Sin previsi¨®n de futuro

La regulaci¨®n del profesorado universitario en situaci¨®n precaria era uno de los apartados de la modificaci¨®n de la Ley de Reforma Universitaria (LRU, 1983) que los rectores llevan reclamando toda la legislatura. ?stos propusieron la creaci¨®n de nuevas figuras de profesorado adaptadas a las necesidades de futuro de las universidades, pero se han tenido que conformar con lo que califican de "retoques parciales", introducidos mediante dos reales decretos, aprobados por el Consejo de Ministros el pasado viernes, dos meses antes de las elecciones generales.Los cambios consisten en la creaci¨®n de una nueva modalidad de contrataci¨®n de profesorado como asociado doctor a tiempo completo, con la misma retribuci¨®n que los titulares universitarios; la eliminaci¨®n del l¨ªmite de contrataciones de los profesores asociados a tiempo completo, establecida actualmente en tres a?os; la introducci¨®n de una evaluaci¨®n externa del profesorado asociado a tiempo completo para la renovaci¨®n de los contratos; los complementos para los titulares de escuela universitaria y el aumento de la cantidad m¨¢xima que se puede obtener por complementos docentes y de investigaci¨®n.

Actualmente el profesorado universitario se divide en profesorado funcionario -que son los catedr¨¢ticos de universidad y de escuela universitaria, y los titulares de facultad y de escuela universitaria- y en profesorado contratado - que son los ayudantes y los asociados-. Los asociados aparecen recogidos en la ley como profesionales en ejercicio que son contratados por las universiades a tiempo parcial. Sin embago, esta figura se ha pervertido y se ha utilizado como sistema habitual de contrataci¨®n de profesores tanto a tiempo completo como parcial.

Necesidades de futuro

Educaci¨®n pact¨® con los sindicatos, tambi¨¦n la semana pasada, la inversi¨®n que se destinar¨¢ para hacer realidad las modificaciones aprobadas: el Gobierno aportar¨¢ 7.000 millones de pesetas este a?o, inversi¨®n que mantendr¨¢ s¨®lo durante los pr¨®ximos dos a?os. Por su parte, las comunidades aut¨®nomas deben aportar otro tanto (1.750 millones el primer a?o, 2.450 el segundo y 3.500 el tercero). La oposici¨®n y la mayor¨ªa de los rectores advierten de que esta cantidad "no es en absoluto suficiente" para solucionar la situaci¨®n de los 10.000 profesores asociados en situaci¨®n precaria y califican la reforma realizada de "retoques que no est¨¢n adaptados a un plan de necesidades de futuro".

En cambio, los sindicatos se han mostrados satisfechos con el acuerdo "peleado" durante toda la legislatura, como se?ala el secretario general de Ense?anza de CCOO, Fernando Lezcano. "Satisface muy antiguas reivindicaciones y soluciona importantes problemas con medidas complementarias de estabilidad y promoci¨®n de las plantillas", opina Lezcano. En cambio, la incertidumbre sobre si la Administraci¨®n garantizar¨¢ en el futuro a las comunidades fondos espec¨ªficos para mantener los nuevos contratos que puedan realizarse es otro factor que ha despertado el recelo en las universidades a la hora de empezar a hacer contratos.

Para el rector de la Universidad de Barcelona, Antonio Caparr¨®s, y vicepresidente de la Conferencia de Rectores de las Universidades Espa?oles (CRUE), el acuerdo es "un apa?o porque se deber¨ªa haber abordado el problema del profesorado de una forma m¨¢s profunda y a largo plazo". Sin embargo, matiza: "Nadie duda de que es necesario solucionar situaciones de gran injusticia que se est¨¢n dando, y las universidades no hemos tenido presupuesto desde hace a?os para solucionarlas". Caparr¨®s opina que con la inyecci¨®n del Gobierno se podr¨¢ estabilizar a parte del profesorado, lo que permitir¨¢ "hacer una reforma de la ley sin la presi¨®n actual, que hubiera alterado el proceso pol¨ªtico".

El rector de la Universidad de Barcelona insiste en algunos aspectos a reformar: la distribuci¨®n de las competencias de las universidades, la relaci¨®n entre docencia e investigaci¨®n y el replanteamiento de las ¨¢reas de conocimiento.

El rector de la Complutense de Madrid, Rafael Puyol, opina que "consolidar al profesorado asociado a tiempo completo es un retoque parcial" porque se necesita una soluci¨®n m¨¢s en profundidad. Sobre la cuant¨ªa pactada, se?ala que permitir¨¢ "empezar a regular a algunos profesores, pero en modo alguno es suficiente para todos". "Ya en la situaci¨®n actual, nuestra subvenci¨®n nominativa para cada a?o est¨¢ lejos de resolver los principales problemas: lo que recibimos para profesorado s¨®lo cubre el 90%, y el resto debemos sacarlo de otros conceptos".

Puyol explica que es ahora cuando las universidades tienen que replantearse su futuro, lo que precisar¨¢ una reforma m¨¢s compleja de la contrataci¨®n del profesorado: "Ha terminado una etapa de masificaci¨®n y tenemos ante nosotros unos retos inaplazables. Debemos apostar por la mejora de la calidad, la formaci¨®n continua y permanente, la investigaci¨®n y por establecer m¨¢s contactos con empresas e instituciones. Para ello, debemos habilitar f¨®rmulas que permitan incorporar a diversos profesionales a la universidad, algo que es imprescidible e inevitable en un proyecto de futuro".