El discurso de Grass
Quiero agradecer al alem¨¢n G¨¹nter Grass, desde mi modesta situaci¨®n de simple aficiona-da a la lectura, su discurso -no le coloco ning¨²n adjetivo, porque no encuentro ninguno con la suficiente grandeza para calificarlo- en la entrega del Premio Pr¨ªncipe de Asturias de 1999.Tambi¨¦n agradezco al diario EL PA?S su transcripci¨®n ¨ªntegra, merced a la cual estoy en condiciones de expresar tanta satisfacci¨®n.
Discurso-mensaje de una persona cuya sensibilidad social, amplitud de conocimientos, capacidad human¨ªstica y clarividencia puede hacernos reflexionar y recapacitarprofundamente sobre la posible, necesaria y ansiada regeneraci¨®n del g¨¦nero humano. No puedo, ni quiero, alargarme m¨¢s, porque pienso que mi sentir ser¨¢ compartido, y seguramente mucho mejor expresado, por comunicadores m¨¢s h¨¢biles. S¨®lo deseo a?adir que dicho discurso deber¨ªa figurar como texto obligado para nuestros actuales y futuros estudiantes.- . .
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