La polic¨ªa se incauta de decenas de valiosos regalos que Netanyahu se qued¨®
La polic¨ªa registr¨® ayer el domicilio y las oficinas privadas del ex primer ministro israel¨ª Benjam¨ªn Netanyahu en Jerusal¨¦n, donde se incaut¨® de decenas de valios¨ªsimos regalos que ¨¦ste recibi¨® durante los tres a?os en que permaneci¨® al frente del Gobierno. Al parecer, Netanyahu decidi¨® retenerlos cuando abandon¨® su cargo el pasado mes de junio, a pesar de que la ley exige declararlos y entregarlos al Estado. La polic¨ªa judicial investiga adem¨¢s a Netanyahu y a su esposa, Sarah, por un fraude al Estado de unos 16 millones de pesetas.
Los registros policiales permitieron a la polic¨ªa localizar en poder del matrimonio Netanyahu decenas de objetos de arte, especialmente cuadros, as¨ª como otros de plata y oro, que adornaban su domicilio de la calle Gaza de Jerusal¨¦n o la oficina privada que el ex primer ministro tiene en el barrio industrial de Talpiot. Los inspectores hallaron tambi¨¦n varias decenas de cajas con otros regalos oficiales en los almacenes de una empresa de guardamuebles, propiedad de su amigo el contratista Avner Amedi, a quien la polic¨ªa ha implicado en los supuestos delitos.Las investigaciones policiales contra los Netanyahu han salpicado asimismo a importantes funcionarios de la Oficina del Primer Ministro, alguno de los cuales, como Ezra Saidof, responsable del departamento de Construcciones, se encuentra desde ayer en paradero desconocido, oficialmente "de vacaciones", despu¨¦s de haber sido suspendido de sueldo. Seg¨²n los datos obtenidos, Saidof recibi¨®, adem¨¢s, suculentas comisiones de industriales a los que encargaba trabajos para la Oficina del Primer Ministro e incluso se le acusa de haber establecido desde el despacho oficial una "verdadera red" de importaci¨®n ilegal de electrodom¨¦sticos, utilizando para ello la ayuda de otros funcionarios que viajaban al extranjero.
Pero lo m¨¢s doloroso y sorprendente de la investigaci¨®n sobre Netanyahu fue el hallazgo en las oficinas de enormes sacas de correo, conteniendo cerca de un millar de cartas que ciudadanos desesperados enviaron a t¨ªtulo personal al primer ministro entre enero y mayo -abandon¨® su cargo en junio- solicitando su ayuda e intervenci¨®n para resolver problemas familiares de toda ¨ªndole: p¨¦rdidas de trabajo, cuestiones matrimoniales o incidentes con la ley. Una de estas cartas estaba firmada por una atribulada madre que denunciaba que su marido violaba habitualmente a su hijo. La firmante ped¨ªa la intervenci¨®n personal de un Netanyahu que se encontraba en aquel momento inmerso en problemas m¨¢s graves y urgentes, como, por ejemplo, la campa?a electoral que se sald¨® con su derrota.
Los dirigentes del partido derechista Likud, al que pertenece Netanyahu, aseguraron ayer que la intervenci¨®n de la polic¨ªa y la filtraci¨®n de estas informaciones a la prensa ponen en evidencia que "existe la determinaci¨®n obsesiva por desacreditar al ex jefe de Gobierno". Estas acusaciones fueron r¨¢pidamente desmentidas por el ministro de Seguridad Interior, Shlomo Ben Ami, quien respondi¨® que "no hay intencionalidad pol¨ªtica alguna detr¨¢s de estas investigaciones".
El caso judicial con respecto al matrimonio Netanyahu no ha sorprendido a la clase pol¨ªtica israel¨ª, ya que en estos medios era muy conocida la "avidez" con la que la ex primera dama Sarah se lanzaba sobre cualquier regalo oficial, llegando incluso a ordenar a sus colaboradores que participaran y la ayudaran en estas recolectas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.