El Califa sufre una cornada grave

Los primeros en improvisar el parte m¨¦dico son siempre los polic¨ªas que custodian la puerta de quir¨®fano. "Lleva un boquete as¨ª", dice uno de ellos y con las manos dibuja la boca de un vaso. Se?al inequ¨ªvoca de que la cornada que propin¨® el ¨²ltimo de la tarde a Jos¨¦ Pacheco El Califa merece respeto. El nerviosismo de la cuadrilla confirma la terrible descripci¨®n. Pasan unos minutos y llega las primeras palabras que inducen a la tranquilidad: "Limpia. Grave pero limpia".El parte m¨¦dico habla de una herida de pron¨®stico grave en "la cara interna del tercio inferior del muslo derecho con una trayectoria de 20 cent¨ªmetros hacia arriba". "Por suerte", a?ade uno de los banderilleros al fr¨ªo texto m¨¦dico, "parece que no ha roto ninguna arteria ni nada importante". La cornada, contin¨²a el parte, "causa destrozos en el m¨²sculo vasto interno y alcanza el f¨¦mur".

Media hora despu¨¦s de acabada la corrida, el diestro de J¨¢tiva (Valencia) abandona el quir¨®fano y es conducido en ambulacia a la cl¨ªnica de La Fratenidad.