Muere el galerista Leo Castelli, descubridor de los artistas del pop
Leo Castelli, el m¨¢s influyente galerista neoyorquino de la segunda mitad del siglo, muri¨® el s¨¢bado, a los 91 a?os, en su casa de Manhattan. Durante d¨¦cadas, Castelli represent¨® y descubri¨® a muchos de los artistas norteamericanos m¨¢s importantes e impuso algunas de las reglas que convirtieron a Nueva York en un gran centro del mercado del arte.En su modesto piso de la ciudad de los rascacielos inici¨®, a partir de 1957, una perseverante y eficaz labor de apoyo a j¨®venes artistas, como Jasper Johns ("el artista total y absoluto", seg¨²n ¨¦l), Robert Rauschenberg ("un encuentro decisivo en mi vida", confes¨®) y Andy Warhol, quienes se convirtieron en figuras clave del arte mundial. El "ojo" de este sensible amante del arte fue capaz de ver en la incipiente subversi¨®n de estos pintores los indicios de unas corrientes art¨ªsticas que se revelaron como fundamentales.
"Es un don especial con el que se nace", afirm¨®. "Otros pueden estudiar historia del arte y admirar pinturas durante toda su vida sin tener la capacidad de distinguir cu¨¢l, entre 10, es la mejor. Se podr¨ªa pensar que siempre escog¨ª bien, pero no es verdad; como todo el mundo, me equivoqu¨¦ muchas veces". Su gran logro consisti¨® en darse cuenta de que el arte pod¨ªa ser tambi¨¦n un buen mercado. Al llegar a Estados Unidos se percat¨® de que sus habitantes eran ricos, ¨¢vidos de arte y bastante xen¨®fobos. Tuvo la habilidad de descubrir a los artistas, pero sobre todo era un gran negociante.
Arte y negocio
Castelli hab¨ªa llegado a Estados Unidos de Europa como refugiado tras la Segunda Guerra Mundial. Nacido con el nombre de Leo Krauss en Trieste el 4 de septiembre de 1907, entonces parte del Imperio Austroh¨²ngaro, adopt¨® el apellido de su madre cuando la ciudad pas¨® a formar parte de Italia. Castelli termin¨® la carrera de derecho en Mil¨¢n en 1924 y fue a vivir a Par¨ªs, donde trabaj¨® para la banca hasta 1935. Castelli se relacion¨® con el mundo del arte al asociarse con el galerista franc¨¦s Ren¨¦ Drouin. El inicio de la Segunda Guerra Mundial lo oblig¨® a marcharse precipitadamente a Estados Unidos con su familia. Se enrol¨® en el Ej¨¦rcito norteamericano y sirvi¨® en los servicios de espionaje, con lo que obtuvo la ciudadan¨ªa estadounidense.De gusto refinado y un gran poder de convicci¨®n, Castelli fue capaz de hacer ver a los coleccionistas y galer¨ªas neoyorquinos, obsesionados con el arte moderno europeo, que el que se produc¨ªa en su pa¨ªs tambi¨¦n era importante. Esto se confirm¨® en 1964, cuando Rauschenberg fue el primer artista norteamericano premiado en la Bienal de Venecia.
El galerista fue tambi¨¦n el primero en establecer una especie de sueldo a sus artistas, vendiera o no sus obras. Pronto se convirti¨® en el ¨¢rbitro del arte del momento, promoviendo movimientos como el neoexpresionismo, el pop, el minimal y el conceptual. En su n¨®mina de artistas figuraban Frank Stella, Roy Lichtenstein, Dan Flavin, Richard Serra y Bruce Nauman.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.