The Cure: oscura longevidad
Hace ya 21 a?os un oscuro grupo brit¨¢nico, The Cure, public¨® su primer elep¨¦, Three imaginary boys. Desde entonces han permanecido milagrosamente tanto en la mente de sus seguidores como en ese rinconcito que la prensa musical guarda para los grupos que merecen respeto. Conseguir esto tras 18 elep¨¦s (que se han mantenido a grandes rasgos en unos l¨ªmites estil¨ªsticos imperturbables) hace de esta longevidad algo a¨²n m¨¢s destacable.Y es que The Cure, la banda de Robert Smith, siempre ha apostado por las atm¨®sferas oscuras, el cultivo de las sombras interiores y una sonoridad densa matizada hoy en pop, ma?ana en rock, y siempre con un innegable sustrato de personalidad y calidad. Lo mismo se puede decir de sus conciertos, espl¨¦ndidas escenificaciones donde la opresi¨®n an¨ªmica se hace sombra y color. Su ¨²ltimo trabajo, Bloodflowers, ha mantenido estas constantes arrinconando un poco la vertiente m¨¢s pop de la banda, que se sumerge en un pantano de claroscuros que toma forma en canciones de largo desarrollo. Para presentar este trabajo llegan hoy a Barcelona, y ya han agotado las localidades para el concierto que esta noche ofrecen en el Palacio de los Deportes (22.00 horas) con Love of Lesbian como teloneros (20.45 horas). Para este concierto, que dicen que puede ser el ¨²ltimo que se vea de The Cure por estos pagos, la banda ya ha adelantado que, lejos de regodearse con sus viejos ¨¦xitos, repescar¨¢ temas oscuros, caras b y casi todo de su ¨²ltimo trabajo. Nada, pues, de volver a escuchar Like just heaven, tema que el propio Smith ha dicho que no tocar¨¢n bajo ning¨²n concepto. Dar¨¢ igual, tienen suficiente patrimonio como para dejar de lado lugares comunes.
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