La central nuclear francesa de Blayais, inutilizada por el temporal

La central nuclear de Blayais, en la Gironda, cerca de Burdeos, permanece inutilizada desde la noche el 27 de diciembre por una inundaci¨®n que oblig¨® a parar tres de los cuatro reactores del complejo, que suministra el 5% de la energ¨ªa que consume Francia. Las inundaciones se debieron al aumento del caudal del r¨ªo Garona, una marea y un hurac¨¢n. El Gobierno franc¨¦s acaba de hacer p¨²blico el suceso.

Los reactores 2 y 4 se detuvieron autom¨¢ticamente debido a cortes en las l¨ªneas de alta tensi¨®n que unen la central con el resto del tendido mientras que el reactor 1 lo hizo al obturarse la bomba de agua que asegura su enfriamiento debido a que el agua que aspiraba estaba llena de trozos de madera.Ciertos circuitos de refrigeraci¨®n, al verse inundados, dejaron de funcionar y la organizaci¨®n responsable de las situaciones de crisis clasific¨® el incidente como de grado 2. De haberse declarado de grado 3 -la escala de valoraci¨®n llega hasta 7- hubiera sido preciso ordenar la evacuaci¨®n de la poblaci¨®n de varios kil¨®metros a la redonda.

El responsable del Instituto de Protecci¨®n y Seguridad Nuclear Jean Christophe Niel, ha precisado posteriormente que "en ning¨²n momento se ha visto afectada la integridad de alguna de las tres barreras de seguridad".

Mientras se hace la evaluaci¨®n de los da?os causados por el viento y el agua en dos de las ¨²ltimas noches de diciembre -se habla de 75.000 millones de obras de reconstrucci¨®n, de 270 millones de ¨¢rboles derribados, pero muy poco de los 89 muertos-, el presidente de TotalFina, Thierry Desmarest, se esfuerza por recuperar el prestigio ganado con sus operaciones financieras para absorber Elf. Totalfina es la empresa que envi¨® el petr¨®leo que portaba el barco hundido Erika. "Es cierto que en un primer momento no comprendimos la amplitud del desastre", admite.

El Gobierno presentar¨¢ el 12 de enero las medidas a adoptar tanto para reparar lo m¨¢s r¨¢pidamente posible los desperfectos como para evitar que se reproduzcan y, sobre todo, para ayudar a las peque?as y medianas empresas a superar una situaci¨®n dif¨ªcil.

Francia, que presidir¨¢ la UE a partir de junio del 2000, quiere aprovechar los seis meses de mando para presentar una nueva reglamentaci¨®n reguladora del tr¨¢fico mar¨ªtimo, con una exigencia de uniformidad europea que complique el que buques en tan mal estado como el Erika puedan acercarse a un puerto de la UE.