Maragall se compromete en una cena con sindicalistas a impulsar las 35 horas semanales
Tras haber protagonizado las cenas con empresarios dispuestos a aportar fondos para su campa?a electoral, Pasqual Maragall lo hizo ayer en el recinto de La Farga de L"Hospitalet de Llobregat con unos 6.000 sindicalistas de UGT y Comisiones Obreras, a quienes pidi¨® el voto para el cambio en el Gobierno de la Generalitat. Ante ellos se comprometi¨® a impulsar "las 35 horas semanales a la catalana, por la v¨ªa del pacto". El acto, al que asistieron unas 15.000 personas, fue organizado conjuntamente por miembros de UGT y CC OO, y por el PSC e Iniciativa per Catalunya-Verds (IC-V).
"Quiero una verdadera igualdad de oportunidades para todos y para conseguirla hemos de derrotar a las fuerzas del conservadurismo", subray¨® Maragall. Rafael Rib¨®, candidato de IC-V, intervino antes para explicar que en aquel acto conflu¨ªan "dos votos distintos, pero complementarios" y que por esa raz¨®n compart¨ªan la convocatoria. "Tenemos claro que no compartimos el mismo electorado", afirm¨®, "pero los dos nos hacen falta para sumar y lograr el cambio". Maragall dedic¨® su intervenci¨®n, en la que intercal¨® el catal¨¢n y el castellano, a explicar las razones por las que Catalu?a necesita un cambio en el gobierno de la Generalitat. La amplia nave central de La Farga no se llen¨® del todo. Algunos de los organizadores hablaban de 10.000 comensales, otros de 12.000. Pero hab¨ªa cenas para 7.000 y quedaron unas cuantas mesas por ocupar. Maragall hab¨ªa puesto mucha ilusi¨®n en esta cena, a la que nada m¨¢s subir al estrado calific¨® como de verdadero comienzo de la campa?a electoral. "Y aqu¨ª estoy con la gente que amo", exclam¨® para dejar bien claro que estaba entre los suyos. Lo primero que explic¨® fue que la izquierda ha sido mayoritaria en Catalu?a en todas las elecciones excepto en las auton¨®micas y que eso ha sido posible "porque demasiada gente se ha quedado en casa" a la hora de votar, de participar en pol¨ªtica y en la construcci¨®n del pa¨ªs. Despu¨¦s explic¨® que su gran prioridad program¨¢tica es la educaci¨®n, y no escatim¨® promesas sobre ella. "Le dar¨¦ la vuelta al sistema de la formaci¨®n profesional". "Crearemos una red p¨²blica de guarder¨ªas". "Invertiremos m¨¢s en cultura". La base de la sociedad justa por la que asegur¨® que combate est¨¢ en la igualdad de oportunidades, dijo, y en la sociedad actual en ¨¦sta se basa el acceso al conocimiento. Maragall hizo tambi¨¦n un c¨¢ntico a la diversidad social y cultural de Catalu?a. "?ste es un pa¨ªs producto de la aportaci¨®n de muchas gentes, venidas de todas partes y ¨¦sa es su riqueza". Dijo que ¨¦l mismo es un exponente de esas m¨²ltiples migraciones y para demostrarlo explic¨® que entre sus apellidos, de sus antecesores inmediatos, los hay valencianos, andaluces, gallegos, catalanes e incluso uno ingl¨¦s. Para hacer un pa¨ªs "m¨¢s justo y con nuevas oportunidades para todos", dijo, es necesaria la participaci¨®n de todos. Tres grandes pantallas de televisi¨®n acercaban la imagen de los oradores a los comensales que quedaban m¨¢s lejos del escenario. ?ste estaba presidido por el lema Las razones para el cambio. Entre los asistentes estaban tambi¨¦n sindicalistas de la Administraci¨®n de la Generalitat y para ellos Maragall tuvo unas palabras especiales. "Os lo digo: yo cuento con vosotros". Record¨® luego que ¨¦l fue funcionario municipal y que, despu¨¦s, siendo concejal y alcalde, le toc¨® emprender "no sin problemas", la reforma administrativa del Ayuntamiento de Barcelona. Pero eso le sirvi¨® para afrontar una de las reivindicaciones actuales de los sindicatos: "Yo instaur¨¦ las 35 horas en el Ayuntamiento de Barcelona. Que quede claro. Eso es posible. Y lo haremos, instauraremos las 35 horas semanales. A la catalana, es decir, por la v¨ªa del pacto". Llegaron autocares hasta del Baix Ebre, del Bergued¨¤, de Lleida, de Girona, pero el grueso de los asistentes eran miembros de los comit¨¦s de empresa, muchos de ellos acompa?ados de sus esposas. Maragall se sent¨® entre el l¨ªder de Uni¨® de Pagesos, Pep Riera, y Diego Mart¨ªnez, secretario general de organizaci¨®n de UGT de Catalu?a, y frente a ellos estaban Diana Garrigosa, esposa de Maragall, Narc¨ªs Serra, primer secretario del PSC, Jordi Guti¨¦rrrez, responsable de relaciones institucionales de CC OO y Dardo G¨®mez secretario de relaciones institucionales del Sindicat de Periodistes de Catalunya (SPC).
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Pasqual Maragall
- Elecciones Catalanas 1999
- Uni¨® de Pagesos
- Rafael Rib¨®
- Fraude electoral
- PSC
- Campa?as electorales
- Elecciones Catalanas
- Delitos electorales
- Comisiones Obreras
- UGT
- Elecciones auton¨®micas
- Generalitat Catalu?a
- PSOE
- Sindicatos
- ICV
- Catalu?a
- Sindicalismo
- Comunidades aut¨®nomas
- Elecciones
- Partidos pol¨ªticos
- Relaciones laborales
- Administraci¨®n auton¨®mica
- Delitos
- Espa?a