La juez Palacios levant¨® 'el velo' de los patrimonios

El primero de junio de 1998, la juez Teresa Palacios, titular del juzgado central de instrucci¨®n n¨²mero 3 de la Audiencia Nacional, dict¨® un auto, a petici¨®n de los fiscales Luis L¨®pez Sanz y Javier S¨¢nchez Junco, por el cual se intentaba recuperar una parte del dinero detraido a trav¨¦s de operaciones presuntamente delictivas por valor de unos 12.000 millones de pesetas en Banesto.Las responsabilidades pecuniarias exigidas a Conde en el caso Banesto se elevan a 10.127 millones de pesetas. Pero de esa cantidad no se hab¨ªa logrado recuperar gran cosa. La juez, pues, consider¨® que los fiscales estaban en lo cierto: hab¨ªa que levantar el velo y embargar todo aquello que revelara una confusi¨®n entre los patrimonios de Conde y el de sus sociedades.

La juez orden¨® el 1 de junio de 1998 el embargo de todas las acciones representativas del capital de la sociedad Asebur Inversiones, otrora la principal sociedad patrimonial del exbanquero y de su familia y que ahora aparece como propiedad al 100% de la suiza Kaneko Holding, sociedad que el abogado y fiduciario Paolo Gallone hab¨ªa asignado a Conde, seg¨²n declar¨® incrimin¨¢ndose a s¨ª mismo, en Lausana, ante el juez de instrucci¨®n Jacques Antenen, con el fin de canalizar una parte de su patrimonio privado.

La juez, asimismo, dict¨® el embargo de las acciones de Lassalcedas S.A., propiedad de la holandesa Ge.so.co. y de Asebur Inversiones, y titular de una importante finca con explotaci¨®n cineg¨¦tica en Ciudad Real, La Salceda; lo mismo orden¨® para las acciones de Los Carrizos de Castilblanco, propiedad de Ge.so.co., titular de la finca con explotaci¨®n agr¨ªcola Los Carrizos, en Sevilla; y agreg¨® el embargo de las acciones de Industrias Cumaria S.L. propiedad de Asuma B.V., otra sociedad registrada en Holanda.

La sociedad Industrias Cumaria, que tiene una participaci¨®n de Lourdes Arroyo, esposa del exbanquero, hab¨ªa sido titular del Alejandra, un superyate de 41 metros de eslora, que Mario Conde vendi¨® formalmente a una sociedad extranjera radicada en la isla de Jersey para explotaci¨®n comercial, pero a cuyo frente situ¨® a su patr¨®n, Stephen McLaren. La defensa de Mario Conde recurri¨® el 8 de junio de 1998 la decisi¨®n de la juez, calific¨¢ndola de "extravagante" y de "desmesurada simpleza".

La juez desestim¨® el recurso el 3 de julio siguiente. "Si de desmesurada simpleza se tacha el auto combatido, m¨¢s simple es la situaci¨®n que ha abocado al mismo, toda vez que ante la divergencia entre una apariencia de bienestar econ¨®mico patrimonial m¨¢s que saludable y la que, sin embargo, aparece documentada en torno a la que el Juzgado se ha movido, consistentes en diversos saldos bancarios que con un importe de 2.461.329 pesetas, acciones valoradas en 6.620.383 pesetas aproximadamente y una motocicleta marca Honda, modelo NX650, as¨ª como el reembargo de diversos cuadros y acciones que constan embargados en el procedimiento abreviado 165/93 de este Juzgado o pignoradas por el Banco Urquijo, cantidad que en absoluto se aproxima a la de 10.127 millones que se reclama como responsabilidad civil, lleva a desentra?ar la realidad, en aras de conseguir el restablecimiento de perjuicio de orden civil que se le ha atribuido al acusado y que viene obligado a afrontar. Si no de motu propio, habr¨¢ que suplir su pasividad. Todo ello, reconducible a la doctrina del levantamiento del velo y en su seno a lo que se ha calificado como de escuetas expresiones que s¨ª parecen inteligibles cuando de ellas se ha defendido y ha articulado el presente recurso, procediendo por todo ello a su desestimaci¨®n".

La juez dio m¨¢s pasos. En octubre de 1999, los fiscales solicitaron que se impusiera la administraci¨®n judicial en las sociedades Asebur Inversiones, Kaneko Holding, Ge.so.co., Asuma BV, Industrias Cumaria, Lassalcedas S.A y Los Carrizos de Castilblanco S.A.L., ya embargadas, y otras, como Sinergy Ib¨¦rica y Nort Activos.

La juez resolvi¨® el 4 de octubre de 1999 que "la administraci¨®n judicial se presenta como el ¨²nico medio eficaz de asegurar todos los bienes de titularidad formal de las mismas con el fin de poder garantizar que en su momento se pueda hacer efectiva la responsabilidad civil". Nombr¨®, pues, administradores a Leonor Mateo, perito agr¨ªcola, y Jes¨²s Abad, economista auditor.

Sin embargo, fuentes bancarias se?alan a ¨¦ste peri¨®dico que Conde ha seguido realizando ciertas actividades, particularmente en Los Carrizos, en Sevilla, de las cuales obtuvo algunos rendimientos. En particular, ha alquilado una parte de la finca para cacer¨ªas. "Llegabas tras pagar una cantidad importante. Te repart¨ªan junto con otros en unos todoterrenos y en la colina de la finca hab¨ªa escoltas con walkie-talkies que vigilaban mientras cazabas. Si advert¨ªan a los coches de la guardia civil llegando, ten¨ªas que estar preparado para salir zumbando en los coches", dijo una fuente.

Las cuentas bancarias en el exterior han estado bien protegidas. Conde ha operado en diversos pa¨ªses y con m¨²ltiples entidades bancarias. En Suiza, con el Bankhaus Adler, el Bank Linth, el Raiffeisenkbank, el St. Gallische Kantonalbank, el Sweitz Bankverein y el Schweitzerische Kreditanstalt, la Union de Banques Suisse y, en Vaduz, Liechtenstein, con el NMB (despu¨¦s International Nederlanden Bank).

Banesto, por su parte, consigui¨® bloquear los fondos procedentes de la llamada Operaci¨®n Carburos (1.344 millones de pesetas de 1990 o unos 2.000 millones de hoy, con sus intereses) en Liechtenstein, como parte de un pleito civil para recuperar el dinero actualmente en marcha. La sentencia de ayer, al considerar delito de apropiaci¨®n la citada operaci¨®n, abre el camino para recuperar los fondos.