Globalizaci¨®n
En una entrevista de Margarita Rivi¨¨re a Manuel Castells, en un dominical de este diario, he cre¨ªdo entender algo sobre la globalizaci¨®n y he podido angustiarme por lo lejos que nos queda a la mayor¨ªa de los mortales, pues lo que cuenta, que es todo lo relacionado con el poder, es lo global, mientras que lo que nos importa es lo local, lo que ocurre en nuestro entorno, lo que podemos controlar. Aunque seg¨²n y c¨®mo, porque, si est¨¢ muy claro que nos importa y controlamos nuestra casa por dentro tal como aqu¨ª nos gustan, limpitas y ordenadas, la calle, sin embargo, aunque no deja de ser entorno nuestro, ya es harina de otro costal. En la calle soportamos el ruido, la contaminaci¨®n, los excrementos de las palomas, los caballos o los perros, los papeles, los chicles, los escupitajos y qu¨¦ s¨¦ yo cu¨¢ntas cosas m¨¢s. No digamos ya lo que ocurre con eso que cuenta y que est¨¢ globalizado: se nos escapa por completo; cambia nuestras vidas pero s¨®lo podemos inquietarnos y sin saber por qu¨¦.Para sobrellevar lo mejor posible tanto trastorno de la globalizaci¨®n, conviene, seg¨²n el profesor Castells, saber pensar, saber escuchar y ser capaz de combinar distintas actividades para aprovechar todas sus posibilidades creativas, que no todo ha de ser negativo, y es precisamente ah¨ª, en esa cualidad, donde entramos las mujeres con buen pie, ya que, seg¨²n las estad¨ªsticas, somos m¨¢s innovadoras que los hombres. Como todo hay que decirlo, un motivo es que hay m¨¢s chicas que chicos en la universidad, pero tambi¨¦n es verdad que la cultura femenina, condicionada por la diversidad de las necesidades cotidianas, ha facilitado a las mujeres el pasar de un tema a otro con toda naturalidad, y a simultanear el trabajo profesional con los plomos fundidos, el biber¨®n, la moda, la cocina y la fiesta; buscando siempre la manera m¨¢s pr¨¢ctica y eficaz de llevar a cabo los m¨²ltiples quehaceres.
La cultura masculina, en cambio, con esa man¨ªa de la especializaci¨®n, se lo ha puesto un poco m¨¢s duro a los hombres y no son lo suficientemente adaptables. Ahora resulta que las mujeres vamos a tener ventaja para triunfar en la sociedad global. Y nosotras aqu¨ª protestando de la sequ¨ªa y del calor y sin saberlo.
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