El PNV y EA piden a los terroristas y al Ejecutivo que respeten la voluntad de los vascos

El PNV y Eusko Alkartasuna, que comparten con Herri Batasuna e Izquierda Unida el Pacto de Lizarra, adoptaron ayer una postura de equidistancia respecto al comunicado de ETA y al del Gobierno central sobre el proceso de paz. As¨ª, las formaciones de Xabier Arzalluz y Carlos Garaikoetxea pidieron tanto a la banda terrorista como al Gabinete que preside Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar que "ambos" manifiesten su respeto a la decisi¨®n y voluntad de los vascos. "?sa es la clave", declar¨® ayer el portavoz del PNV, Joseba Egibar. "ETA y el Gobierno deben sentarse a hablar ya", dijo, a su vez, el vicesecretario general de EA, Rafael Larreina, "y, adem¨¢s, respetar las decisiones de la sociedad vasca".

Los partidos nacionalistas vascos intentaron ayer ver el comunicado de ETA con buenos ojos y extrajeron de ¨¦l, al menos para contarlo en p¨²blico, lo m¨¢s positivo que encontraron. Y lo hicieron distanci¨¢ndose de su contenido y situando la nota en el contexto de la batalla dial¨¦ctica y de imagen que libran el Gobierno -haciendo llamamientos p¨²blicos a la banda terrorista para celebrar un nuevo contacto- y la propia ETA, que tambi¨¦n de forma p¨²blica anuncia su disposici¨®n a abordar el abandono de la violencia no s¨®lo a cambio de sus presos, sino tambi¨¦n de contenidos pol¨ªticos. El portavoz del Partido Nacionalista Vasco (PNV), Joseba Egibar, declar¨® que ETA ha puesto de manifiesto la continuidad de su alto el fuego. En segundo lugar, explic¨® que los terroristas han contestado a los reiterados emplazamientos al di¨¢logo por parte del Gobierno. El dirigente peneuvista consider¨® tambi¨¦n que ETA "ha respondido al discurso constante del Gobierno espa?ol" con el a?adido del respeto a la voluntad de las decisiones que pueda adoptar el pueblo vasco. "Esta pregunta no es nueva, pues se le ha planteado al Gobierno espa?ol hace mucho tiempo desde distintas instancias pol¨ªticas e institucionales", advirti¨®. La sociedad vasca Tras insistir en que el proceso de paz afecta sobre todo a la sociedad vasca, el dirigente nacionalista expres¨® que la clave se encuentra en que el Gabinete de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar diga que va a respetar lo que aqu¨¦lla decida y en que "ETA haga lo propio". Pese a recordar que el PNV considera "una incongruencia" que el Ejecutivo manifieste su disposici¨®n a dialogar con la organizaci¨®n terrorista y no con Herri Batasuna (HB), Egibar reiter¨® que su partido considera necesario que ETA y el Gobierno "hablen de las cosas que les afectan, como la cuesti¨®n de los presos". Aznar declar¨® el pasado s¨¢bado, en Formentor (Mallorca), que "ETA y HB tienen miedo de hablar de paz" y desminti¨® que hubiera recibido alg¨²n tipo de sugerencia o comunicaci¨®n por parte de la banda de que su tregua llega a su fin si no se producen m¨¢s movimientos. Para Egibar, el Gobierno y ETA tienen un problema de comunicaci¨®n. Adem¨¢s, se muestra convencido de que "los emplazamientos p¨²blicos" realizados tanto por ETA como por el Ejecutivo "no son la mejor manera para retomar una relaci¨®n ef¨ªmera basada en una sola reuni¨®n". A su vez, el portavoz del PNV en el Congreso, I?aki Anasagasti, cree que el comunicado de ETA forma parte de una guerra de sombras en la que cada una de las partes asume posiciones. A juicio del dirigente nacionalista, ETA percibe que el Gobierno no se va a mover hasta despu¨¦s de las elecciones y pretende demostrar que el inmovilista es ¨¦l. Maximalistas Para Anasagasti, la cuesti¨®n fundamental es por qu¨¦ este comunicado se hace p¨²blico y por qu¨¦ se denuncia que se ha pasado informaci¨®n a los medios de comunicaci¨®n, "porque a nadie se le ocurre que una negociaci¨®n va a ser televisada, radiada o transmitida en directo y aqu¨ª est¨¢ ocurriendo algo muy importante: que dos no negocian si uno no quiere". En el mismo sentido, el vicesecretario general de Eusko Alkartasuna (EA), Rafael Larreina, exigi¨® ayer al Gobierno y a ETA que hablen m¨¢s alrededor de una mesa y menos ante la opini¨®n p¨²blica. Adem¨¢s, pidi¨® a ambas partes un compromiso de respeto ante lo que, en su momento, decida de forma mayoritaria la sociedad vasca. Larreina cree que lo importante es que, cuanto antes, ETA y el Gobierno se sienten a hablar de los temas de los que tengan que hablar y que, adem¨¢s, se comprometan de modo inequ¨ªvoco a respetar la voluntad mayoritaria de la sociedad vasca, que es la que tiene la iniciativa y la que debe decidir en torno a los temas pol¨ªticos.