Las inc¨®gnitas de la legislatura Preocupaci¨®n ante la posible desaparici¨®n del ministerio y algunas promesas del PP
El rotundo triunfo del PP en las elecciones ha sido acogido con preocupaci¨®n por los sindicatos docentes, la oposici¨®n y gran parte de la comunidad educativa. La primera gran incertidumbre es el futuro del ministerio, que puede desaparecer una vez transferidas las mayor¨ªa de sus competencias a las comunidades. Compromisos electorales del PP como la reforma de las humanidades, la reducci¨®n de optativas o la diversificaci¨®n de itinerarios en la ESO se convertir¨¢n previsiblemente en fuente de conflictos con las comunidades (ocho de ellas en manos ajenas al PP).
A la inc¨®gnita sobre el futuro del ministerio se une el temor a la imposici¨®n de reformas con las que no est¨¢n de acuerdo algunos colectivos y que colearon durante la legislatura anterior, impulsadas inicialmente por la ex ministra Esperanza Aguirre y posteriormente por Mariano Rajoy. Los sindicatos, los padres de alumos de la ense?anza p¨²blica y la oposici¨®n temen que el Gobierno intente sacar adelante sin consenso, gracias a la mayor¨ªa absoluta obtenida el 12 de marzo, definitivas reformas legales que produzcan reales desviaciones presupuestarias hacia la ense?anza privada.En cuanto al futuro del ministerio, entre las hip¨®tesis que se barajan en este momento no es descabellado pensar que sus escasas competencias, como la gesti¨®n de la alta inspecci¨®n educativa, sean asumidas por otro departamento. Una alternativa que se plantea es que se traslade a un departamento de Presidencia del Gobierno, una opci¨®n probable si se confirma la hip¨®tesis de que Mariano Rajoy, que seguramente no continuar¨¢ como ministro de Educaci¨®n, ocupe una de las vicepresidencias del futuro Ejecutivo. Una hip¨®tesis razonable, seg¨²n las actuales expectativas, es que la educaci¨®n siga en manos de Rajoy tras la pac¨ªfica gesti¨®n realizada despu¨¦s del tormentoso paso de Esperanza Aguirre por el ministerio.
La comunidad educativa teme, adem¨¢s, que se relegue el papel de la educaci¨®n si se disuelve el ministerio. En cualquier caso, el organismo que se debe encargar a partir de ahora de la vertebraci¨®n y organizaci¨®n del sistema educativo es la Conferencia Sectorial, que est¨¢ integrada por representantes del Gobierno. Hasta ahora, su funcionamiento ha sido bastante precario en cuanto a la eficacia.
El programa en materia de educaci¨®n presentado por el Partido Popular en las pasadas elecciones se?ala algunos de esos cambios controvertidos. ?stas son las promesas del PP en relaci¨®n con la educaci¨®n no universitaria (los entrecomillados son parte del programa electoral):
- Curr¨ªculo
- "Establecer, con car¨¢cter general, la iniciaci¨®n del aprendizaje de un idioma extranjero a los tres a?os". Puede hacerse mediante una ley que obligue a las comunidades a llevarlo a cabo o mediante recomendaciones. Tendr¨ªa necesariamente que ir acompa?ada de un apoyo presupuestario.
- "Reforzar las materias troncales en la educaci¨®n secundaria obligatoria y reducir el elevado grado de fragmentaci¨®n curricular". Se pretende reducir las materias optativas para aumentar las horas de las troncales, como matem¨¢ticas o lengua. Una medida realmente controvertida, porque el Gobierno central no tiene competencias para decidir la cantidad de optativas que deben impartir las comunidades.
- "Poner el acento en la educaci¨®n secundaria obligatoria, particularmente en la lengua y las matem¨¢ticas por su valor instrumental, incrementando su carga lectiva en toda la etapa". Y "reforzar la presencia de las humanidades en el bachillerato y, en particular, de la filosof¨ªa, las lenguas cl¨¢sicas y la historia universal y de Espa?a".
