El lagarto gigante de El Hierro se recupera como especie de forma espectacular desde 1975 Las hembras pueden almacenar y dosificar el semen para fecundar los huevos
El lagarto gigante de El Hierro es una especie end¨¦mica de la isla canaria que se crey¨® extinguida desde principios de siglo. En 1975, dos cient¨ªficos alemanes comunicaron el descubrimiento de algunos ejemplares por un pastor en la Fuga de Gorreta. Desde entonces, la especie no ha dejado de sorprender. Es un peque?o reptil -gigante para ser lagarto, pero realmente un dinosaurio omn¨ªvoro en miniatura de menos de 70 cent¨ªmetros de largo- que llega ya a los 1.500 ejemplares, y adem¨¢s presenta singularidades sexuales: la hembra almacena y dosifica el esperma a voluntad.
Seg¨²n el bi¨®logo Miguel ?ngel Rodr¨ªguez Dom¨ªnguez -del Centro de Recuperaci¨®n del Lagarto Gigante de El Hierro, donde ya han nacido m¨¢s de 400 lagartitos-, al poner varios machos juntos sin hembras, el mayor intentaba conquistar a uno de los m¨¢s peque?os. El lagarto dominante balanceaba la cabeza como ante una hembra y, siguiendo la pauta del cortejo, le mord¨ªa la piel del cuello. Al final, el seductor montaba a su lomo y, frotando su hemipene contra su espalda, conclu¨ªa la conquista.M¨¢s eficaz desde el punto de vista reproductivo es el comportamiento de algunas hembras. Seg¨²n la revista Herpetological Review, el cient¨ªfico canario observ¨® que lagartas que llevaban hasta un a?o sin acercarse a un macho pon¨ªan huevos. La explicaci¨®n es que esas hembras pod¨ªan almacenar semen en su interior y mantenerlo vivo hasta que decid¨ªan, todav¨ªa no se sabe por qu¨¦, dejar fecundar los huevos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.