Caza al profeta en Jerusal¨¦n

La sectas apocal¨ªpticas de todo el mundo se han dado cita en la ciudad santa de Jerusal¨¦n, donde intentan llegar antes de que se inicie el nuevo milenio con la esperanza de convertirse en protagonistas de sus propias profec¨ªas. Muchos ya lo han logrado; viven agazapados en los territorios palestinos, donde suponen que es m¨¢s f¨¢cil eludir la vigilancia y los controles de las autoridades israel¨ªes, que han decretado contra ellos una verdadera caza sin cuartel.Los ¨²ltimos en caer han sido un grupo de 21 militantes de una misteriosa organizaci¨®n, Hijos de la Oraci¨®n o Templo de Salom¨®n, configurada b¨¢sicamente por ciudadanos norteamericanos vinculados al Estado de Colorado y enraizados a su vez con los sectores m¨¢s retr¨®grados y reaccionarios del movimiento evangelista.

Los seguidores de esta secta vaticinan que el retorno de Jes¨²s se llevar¨¢ a t¨¦rmino en Jerusal¨¦n, concretamente en el monte de los Olivos, y preparaban por ello, en conexi¨®n con los movimientos jud¨ªos radicales locales, el ansiado sue?o de dinamitar la Monta?a del Templo, donde se encuentran ubicadas las dos mezquitas santas del islam y de cuyas ruinas esperan que resurja un d¨ªa no muy lejano el reino teocr¨¢tico del rey David.

Los Hijos de la Oraci¨®n est¨¢n capitaneados por un norteamericano, Hermano David, un pulcro y amanerado conductor de camiones oriundo de Siracusa, que hab¨ªa logrado establecer en la ciudad palestina de Azariya una red de asistencia para los apocal¨ªpticos reci¨¦n llegados, a los que facilitaba protecci¨®n y refugio, teniendo, eso s¨ª, especial cuidado en separar a los seguidores de raza blanca de los de color, a los que alojaba en una vivienda m¨¢s apartada.

Contaba para ello con una cohorte de ac¨®litos y devotos fieles que dedicaban la mayor parte de su tiempo a la oraci¨®n o a distribuir Biblias en ¨¢rabe entre el vecindario musulm¨¢n, seg¨²n han explicado los propios palestinos.

Pocas semanas antes de que la polic¨ªa israel¨ª detuviera y expulsara de Israel a este grupo de fan¨¢ticos e iluminados, las autoridades fronterizas del puerto de Haifa hab¨ªan impedido el paso a los miembros de otra organizaci¨®n sectaria de nacionalidad irlandesa y rumana que pretend¨ªan tambi¨¦n llegar a la ciudad santa de Jerusal¨¦n para hacer realidad su personal profec¨ªa, aunque ellos desmintieron categ¨®ricamente estas acusaciones y afirmaron dedicarse enteramente a cuidar a los minusvalidos.

Pero eso no es todo; el pasado mes de enero se hab¨ªa ya desarticulado en Jerusal¨¦n otro grupo radical, Cristianos Preocupados. ?stos s¨ª reconocieron estar planeando el suicidio multitudinario de todos sus fieles, para convertir en realidad los vaticinios de su gur¨², Monte Kim Miller, que ha profetizado que morir¨¢ en la ciudad de Jerusal¨¦n en v¨ªsperas del fin del mundo, cuando se cumpla el a?o 2000.

La proliferaci¨®n de estas sectas apocal¨ªpticas ha obligado a las autoridades israel¨ªes a tomar cartas en el asunto. El ministro de Seguridad Interior, Slomo Ben Ami, se traslad¨® la semana pasada a Estados Unidos, donde se entrevist¨® con los responsables del FBI, quienes le prometieron su ayuda y colaboraci¨®n.