EH no condena a ETA en el Parlamento pero se desvincula de la violencia

Despu¨¦s de que EH rechazara ayer suscribir en el pleno del Parlamento vasco "una condena sin paliativos a ETA" propuesta por los socialistas, el lehendakari, Juan Jos¨¦ Ibarretxe, pidi¨® a EH un esfuerzo dial¨¦ctico mayor para que la sociedad perciba que rechaza la violencia. Ibarretxe valor¨® el paso dado por EH al apoyar un punto del texto de PNV y EA en el que dicen que "no amparan ni justifican accion de violencia alguna", y la actitud de Arnaldo Otegi, quien declar¨® que "EH no necesita a ETA para avanzar en la consecuci¨®n de sus objetivos pol¨ªticos".

El pleno en el que los partidos se enfrentaban a la condena del atentado que cost¨® la vida al teniente coronel Pedro Antonio Blanco Garc¨ªa acab¨® sin avances respecto a las posturas ya conocidas. El PNV y EA condenaron el atentado pero no consiguieron que lo hiciera EH; el PSE dej¨® abierta la puerta a modificaciones de la Constituci¨®n y el Estatuto, pero cuando ETA deje de matar definitivamente; el PP no se movi¨® de su duro enfrentamiento con los nacionalistas, aunque ayer no pidi¨® elecciones anticipadas ni le record¨® al lehendakari que el jueves dejaron en suspenso sus relaciones con ¨¦l; y el PNV anunci¨® que nada va a hacer cambiar su estrategia.Despu¨¦s de tres horas de debate en torno a una propuesta del PSE que ped¨ªa la "condena sin paliativos" del atentado y de las enmiendas presentadas por todos los partidos menos EH, la C¨¢mara vot¨® y el PNV y EA sacaron adelante su enmienda que condena el atentado con el apoyo de todos los dem¨¢s partidos, excepto EH.

La expectaci¨®n que hab¨ªan suscitado las intensas negociaciones mantenidas por el PNV, EA y EH en las horas previas al pleno y que pretend¨ªan reconducir los acuerdos parlamentarios con EH s¨®lo dur¨® los primeros minutos, hasta la intervenci¨®n de Otegi.

EH respald¨® todo el texto del PNV y EA menos los apartados que "condenan sin paliativos las acciones y atentados de ETA y le exige el cese inmediato de sus actividades terroristas" y cuando se cita que los partidos firmantes "abogan por la constituci¨®n de una mesa de di¨¢logo plural y sin m¨¢s l¨ªmite que la voluntad popular libremente expresada".

Ateni¨¦ndose a la literalidad del resto del documento, la plataforma abertzale reconoci¨® que "ninguna idea, ning¨²n proyecto pol¨ªtico tiene legitimidad para imponerse con la violencia a los dem¨¢s", as¨ª como que ni ampara ni justifica ninguna acci¨®n violenta. En otro momento del debate, y en presencia del ex dirigente de ETA y parlamentario de EH, Jos¨¦ Antonio Urrutikoetxea, Josu Ternera, Otegi respondi¨® a una pregunta planteada por el foralista Pablo Mosquera sobre si EH necesitaba la tutela de ETA para abordar el camino de la independencia: "EH no necesita a ETA. No practicamos la lucha armada".

Al finalizar el debate, el lehendakari apreci¨® un cambio en EH, aunque insuficiente para rehabilitar los acuerdos parlamentarios. Ibarretxe dijo en los pasillos de la C¨¢mara que la Mesa Nacional ha dado "un paso adelante" al explicitar que "no ampara ni justifica ninguna acci¨®n violenta".

Ibarretxe, aunque en ning¨²n momento ha dicho cu¨¢l es el t¨¦rmino o el concepto que quiere de EH, explic¨® que la reactivaci¨®n del pacto depende m¨¢s de la "actitud" que demuestre EH ante el terrorismo que de los "verbos" que utilice. Consciente de que exigir una condena a HB es cerrarse la puerta definitivamente a contar con su apoyo, el lehendakari se mostr¨® exigente y sin prisas, pero tambi¨¦n flexible al acuerdo.

Los representantes del PP y PSE-EE interpretaron el desenlace del pleno como una operaci¨®n de maquillaje que permite a Ibarretxe mantener una cierta posici¨®n de autoridad, pero que en realidad no cambia el rumbo de las cosas.

Beligerante con lo que defini¨® como la estrategia del "pasito a pasito", el portavoz socialista, Fernando Buesa, critic¨® que PNV y EA consideren la postura de EH como una avance en su desmarque de ETA y en consecuencia para recuperar la estabilidad del Gobierno. El PSE urgi¨® al lehendakari a aclarar si est¨¢ dispuesto a plantear una moci¨®n de confianza.