La declaraci¨®n final de la Cumbre recoger¨¢ el rechazo a "cualquier extraterritorialidad"

La IX Cumbre Iberoamericana de La Habana consagrar¨¢ en su declaraci¨®n final el rechazo de Am¨¦rica Latina, Espa?a y Portugal a cualquier extraterritorialidad, condenar¨¢ la ley norteamericana Helms-Burton, y, por elevaci¨®n, desautoriza el proceso abierto en Espa?a por el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garz¨®n contra el ex dictador chileno Augusto Pinochet y los autos de busca y captura contra las juntas militares argentinas. El borrador, que pulen los delegados de 21 naciones, aboga por el pluralismo pol¨ªtico.

Estados Unidos inst¨® al foro, en carta oficial remitida a varios presidentes, a reprochar al Gobierno de Castro el incumplimiento de los compromisos democr¨¢ticos recogidos en la Declaraci¨®n de Vi?a del Mar de 1996. La Declaraci¨®n de La Habana censur¨® en su primera redacci¨®n "todas las medidas de car¨¢cter unilateral y con efecto extraterritorial que son contrarias al derecho internacional y a las reglas de libre comercio com¨²nmente aceptadas". La comisi¨®n coordinadora del borrador incorpor¨® despu¨¦s una propuesta chilena claramente derivada de la causa abierta por Garz¨®n : "La extraterritorialidad de las leyes nacionales es contraria al esp¨ªritu de cooperaci¨®n y amistad entre nuestros pueblos", dice. "Supone una violaci¨®n de los principios que rigen la convivencia internacional y debilita los acuerdos internacionales".El a?adido no es definitivo, pues ser¨¢ sometido a la discusi¨®n de los ministros de Exteriores y a la ratificaci¨®n, ma?ana, de los presidentes. La formulaci¨®n chilena fue decorosa, de acuerdo con el criterio de la viceministra colombiana de Exteriores, Clemencia Forero, "y Espa?a manifest¨® su comprensi¨®n y respeto por los asuntos internos, no s¨®lo de Chile, sino de otros pa¨ªses".

Iniciativa chilena

El rechazo de la extraterritorialidad hab¨ªa quedado sentado en anteriores cumbres, pero volvi¨® a retomarse a iniciativa chilena con una nueva lectura. Preguntado el ministro cubano de Relaciones Exteriores, Felipe P¨¦rez Roque, sobre cu¨¢l vaya a ser la reacci¨®n de la cumbre sobre el proceso contra Pinochet instruido por el juez espa?ol respondi¨® que la declaraci¨®n de La Habana recuperar¨¢ la filosof¨ªa de la Cumbre de Oporto, en octubre de 1998. "Se opondr¨¢ a cualquier medida extraterritorial de cualquier car¨¢cter", dijo. Las rev¨¢lidas impuestas por Estados Unidos a pa¨ªses aquejados por el narcotr¨¢fico, la expedici¨®n de certificados de buena o mala conducta a Colombia, Bolivia, M¨¦xico o Per¨², los secuestros en terceros pa¨ªses, o la intervenci¨®n en suelo mexicano de agentes encubiertos norteamericanos que investigaron el blanqueo de capitales en la banca azteca, subyacen en el punto relativo a la extraterritorialidad.Diecis¨¦is presidentes, el rey de Espa?a, un primer ministro y cinco delegados presidenciales inaugurar¨¢n los trabajos de un foro que llega precedido por la pol¨¦mica. No asisten los jefes de Gobierno de El Salvador, Costa Rica y Nicaragua, cuyo canciller se entrevist¨® ayer con un grupo de disidentes. Los tres gobernantes afirmaron que no acuden porque la revoluci¨®n cubana es totalitaria. Los de Chile, Eduardo Frei, y de Argentina, Carlos Menem, se ausentaron en protesta por la iniciativa del magistrado espa?ol en el Cono Sur. Chile, cuya democracia y justicia padecen las ataduras y limitaciones impuestas por la dictadura en la Constituci¨®n vigente, considera que Espa?a, de alguna manera, se lava las manos y elude los compromisos contra¨ªdos en la Cumbre de Oporto apenas 48 horas despu¨¦s de que Augusto Pinochet fuera detenido en Londres.

Sin entrar en detalles tampoco, la doctrina aprobada en la ciudad portuguesa llam¨® a la no intervenci¨®n en casa ajena, a la territorialidad. Al t¨¦rmino de la dictadura chilena, sin embargo, los partidos de la coalici¨®n gubernamental llegaron a la conclusi¨®n de que comenzaban su mandato sometidos a la f¨¦rula castrense y que la transici¨®n hacia la democracia obligaba a ciertas concesiones, una de ellas la impunidad sine die de Augusto Pinochet Ugarte.

Condena a la Helms-Burton

M¨¢s que un pronunciamiento contra el proceso incoado al ex dictador latinoamericano, el documento de Oporto constituy¨® una condena de la ley estadounidense Helms-Burton, que castiga a empresas de terceros pa¨ªses con inversiones en Cuba. La espa?ola Sol-Meli¨¢ atraviesa en estos momentos el ojo del hurac¨¢n y alguno de sus directivos viaj¨® a La Habana, cuyo Malec¨®n, monumentos hist¨®ricos y accesos al barrio colonial han sido abrillantados para que los visitantes puedan disfrutar de una de las capitales m¨¢s hermosas de Am¨¦rica Latina pese al decaimiento de sus cimientos. M¨¢s de 300 veh¨ªculos, entre ellos 30 Mercedes Benz nuevos, facilitar¨¢n el transporte de las cerca de 2.000 personas asistentes, entre funcionarios, delegados y periodistas. Un c¨¢lculo extraoficial cifra la inversi¨®n efectuada en cinco millones de d¨®lares (cerca de 800 millones de pesetas).