Boadella presenta a Dal¨ª como un h¨¦roe ¨¦pico con terrores y curiosidad infantiles
Figueres, la ciudad natal del pintor, acoger¨¢ el 10 de septiembre el estreno de 'Daaal¨ª'
Un anciano y decr¨¦pito Salvador Dal¨ª se enfrenta a la muerte con una mezcla de temor y curiosidad. En su mente relampaguean im¨¢genes que condensan su vida. Se mezclan absurdidad y trascendencia. Detalles quiz¨¢ olvidados cobran un insospechado valor. Entre el caos va tomando forma una figura ¨¦pica, un personaje casi mitol¨®gico. Albert Boadella ha levantado su visi¨®n del pintor surrealista en el montaje teatral Daaal¨ª, que se estrenar¨¢ el 10 de septiembre en Figueres, la poblaci¨®n natal del artista, reproduciendo el ¨²ltimo delirio del genio a las puertas de la muerte.
El montaje, protagonizado por Els Joglars, presenta a Salvador Dal¨ª como un hombre que fue capaz de "congelar su infancia". La teor¨ªa del hombre-ni?o constituye la espina dorsal de la obra. "Los delirios, temores y emociones de Dal¨ª son los de la infancia", explic¨® Boadella ayer en Figueres (Girona). El director teatral considera que la permanencia en el paradisiaco territorio de la infancia, buscada por muchos pero lograda por pocos, se prolong¨® en el inventor del m¨¦todo paranoico-cr¨ªtico hasta las ¨²ltimas consecuencias, puesto que el anciano genio no se enfrent¨® a su agon¨ªa con el terror adulto, sino "con la curiosidad infantil de verle la cara a la muerte".En la obra aparece tambi¨¦n "el gran individualista", capaz de soltar todo lo que le pasaba por la cabeza, mostrando, seg¨²n Boadella, un talante "cruelmente sincero, ingenioso, provocador, imprevisible y libertario". El director de Els Joglars admite que habr¨ªa sido f¨¢cil llenar tres o cuatro obras con las toneladas de an¨¦cdotas, muchas de ellas falsas, que circulan sobre las ocurrencias del pintor, pero advierte que ha preferido darle una "dimensi¨®n ¨¦pica, casi tr¨¢gica; como si se tratara de Don Quijote".
Quiz¨¢ por eso, y porque Boadella opina -con Dal¨ª- que "la pol¨ªtica es la an¨¦cdota de la historia", las referencias a la ¨¦poca franquista son m¨ªnimas en la obra. El autor teatral considera que Dal¨ª fue un "provocador compulsivo" del que no se libr¨® ni el mismo director: "Por aquellos a?os yo era un vil progre de la ¨¦poca, y cuando o¨ªa ciertas cosas que dec¨ªa Dal¨ª me sulfuraba como una mona".
Boadella arremeti¨® contra la biograf¨ªa de Salvador Dal¨ª escrita por el hispanista Ian Gibson y asegur¨® que el escritor hab¨ªa cometido dos errores a la hora de dibujar la figura del genio surrealista. El primero de ellos es "forzar a Dal¨ª como homosexual", dijo. El director piensa que la relaci¨®n que el pintor estableci¨® con Federico Garc¨ªa Lorca tiene mucho que ver con la visi¨®n infantil que Dal¨ª ten¨ªa de la sexualidad, pero nunca con la homosexualidad. "Lorca era para Dal¨ª aquel amigo del coraz¨®n que todos hemos tenido a los ocho o diez a?os", asegur¨®. El segundo error consiste en obviar que Dal¨ª naci¨® en el Empord¨¤. Boadella asegura que este territorio m¨ªtico barrido por la tramontana muestra por todas partes retazos del car¨¢cter de Dal¨ª. Y puso como ejemplo el gusto por la contradicci¨®n sistem¨¢tica: "Mi padre hac¨ªa lo mismo; cuando se daba cuenta de que la mayor¨ªa era de una opini¨®n, se pasaba a la contraria".
Boadella no tuvo empacho en afirmar que "Els Joglars es el mejor equipo de actores del Estado espa?ol" y asegur¨® que sus integrantes, lejos de ser simples marionetas al servicio de un texto, se convierten en coautores de todas las obras. C¨ªnicamente, atribuy¨® el mantenimiento del grupo a lo largo de 38 a?os a los esfuerzos empleados para eliminarlos. "La clave de nuestra supervivencia es la manera como nos han hecho la pu?eta", dijo refiri¨¦ndose al boicoteo sistem¨¢tico que aseguran sufrir por parte de la Generalitat. La compa?¨ªa ha incorporado bajo el logotipo del grupo, como un signo de pedigr¨ª, la inscripci¨®n: "Compa?¨ªa vetada en TV-3. Televisi¨®n P¨²blica de Catalu?a". En Daaal¨ª pulula un grupo de atribulados reporteros de una televisi¨®n denominada te-ve-r¨¦s ("te-ve-nada").
La escenograf¨ªa del montaje, t¨ªpicamente daliniana, reproduce una roca fundida con un piano de cola. Boadella quiso destacar la pantalla electr¨®nica de alta definici¨®n que en la obra interact¨²a con los actores. El montaje tiene un presupuesto de 120 millones de pesetas.
En la presentaci¨®n, el actor Ramon Fontser¨¦, que en montajes anteriores de Boadella ha dado vida a Josep Pla y a Jordi Pujol, se puso en la piel de un Salvador Dal¨ª de enhiestos bigotes para contestar a las t¨®picas preguntas de un impertinente periodista de la cadena Gala-Visi¨®n. Entre las respuestas, en las que no pod¨ªa faltar la menci¨®n al "¨¢cido desoxidorribonucleico", el Dal¨ª de Els Joglars dijo: "Picasso es espa?ol, yo tambi¨¦n; es un genio, yo tambi¨¦n; es pintor, yo tambi¨¦n; es comunista, yo tampoco"; "la ¨²nica diferencia entre Dal¨ª y un loco es que yo no estoy loco, que es una diferencia m¨ªnima pero muy sustancial".
Tras su estreno en Figueres el pr¨®ximo 10 de septiembre en su versi¨®n castellana, Daaal¨ª viajar¨¢ a Zaragoza, Buenos Aires, Lima, Canarias y C¨¢diz. Se representar¨¢ en Madrid en noviembre, en el teatro Mar¨ªa Guerrero, donde permanecer¨¢ hasta enero del a?o 2000. A partir del 16 de marzo podr¨¢ verse en versi¨®n catalana en el Mercat de les Flors de Barcelona.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.