Cuestiones
Estaba perdido en un mar de dedos, calibrando el tama?o de anular e ¨ªndice de la mano derecha para conocer mi orientaci¨®n sexual y, de camino, tratar de averiguar la de mi vecino y vecina. Raz¨®n: un estudio cient¨ªfico de la Universidad de California en Berkeley que, a trav¨¦s de estos dedos, intenta descubrir la homosexualidad o heterosexualidad en hombres y mujeres.El conocimiento y se?ales externas para tratar de conocer la orientaci¨®n sexual de pr¨®jimos y pr¨®jimas y entrar en una intimidad que s¨®lo es suya es para preocuparse. Tal vez por esta raz¨®n y con la intenci¨®n de salvaguardar mi intimidad, me he comprado un guante derecho y no miro otras manos. Adem¨¢s, resulta m¨¢s gratificante mirar a algunos jueces, como los que integran la Audiencia Provincial de Barcelona que, en sentencia ejemplar, han condenado a dos acusados por golpear salvajemente a una persona por la ¨²nica raz¨®n de ser gay.
Es la discriminaci¨®n por raz¨®n de sexo llevada al l¨ªmite y, de ah¨ª, la justicia en la aplicaci¨®n de la agravante por el Tribunal. Sin embargo, es una m¨¢s de las m¨²ltiples discriminaciones que, d¨ªa a d¨ªa, ocurren en el Estado. Unas veces es la orientaci¨®n sexual; otras, la raza, y, algunas, tan absurdas como la que ha sucedido en Catalu?a donde por el hecho de repartir ex¨¢menes de acceso a la Universidad en castellano el rector de Tarragona ha abierto expediente a una profesora por su atrevimiento.
Es la quiebra de la universalidad de los derechos humanos que la sociedad disimula con tolerancia a las minor¨ªas, aunque para que exista un cambio real en los comportamientos, y se considere libre de prejuicios, es necesario que reconozca que los derechos de las minor¨ªas son de todos. As¨ª alcanzar¨¢n la universalidad estos derechos y la libertad en el hombre ser¨¢ una realidad. Mientras exista la tolerancia de mirar hacia el otro lado, seguir¨¢n existiendo grupos como los que surgieron en El Ejido y acusados por golpear a gays y lesbianas.
Entre tanto la universalidad no sea el objetivo de la sociedad, a los golpeados no les va a quedar m¨¢s que el consuelo de una sonrisa: saber que sus agresores no eran tan machos, iban en grupo y sus genitales, seg¨²n el estudio de la mano, son m¨¢s peque?os.
EUGENIO SU?REZ PALOMARES
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