Granada acoge una magna exposici¨®n sobre Carlos V y su tiempo La muestra 'Las armas y las letras' coincidir¨¢ en mayo con un congreso internacional
Granada, una de las ciudades a las que m¨¢s ligado se sinti¨® el emperador Carlos V, acoge desde hoy hasta el 25 de junio una gran exposici¨®n sobre la vida y el tiempo del primer rey moderno espa?ol. Carlos V, las armas y las letras recoge objetos y documentos como los planos originales para la construcci¨®n del palacio de Carlos V, en la Alhambra, de Pedro Machuca; armaduras reales, gigantescos ca?ones, arcabuces o el famoso cuadro de Tiziano.
"Carlos V fue un hombre de su tiempo", dijo ayer el comisario de la muestra, Fernando Mar¨ªas, "y en su tiempo, como dec¨ªa Garcilaso, los hombres dedicaban su ocio a la poes¨ªa, y el trabajo, su negocio, era la guerra. El mundo de la cultura y el mundo de las armas estaban muy relacionados entre s¨ª". ?sa es la raz¨®n del nombre de la exposici¨®n, en la que la Sociedad Estatal para la Conmemoraci¨®n de los Centenarios de FelipeII y Carlos V ha puesto su mayor voluntad y un presupuesto de 225 millones de pesetas."Las piezas proceden de fondos de todo el mundo", explic¨® el presidente de la sociedad, Juan Carlos Elorza. "Desde Nueva York hasta Estambul, hemos acudido a los fondos de grandes instituciones. Lo cierto es que no se han escatimado esfuerzos".
La elecci¨®n del hospital Real, sede del rectorado de la Universidad de Granada, tiene sus razones. Fue un hospital que ordenaron construir los abuelos del emperador, los Reyes Cat¨®licos. Y fue el propio Carlos V quien fund¨® la universidad granadina. El hospital, adem¨¢s, es un lugar que encaja arquitect¨®nicamente con la muestra.
Granada acoger¨¢ tambi¨¦n el pr¨®ximo mes de mayo el m¨¢s importante congreso mundial sobre la figura de Carlos V, al que asistir¨¢n los grandes expertos en su figura. Diferentes conciertos musicales se suman desde hace unas semanas a las actividades que se realizan en la ciudad.
Libros y guerra
Carlos V, las armas y las letras mezcla la exhibici¨®n de objetos de guerra con los libros de la ¨¦poca carolingia. El crucero del hospital Real acoge gigantescos ca?ones de hasta seis o siete metros de longitud primorosamente adornados. Uno de ellos, una culebrina que orden¨® construir el marqu¨¦s de Tarifa, tiene forma de basilisco, y tallada en su boca, la cabeza de un drag¨®n que arroja granadas por la boca.
"Ese tipo de objetos nos transporta a la mentalidad de la ¨¦poca, donde las armas ten¨ªan un continuo maridaje con la cultura", se?al¨® Fernando Mar¨ªas. "La guerra siempre estaba presente en la vida diaria, y los soldados, por ejemplo, iban a la guerra con sus mujeres".
Precisamente el concepto de guerra es uno de los argumentos centrales de la exposici¨®n. En la ¨¦poca de Carlos V comienza a desaparecer el cuerpo a cuerpo en la batalla con la llegada de pistolas y arcabuces, que terminan por acabar con la imagen rom¨¢ntica de los caballeros andantes. Ballestas, pistolas ricamente adornadas y armaduras, sobre todo, est¨¢n presentes a lo largo de toda la muestra. El propio emperador, como un pistolero de ¨¦poca, porta en un retrato una de esas armas en el cinto.
Hay objetos de enorme valor, como el casco del sult¨¢n Solim¨¢n, el emperador otomano rival de Carlos V, o su espada de guerra, adornada con los versos del Cor¨¢n. Tambi¨¦n se encuentra la espada que Francisco I de Francia perdi¨® en la batalla de Pav¨ªa y que, para los franceses, tiene la misma carga legendaria que la Tizona del Cid.
El mundo de la cultura est¨¢ tambi¨¦n vivamente representado. Cuadros de Tiziano, entre los que se encuentran el famoso retrato a caballo de Carlos V o la Alocuci¨®n del marqu¨¦s de Vastos. Ejemplares de los primeros libros de la ¨¦poca, como una traducci¨®n al franc¨¦s de Amad¨ªs de Gaula, o dibujos de Miguel ?ngel. "No se trata de una exposici¨®n carolingoc¨¦ntrica o hispanoc¨¦ntrica", dijo Mar¨ªas; "no hemos querido ver a Carlos V como el h¨¦roe, sino como el hombre de su tiempo".
Babelia
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