El margen del Gobierno para reformar el curr¨ªculo es el de las ense?anzas m¨ªnimas, que suponen el 65% del curr¨ªculo para las comunidades sin lengua propia y el 55% para las comunidades con ella. Esos contenidos m¨ªnimos son dif¨ªciles de cambiar porque est¨¢n cuidadosamente encajados. Mover las horas de unas materias ser¨ªa en perjuicio de otras.
- "Modificar el car¨¢cter comprensivo del segundo ciclo de la ESO, preservando un tronco com¨²n e introduciendo diferentes itinerarios orientados hacia la etapa posterior". Se puede poner en marcha mediante una ley org¨¢nica que obligue a las comunidades o mediante recomendaciones. El problema de este adelanto es que, si se vincula la elecci¨®n de los alumnos a esa edad (14 a?os) a la opci¨®n posterior de bachillerato (cient¨ªfico o human¨ªstico, por ejemplo), se est¨¢ obligando a elegir demasiado pronto una especialidad. Otro inconveniente es el t¨ªtulo que se dar¨ªa a los alumnos. Otorgarles uno que s¨®lo les habilite para seguir despu¨¦s determinado tipo de estudios limitar¨ªa su futuro y ser¨ªa muy discutido.
- Calendario
- "Homologar el n¨²mero de d¨ªas lectivos del curso escolar con el de los pa¨ªses de nuestro entorno". Una medida que ser¨ªa muy aplaudida por las asociaciones de padres de alumnos de la educaci¨®n, pero que cuenta con las reticencias de los sindicatos y otros colectivos.
- Profesorado. Las reformas que hacen referencia al profesorado son complicadas por la necesidad de pactar con los sindicatos de la ense?anza, si se busca el consenso, y por la importante inyecci¨®n de recursos econ¨®micos y personales que supondr¨ªa cualquier cambio representativo.
- "Establecer por ley un Estatuto de la Funci¨®n P¨²blica Docente en donde se aseguren los derechos b¨¢sicos del profesorado, y se expliciten sus obligaciones y las de las Administraciones Educativas en todo el territorio del Estado". Es complicado. Supone determinar el horario de todos los profesores, el acceso a la docencia y sus funciones.
- "Definir un plan de carrera profesional para el profesorado que establezca una previsi¨®n personal de evoluci¨®n profesional que integre formaci¨®n, evaluaci¨®n y progresi¨®n". Es una propuesta necesaria, pero la evaluaci¨®n y los deberes del profesorado son cuestiones delicadas y no hay que perder de vista que son las comunidades las que tendr¨ªan que aplicar las medidas. Adem¨¢s, no se han puesto en marcha experiencias para comprobar los mejores modelos de evaluaci¨®n.
"Un sistema universitario vertebrado"
En materia universitaria, las promesas del PP tendr¨¢n por fuerza que ir acompa?adas de un pacto con los rectores y con las comunidades. Son ¨¦stas:
"La elaboraci¨®n de una ley que propicie un sistema universitario espa?ol vertebrado". No haber sido capaz de plantear y abordar la modificaci¨®n de la actual Ley de Reforma Universitaria (LRU) ha sido una de las cr¨ªticas m¨¢s repetidas desde las universidades en la pasada legislatura. El pacto con los rectores ser¨¢ imprescindible si no se quiere una revoluci¨®n universitaria. Tambi¨¦n lo ser¨¢ con las comunidades, lo que puede desatar m¨¢s de un conflicto. Algunas, como la catalana, tienen ya sus propias ideas sobre el modelo que prefieren.
"Se revisar¨¢ el Estatuto del Profesorado, manteniendo las figuras de profesor funcionario y profesor contratado con nuevas formas de contrataci¨®n que aseguren la promoci¨®n, en funci¨®n de los m¨¦ritos y la capacidad". Supone abrir la posibilidad de dotar a la Universidad de profesores contratados no funcionarios. Un problema ser¨¢ de qui¨¦n van a depender los contratos a esos profesores: del Gobierno central, de las comunidades o de las propias universidades.
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