La lista de espera para visitar Altamira es de tres a?os

Si entra en sus planes visitar el gran santuario universal del arte paleol¨ªtico que es Altamira y echar un vistazo a los impresionantes bisontes pintados en las cuevas, debe saber que habr¨¢ de esperar cerca de tres a?os para hacerlo. As¨ª lo exige la lista de espera, que ya en 1996 impon¨ªa una demora superior a los 12 meses y que desde entonces se ha incrementado debido al inter¨¦s que despierta la llamada "capilla Sixtina del arte cuartenario", situada invariablemente en el primer plano de la gran oferta tur¨ªstica de Cantabria e indispensable cita de los estudiosos del arte parietal.El problema de la conservaci¨®n de las pinturas, que estuvieron clausuradas durante varios a?os en la d¨¦cada de los setenta para ejecutar muy delicadas medidas de car¨¢cter cient¨ªfico y t¨¦cnico para su defensa y conservaci¨®n, impuso como condici¨®n para su reapertura un riguroso control del n¨²mero de visitantes record¨¢ndose que en d¨¦cadas anteriores se hab¨ªa registrado una muy imprudente entrada de hasta 1.500 personas al d¨ªa, que aceleraron peligrosamente el proceso de deterioro de las cuevas.

Durante largos a?os parecieron ignorarse las peculiaridades del microclima de la caverna, especialmente sensible a cualquier alteraci¨®n perjudicial para su protecci¨®n. Se trataba de evitar la acci¨®n de efectos naturales y f¨ªsicos capaces de variar la temperatura y el ¨ªndice de humedad que debe mantenerse en el recinto para la conservaci¨®n de un tesoro con 16.000 a?os de antig¨¹edad y considerado patrimonio de la humanidad.

Esperar en la entrada

Pese al tiempo de espera, las solicitudes para las visitas se multiplican, y es tal la atracci¨®n que Altamira mantiene, incluso fuera de nuestras fronteras, que resulta frecuente la presencia en la entrada de personas con intenci¨®n de cubrir alguna baja de ¨²ltima hora en la lista de los visitantes admitidos para el d¨ªa.

Mientras tanto, prosiguen las obras para la construcci¨®n de la r¨¦plica de estas cuevas, en muy cuidadoso ensamblaje de m¨²ltiples piezas exigidas por la nueva y artificial Altamira que a principios del pr¨®ximo oto?o podr¨¢ visitarse en el Museo de Sitio, con una superficie de 3.500 metros cuadrados y que contar¨¢ con varias salas de exposiciones temporales y permanentes.

La realizaci¨®n del proyecto ha costado unos 2.500 millones de pesetas, con una aportaci¨®n del 60% del presupuesto a cargo de la Uni¨®n Europea. La copia id¨¦ntica de los bisontes, con una superficie de 620 metros cuadrados, recibir¨¢, seg¨²n estimaciones previas, unas 500.000 personas al a?o en turnos de 70 cada 10 minutos. En teor¨ªa, la lista de espera para acceder a la Altamira aut¨¦ntica deber¨¢ registrar cierta reducci¨®n a corto plazo.