Blair promete una inversi¨®n de 3,1 billones para paliar la crisis sanitaria brit¨¢nica
El Gobierno ofrece aumentos de sueldo para superar la escasez de profesionales
El legado de la gripe, a¨²n en pleno auge, ser¨¢ dif¨ªcil de olvidar en el Reino Unido. No s¨®lo ha demostrado que faltan m¨¦dicos, enfermeras y camas en los hospitales nacionales. Sobre todo, ha puesto de manifiesto que las promesas electorales de Tony Blair, que venci¨® a los conservadores apoyado en las reformas educativa y sanitaria, est¨¢n lejos de haberse cumplido. Acosado por las cr¨ªticas y deseoso de conservar el voto de confianza del electorado, Blair ha anunciado una inversi¨®n de 3,1 billones de pesetas a lo largo de los seis pr¨®ximos a?os en el sector.
"El invierno del descontento" es una figura literaria aplicada por los comentaristas brit¨¢nicos al periodo que precedi¨®, en 1979, a la victoria electoral de la primera ministra conservadora Margaret Thatcher. Serv¨ªa para describir una econom¨ªa estancada, un pa¨ªs en declive y una poblaci¨®n desencantada. Este a?o, por el contrario, la misma estaci¨®n ser¨¢ recordada por una ins¨®lita crisis sanitaria que ha golpeado con fuerza a la poderosa maquinaria pol¨ªtica del actual Gobierno laborista.La principal culpable del bochorno parece la gripe, que ha colapsado los hospitales p¨²blicos y retrasado operaciones urgentes, a veces con resultados fatales. Pero no. Se trata de algo m¨¢s profundo, y as¨ª lo ha reconocido Tony Blair al asumir la responsabilidad por la falta de fondos suficientes para gestionar la sanidad p¨²blica. "Reconozco que ¨¦sta tiene graves problemas. Hay que invertir m¨¢s, contratar nuevos m¨¦dicos y enfermeras y preparar camas de cuidados intensivos, pero todo ello sin olvidar la reforma misma del sistema", le dijo el domingo a David Frost, veterano entrevistador televisivo de la BBC.
Los 12.000 millones de libras adicionales (cerca de 3,1 billones de pesetas) que prometi¨® invertir a continuaci¨®n en la mejora de la red estatal de salud contentaron y sorprendieron a la vez a todos. Las dudas, no obstante, surgieron enseguida.
M¨¢s camas
Para empezar, la suma anunciada llegar¨¢ a su destino a lo largo de lo seis pr¨®ximos a?os. El Reino Unido gasta hoy un 6,7% de su Producto Interior Bruto en salud. En el resto de la UE la cifra media es de un 8%, con dos pa¨ªses a la cabeza: Francia, con un 9,6% y Alemania, con un 10,7%. Blair espera unirse al grupo general en el a?o 2006, a base de invertir 2.000 millones de libras anuales. Aumentar el n¨²mero de camas de cuidados intensivos y reclutar m¨¢s m¨¦dicos y enfermeras ser¨¢ el siguiente paso.
Cuando los enfermos de gripe abarrotaron los hospitales p¨²blicos hace dos semanas escasas -la situaci¨®n ha mejorado algo ahora- y las camas destinadas a pacientes muy graves fueron ocupadas por personas con problemas respiratorios agudos, las deficiencias de la red estatal de salud convirtieron por un momento a Alan Milburn, titular de Sanidad, en una figura que parec¨ªa no darse cuenta de la realidad. "La situaci¨®n es dif¨ªcil, pero no insostenible", repet¨ªa, alabando la abnegaci¨®n de un personal que cubr¨ªa a veces turnos de 16 horas.
Un caso flagrante se hizo entonces p¨²blico y ech¨® por tierra la cuidada versi¨®n oficial de la crisis. Mavis Skeet, una mujer de 72 a?os afectada de c¨¢ncer de es¨®fago, hab¨ªa visto pospuesta cuatro veces en cinco semanas una crucial operaci¨®n que le permitir¨ªa librarse de la sonda g¨¢strica que la alimentaba. Los onc¨®logos quer¨ªan saber tambi¨¦n si la enfermedad se hab¨ªa extendido, pero no hab¨ªa cama para ella. Cuando la gripe amain¨®, los especialistas le dijeron que su c¨¢ncer era ya inoperable.
Robert Winston, experto en fertilizaci¨®n artificial y nombrado lord por el laborismo, ahond¨® en la herida. Calific¨® de p¨¦simo el enfoque sanitario del Gobierno y, aunque luego matiz¨® sus palabras, la crisis sanitaria se hab¨ªa convertido ya en un asunto claramente pol¨ªtico.
Tony Blair dijo sentirse avergonzado por lo sucedido con la se?ora Skeet y prometi¨® de inmediato m¨¢s camas (en Inglaterra hay 1.570 en las unidades de cuidados intensivos). Los hospitales quieren saber ahora c¨®mo ser¨¢n financiadas. Dicho de otro modo, si los 12.000 millones de libras extra son lo que ellos llaman "dinero nuevo" o se tratar¨¢ m¨¢s bien de desviar "fondos viejos" de un sector sanitario a otro. La respuesta no est¨¢ todav¨ªa clara.
Reclutar m¨¦dicos y enfermeras tampoco ser¨¢ f¨¢cil. La falta de onc¨®logos y cardi¨®logos (hay 21.040 especialistas de todo tipo y 21.790 m¨¦dicos en pr¨¢cticas) ha hecho que las tasas de supervivencia de los enfermos brit¨¢nicos est¨¦n entre las peores de Europa.
Un paciente con c¨¢ncer puede acabar siendo tratado por su m¨¦dico de cabecera. El resultado es desesperante para unos y otros, y todos coinciden en que la mejora de los sueldos aliviar¨ªa la situaci¨®n.
En estos momentos hay en el pa¨ªs 421.750 enfermeras y comadronas trabajando en el sector p¨²blico. Su sueldo medio ronda las 14.000 libras anuales (3.640.000 pesetas). En septiembre pasado, las vacantes rondaban el 2,6%, cifra que el Gobierno espera cubrir con el aumento del 3,3% anunciado ayer, que ascender¨¢ a un 7% para las que lleven cinco a?os de servicio.
?Salvar¨¢ todo ello la situaci¨®n actual? De momento, ni siquiera los portavoces oficiales se atreven a aventurar una respuesta.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.