El Gobierno deja en manos de los municipios decidir qu¨¦ perros son peligrosos

El Gobierno vasco aprob¨® ayer el decreto que regula la tenencia de perros, en el que deja en manos de los ayuntamientos la declaraci¨®n de animales "de riesgo". Derivada del desarrollo de la Ley de Protecci¨®n Animal, esta normativa determina que son peligrosos los perros catalogados de esta manera "con car¨¢cter individual" por las autoridades municipales atendiendo a criterios "objetivos", como denuncias recibidas por su agresividad.

A pesar de que la Ley de Protecci¨®n de los Animales del Pa¨ªs Vasco otorga competencias al Ejecutivo aut¨®nomo para prohibir la cr¨ªa de razas consideradas como peligrosas, el decreto aprobado ayer por el Consejo de Gobierno elude ejercer esta potestad. Los responsables de Agricultura y Pesca han optado por regular las condiciones que deben cumplir los propietarios de este tipo de animales, trasladando a los ayuntamientos la responsabilidad de determinar qu¨¦ perros responden a este perfil de peligrosidad.As¨ª, la normativa determina que los "criterios objetivos" que deben seguir las autoridades municipales se centran en aspectos como haber sido objeto de denuncias por parte de particulares, manifestar un comportamiento agresivo o cualquier otra circunstancia que muestre la peligrosidad del perro respecto a personas u otros animales.

El decreto define normas generales que afectan a todos los canes, algunas de ellas ya aplicadas. Insiste, por un lado, en la obligaci¨®n de censar e identificar con microchip, e incorpora la novedad de exigir que los propietarios contraten un seguro de responsabilidad civil dirigido a cubrir los da?os y perjuicios provocados por los animales. Seg¨²n ?lvaro Iturritxa, director de Ordenaci¨®n del Medio Natural e Investigaci¨®n del Gobierno vasco, este seguro debe cubrir contingencias que pueden ir desde "una agresi¨®n hasta un accidente de tr¨¢fico". En este sentido, el decreto subraya que el due?o de un animal o el que se sirve de ¨¦l tiene que asumir todas las responsabilidades derivadas de un comportamiento, tales como da?os y perjuicios, molestias que cause "aunque se le escape o extrav¨ªe", precisa.

Todos los perros deber¨¢n encontrarse "bajo control" y sujetos con correas adecuadas de una longitud de dos metros cuando se hallen "en las v¨ªas p¨²blicas, en las partes comunes de los inmuebles colectivos y en los espacios p¨²blicos en general".

Sistemas de seguridad

El decreto nace a partir de la Ley de Protecci¨®n Animal y, seg¨²n detallan desde el propio Ejecutivo, "de la decisi¨®n del Departamento de Agricultura y Pesca y del Parlamento vasco para poner l¨ªmite a los diversos incidentes acaecidos con determinados perros". La normativa pone ¨¦nfasis especial en los perros considerados "de riesgo", pero sin detallar unas razas espec¨ªficas. Para este tipo de animales exige unas condiciones particulares, entre las que se encuentra la existencia de un recinto con adecuados sistemas de seguridad "que impidan la huida del mismo". Se prohibe la utilizaci¨®n para ellos de correas extensibles, se exige el uso permanente de bozal en los espacios p¨²blicos y la colocaci¨®n de una placa en el collar con un texto en el que figure la expresi¨®n "animal de riesgo". Tambi¨¦n se les proh¨ªbe participar en consursos o exposiciones.

Los establecimientos de cr¨ªa y venta son regulados igualmente, as¨ª como los libros geneal¨®gicos caninos y el censo de adiestradores de perros.

La revisi¨®n anual obligatoria por parte de los veterinarios tiene como objetivo precisamente incidir en las campa?as de identificaci¨®n mediante los microchips, as¨ª como en un control visual que permita a los especialistas determinar si muestran heridas que denoten su participaci¨®n en peleas o si presentan un car¨¢cter agresivo.

El r¨¦gimen sancionador aplicable a las infracciones o incumplimientos de este decreto es el establecido en la Ley de Protecci¨®n de Animales, pudiendo alcanzar las multas los dos millones y medio de pesetas. En el caso de no tener censado al perro, la sanci¨®n puede situarse en 250.000 pesetas.