividad, a la imaginaci¨®n, a la solidaridad y al sentido de la responsabilidad de todos los agentes sociales comprometidos con la educaci¨®n en nuestra comunidad aut¨®noma. Convencidos de que la sociedad andaluza va a responder positivamente, confiamos en obtener muchos frutos de este programa educativo compartido.

Manuel Pezzi Cereto, consejero de Educaci¨®n y Ciencia de la Junta de Andaluc¨ªa