El incierto futuro de Guti¨¦rrez

Antonio Guti¨¦rrez dejar¨¢ la secretar¨ªa general de CCOO en abril del a?o 2000 por agotamiento de los mandatos, no de sus ganas de bregar en la vida p¨²blica. Con 49 a?os tiene mucho tiempo por delante, muchas opciones para elegir y ninguna clara. La ¨²nica certeza es que se propone acabar de una vez la licenciatura de Econ¨®micas, que ha ido postergando en los ¨²ltimos a?os por falta de tiempo para ponerse a estudiar textos acad¨¦micos.El salto a la pol¨ªtica es una hip¨®tesis que baraja para cuando abandone sus tareas al frente del sindicato, y con la pretensi¨®n de que no se interprete que utiliza a CCOO para sus actividades personales. Pese a ello, no tiene claro cu¨¢l puede ser su hueco en el seno de la izquierda, con unos partidos enfrentados entre s¨ª y con acusadas divisiones internas.

En sus escasas afirmaciones p¨²blicas sobre este asunto, Guti¨¦rrez ha reconocido su disposici¨®n a trabajar por la unidad de las fuerzas progresistas, y que su aspiraci¨®n es sumarse a un proyecto que signifique el encuentro de la izquierda, con un modelo similar al del Olivo italiano.

Otra opci¨®n es que el l¨ªder de CCOO siga inmerso en el mundo sindical y que acepte el ofrecimiento que se le hizo el mes de julio pasado, en el congreso de Helsinki, para que entre en la direcci¨®n de la Confederaci¨®n Europea de Sindicatos (CES), con el horizonte de que tome el relevo de manos de Emilio Gabaglio cuando ¨¦ste se retire de la secretar¨ªa general.

Tambi¨¦n suena con fuerza su nombre para ocupar la delegaci¨®n de la Organizaci¨®n Internacional del Trabajo (OIT) en Espa?a, vacante desde hace un a?o, exactamente desde la salida de Manuel Sim¨®n, antiguo dirigente de la UGT.