Clinton afirma en Ankara que "la nueva Europa libre y unida" debe incluir a Turqu¨ªa
Dos d¨ªas despu¨¦s de que un nuevo terremoto sacudiera el pa¨ªs y en v¨ªsperas de la cumbre de la Organizaci¨®n para la Seguridad y Cooperaci¨®n en Europa (OSCE), el presidente de EEUU, Bill Clinton, lleg¨® el domingo a Ankara. Tras entrevistarse ayer con el presidente turco, Suleyman Demirel, Clinton aprovech¨® para expresar su respaldo a la integraci¨®n de Turqu¨ªa en la Uni¨®n Europea (UE). "La nueva Europa libre y unida debe incluir a Turqu¨ªa", dijo. Clinton hizo un llamamiento para que mejoren los derechos humanos en ese pa¨ªs, aunque reconoci¨® progresos.
Son muchas las asignaturas pendientes que Clinton desear¨ªa ver zanjadas en Turqu¨ªa antes del final de su mandato: sellar una reconciliaci¨®n entre Grecia y Turqu¨ªa, encauzar un definitivo proceso de paz en Chipre y pujar por el control de las l¨ªneas energ¨¦ticas que provienen del mar Caspio. ?sos son los ejes de su gira. Ambos mandatarios expresaron su satisfacci¨®n por las estrechas relaciones diplom¨¢ticas que mantienen sus respectivos pa¨ªses. "Durante la guerra fr¨ªa se solidificaron nuestros lazos y hoy compartimos la misma confianza en la democracia, la libertad y la paz", asegur¨® Demirel. Por su parte, Clinton tuvo palabras de solidaridad con el pueblo turco por los recientes terremotos y afirm¨® que EEUU "continuar¨¢ haciendo todo lo posible para acelerar la recuperaci¨®n de Turqu¨ªa, incentivar la inversi¨®n privada y ayudar al pa¨ªs frente a futuros desastres".
El presidente de Estados Unidos tambi¨¦n quiso subrayar su apoyo a la candidatura de Turqu¨ªa a la UE y declar¨® que "la nueva Europa libre y unida debe incluir a Turqu¨ªa", al tiempo que instaba a este pa¨ªs a la reconciliaci¨®n con Grecia, su gran enemigo hist¨®rico. A pesar de que en los ¨²ltimos meses ha surgido un proceso de acercamiento entre ambos pa¨ªses -acentuado por la ayuda mutua ante los terremotos de este verano- el escollo de Chipre sigue amenazando las perspectivas de reconciliaci¨®n.
Clinton pretende en esta visita impulsar y apadrinar el inicio de un proceso negociador para un conflicto que enfrenta a ambos pa¨ªses desde hace m¨¢s de 25 a?os. ?sta, ha sido durante a?os la reivindicaci¨®n esencial del lobby griego en Estados Unidos, pr¨®ximo al Partido Dem¨®crata.
Tradicionalmente, el gran problema para la apertura de negociaciones sobre Chipre ha sido la exigencia de la parte turcochipriota de que le sea reconocido un estatuto internacional id¨¦ntico al que ostentan los grecochipriotas; es decir, que se acepte la existencia de dos entidades con rango estatal en la isla. Pese a los a?os transcurridos desde la invasi¨®n turca de 1974, la Rep¨²blica Turca del Norte de Chipre s¨®lo ha sido reconocida por Turqu¨ªa.
Sin embargo, unas declaraciones de Clinton durante la visita a Estados Unidos del primer ministro turco B¨¹lent Ecevit en septiembre aclarando que "en Chipre ya no es posible un retorno a la situaci¨®n previa a 1974", parecen haber posibilitado una soluci¨®n de compromiso. El presidente turcochipriota, Rauf Denktas, anunci¨® el domingo que acepta participar en una ronda de conversaciones con el l¨ªder grecochipriota, Glafcos Clerides. Las conversaciones se iniciaran en Nueva York el 3 de diciembre bajo los auspicios del secretario general de la ONU, Kofi Annan.
El presidente norteamericano expres¨® tambi¨¦n su deseo de que Turqu¨ªa profundice su democracia y el respeto a los derechos humanos. "Ha habido una mejora impresionante en los ¨²ltimos a?os, y espero que continuar¨¢n los progresos, en especial en el terreno de la libertad de expresi¨®n", manifest¨®.
Clint¨®n aprovechar¨¢ su estancia en Turqu¨ªa para tratar la conflictiva situaci¨®n en el C¨¢ucaso. Est¨¢ previsto que, durante la cumbre de la OSCE en Estambul, Clinton respalde la firma del acuerdo para la construcci¨®n del oleoducto Baku-Ceyhan. Un proyecto predilecto de la Administraci¨®n norteamericana y que debe conectar los campos petrol¨ªferos de Azerbaiy¨¢n, en el Caspio, con la refiner¨ªa turca de Ceyhan, en el Mediterr¨¢neo, evitando que el petr¨®leo discurra por territorio ruso.
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