Indonesia sale al paso de los rumores de que el Ej¨¦rcito controla el poder

La crisis de Timor Oriental ha provocado el completo aislamiento del presidente indonesio, Yusuf Habibie, quien ha perdido el control de la situaci¨®n y se encuentra en las manos del poderoso Ej¨¦rcito indonesio. Habibie no quer¨ªa decretar el estado de emergencia y es partidario del env¨ªo de una fuerza multinacional de paz, bajo el mando de la ONU. En ambos casos, su opini¨®n fue desestimada y el Ej¨¦rcito impuso su decisi¨®n. Observadores y diplom¨¢ticos en Yakarta consideran el caso como un virtual golpe de Estado.

La portavoz de la presidencia y consejera de Habibie, Dewi Fortuna Anwar, ha salido al paso de las especulaciones que recorren Yakarta y ha desmentido que Habibie haya dimitido. Tambi¨¦n mantiene que, "si dependiese s¨®lo del presidente, la fuerza de paz ya estar¨ªa en Timor". Hombre de transici¨®n que alcanz¨® el poder a la sombra del dictador Suharto, el presidente indonesio inici¨® la reforma democr¨¢tica del pa¨ªs en una situaci¨®n de extrema debilidad. A su reconocida impopularidad ante la opini¨®n p¨²blica y en el seno de su propio partido, el Golkar, que qued¨® segundo en las elecciones de junio, se ha unido ahora una oleada de cr¨ªticas por haber convocado el refer¨¦ndum sobre la independencia de Timor Oriental. Con ello, a juicio de la mayor¨ªa del Ej¨¦rcito, su propio partido y una gran parte de la oposici¨®n, ha abierto un resquicio a la desintegraci¨®n del archipi¨¦lago m¨¢s grande y poblado del mundo, con m¨¢s de 200 millones de habitantes. De hecho, desde la renuncia del dictador Suharto, el 21 de mayo de 1998, el Ej¨¦rcito indonesio se ha tenido que emplear a fondo para contener las rebeliones separatistas de Aceh (norte de la isla de Sumatra) e Irian Jaya, la parte occidental e indonesia de la isla de Nueva Guinea. Son dos rebeliones con larga tradici¨®n, en especial la legendaria de Aceh, que se han visto alentadas por la debilidad del Gobierno central.

Un embajador de la Uni¨®n Europea explicaba ayer que Habibie acept¨®, "en el contexto del proceso de transici¨®n, la convocatoria del refer¨¦ndum para Timor con el fin de granjearse las simpat¨ªas de la comunidad internacional y la ayuda econ¨®mica exterior, tan necesaria para el pa¨ªs. Sin embargo, no cont¨® con la oposici¨®n del sector mayoritario y m¨¢s poderoso Ej¨¦rcito, encabezado por el general Prabowo, yerno de Suharto, que siempre estuvo en contra de esa consulta".

Dos datos recientes demuestran la extrema debilidad y el aislamiento del presidente. Habibie se neg¨® en un principio a decretar el estado de emergencia en Timor Oriental y es claramente partidario del env¨ªo al territorio de una fuerza internacional de paz bajo el control de Naciones Unidas. Sin embargo, en ambos casos el Ej¨¦rcito, controlado por el general Wiranto, impuso su opini¨®n. Los rumores sobre su dimisi¨®n y una toma del poder por los militares hasta la constituci¨®n del nuevo Parlamento, prevista para octubre, no parece descabellada a la vista de que Habibie, seg¨²n sus asesores m¨¢s pr¨®ximos, ha perdido el control del pa¨ªs, tiene claro que no ser¨¢ reelegido presidente y, adem¨¢s, se librar¨ªa de la responsabilidad por este nuevo genocidio en Timor Oriental.

Dewi Fortuna Anwar cree que los enemigos de Habibie est¨¢n usando "Timor Oriental como un arma para destruirlo" y las presiones internacionales "s¨®lo sirven a los intereses de la extrema derecha". Anwar reiter¨® ayer que los rumores sobre su dimisi¨®n carecen de fundamento y advirti¨® a la comunidad internacional de que "debe tener en cuentan que las presiones sobre Yakarta son contraproducentes y causan reacciones xen¨®fobas y ataques contra extranjeros. El riesgo es muy grande y la situaci¨®n muy peligrosa. La comunidad internacional debe ser cuidadosa al tratar con nosotros".