R¨¢fagas de buen toreo a caballo
El p¨²blico que fue a ver la corrida de rejones pudo disfrutar de momentos de buen toreo a caballo, e incluso de suertes resueltas con brillantez y conocimientos adecuados. Pero no todo lo que hubiera deseado, ya que los toros que salieron al ruedo no anduvieron muy sobrados de casta, en lineas generales, y fueron perdiendo br¨ªos, motor y tranco conforme avanzaba la lidia. Joao Moura en su primero encel¨® muy bien al mansito, con la banderola de los rejones de castigo, tir¨® del burel y le ense?¨® el camino de los medios con t¨¦cnica depurada. Estuvo centrado a la hora de clavar banderillas a una mano. El segundo encuentro fue el m¨¢s logrado, prendi¨® la banderilla por delante del estribo y en lo alto. Manej¨® con habilidad el rej¨®n de muerte, acert¨® al primer intento, y cort¨® una oreja.
P¨¦rez / Moura, Hern¨¢ndez, Ojeda
Toros afeitados para rejones de Antonio P¨¦rez-Angoso, desigualmente presentados, bajos de casta.Joao Moura: rej¨®n ca¨ªdo y atravesado (oreja); pinchazo, metisaca y rej¨®n trasero (silencio). Leonardo Hern¨¢ndez: rej¨®n atravesado y seis descabellos (silencio); rej¨®n (dos orejas). Paco Ojeda: descabello despu¨¦s de haberse echado el toro dos veces (silencio); rej¨®n y dos descabellos (silencio). Leonardo Hern¨¢ndez sali¨® a hombros. Plaza de Alcal¨¢ de Henares. 4 de septiembre, 4? de feria. Un tercio de entrada.
Excelente tercio
Mejor¨® Moura su actuaci¨®n en el cuarto. Un excelente tercio nos brind¨® al clavar banderillas a una mano, el pecho del caballo por delante, temple al quebrar en la cara del burel, mando y gusto cuando le toc¨® torear con el costado o la grupa de su cabalgadura, a un palmo de la cara del astado, que iba embebido. Pero utiliz¨® de mala manera el rej¨®n de muerte y se silenci¨® su art¨ªstica faena. Leonardo Hern¨¢ndez en su primero clav¨® a una mano banderillas con desigual fortuna. A¨²n as¨ª hubo temple en su labor. Marr¨® varias veces con el descabello y la calificaci¨®n del respetable fue de silencio.
El segundo toro de Leonardo Hern¨¢ndez, el quinto de la tarde, fue el que tuvo m¨¢s casta del encierro y le permiti¨® lucirse, realizar una faena completa, que le puso en sus manos las dos orejas y le abri¨® el camino de la Puerta Grande.Lo m¨¢s espectacular y conseguido fue una vuelta, circular acabado, al hilo de las tablas, con el toro fijo y celoso a su grupa o al costado, que fue un alarde de poder, aguante y templanza. A clavar banderillas acudi¨® de frente y por derecho, y el rej¨®n de muerte le qued¨® en todo lo alto. Se desbord¨® la alegr¨ªa del p¨²blico y le premiaron con las dos orejas so?adas.
Paco Ojeda no estuvo a gusto ayer tarde en Alcal¨¢ de Henares, y fue el m¨¢s desafortunado a la hora del sorteo. Dos toros muy a menos, que le permitieron pocas florituras. Otra tarde ser¨¢.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
