Los chicos con las chicas

Un Lope tard¨ªo escribi¨® una vez m¨¢s una comedia de equ¨ªvocos, de amor¨ªos, de disfrazados: meti¨® sus ripios de siempre ?ojos-enojos-antojos? y de cuando en cuando un soneto admirable, o un poema para ser famoso. Yolanda Pall¨ªn, autora, y Eduardo Vasco, director ya frecuente, han pensado en dar la obra en una parte importante -algo menos de hora y media- vestida en el tiempo actual. Y dicha por los j¨®venes estudiantes y ya actores de La Abad¨ªa, m¨¢s que con arreglo a la prosodia que requiere el texto, con una dicci¨®n m¨¢s aproximada al d¨ªa de hoy. Es gracioso, y nada m¨¢s.Se pasa por encima del anacronismo profundo: en la vida actual ciertos melindres, ciertos respetos, cierta timidez, cierto sentido del honor y de la minor¨ªa de la mujer no son corrientes, incluso est¨¢n en v¨ªas de extinci¨®n: el traje y la m¨²sica de los chicos y las chicas no corresponden con los pudores de la acci¨®n ni con los circunloquios del texto.

Se acepta y gusta como ejercicio de escuela, y se puede aplaudir a quienes hacen el esfuerzo y apuntan hacia m¨¢s all¨¢. En efecto, se les aplaudi¨® en la noche de invitados y compa?eros, y me pareci¨® que muy especialmente la encantadora y grata Nuria Mencia produjo m¨¢s entusiasmo: incluso se la ovacion¨® una escena muy bien hecha. El director ide¨® algunas situaciones teatrales bien hechas, generalmente con la ayuda de la iluminaci¨®n, que es la que viste una obra de decorado muy secillo.