Verde oscuro

Resulta dif¨ªcil a estas alturas de nuestra historia determinar con claridad de d¨®nde es originario este ¨¢rbol peque?o que tanto ha influido en la cocina y en la vida de los aromas y olores de la cultura mediterr¨¢nea. Hojas sencillas alternadas en las ramas, robustas y aceradas en sus dos caras, con forma de punta de lanza de las que vemos en las pel¨ªculas de ¨¦poca. Al partir las hojas se libera un aceite que ofrece un intenso olor arom¨¢tico inconfundible.Entrado ya con fuerza el oto?o, en algunos barrancos de las sierras de Tarifa y Algeciras se encierra un hermoso proceso de germinaci¨®n de los redondos frutos, que caen verdes para ennegrecerse r¨¢pidamente, sobre todo si las lluvias hacen acto de presencia pronto. No tardaremos en descubrir c¨®mo echan ra¨ªces y dan un estir¨®n inicial.

De los bosques de selvas h¨²medas, llamadas laurisilvas por el gran parecido de sus ¨¢rboles con el laurel que pobl¨®, seg¨²n los expertos, grandes zonas de la cuenca mediterr¨¢nea, a los escasos ejemplares que nos encontramos hoy de este ¨¢rbol extendido por el hombre hay todo un cambio, no s¨®lo clim¨¢tico. Humildemente intenta luchar con la compa?¨ªa de quejigos, alcornoques y ojaranzaos en mantener y mejorar su sencilla poblaci¨®n que, hacia el estrecho de Gibraltar, vigila al mar.