Etiop¨ªa celebra como una victoria el repliegue de Eritrea a sus fronteras

Eritrea anunci¨® en la madrugada del mi¨¦rcoles que acepta retirarse a las fronteras del comienzo de la guerra, a principios de 1998, y renunciar as¨ª a las tierras conquistadas a Etiop¨ªa para poner fin a la ofensiva desencadadenada por este pa¨ªs hace dos semanas. "En inter¨¦s de la paz, Eritrea ha decidido aceptar la llamada de la Organizaci¨®n para la Unidad Africana [OUA] para una 'desescalada' de la guerra", anunci¨® el Ministerio eritreo de Asuntos Exteriores. Las autoridades de Addis Abeba aseguraron que la guerra va a continuar hasta que el Ej¨¦rcito eritreo deje de constituir una amenaza y todo su territorio sea "liberado". La retirada comenz¨® en la zona central de Zalambessa, donde los et¨ªopes afirman haber conseguido una victoria militarclave tras dos d¨ªas de intensos combates. Aunque Asmara insiste en que este repliegue no supone "una derrota", miles de et¨ªopes se lanzaron ayer a las calles en una celebraci¨®n espont¨¢nea de la "victoria". Los habitantes de Addis Abeba acudieron desde primera hora de la ma?ana a la c¨¦ntrica plaza de Meskal donde agitaron banderas mientras los coches hac¨ªan sonar sus claxon y por toda la ciudad se escuchaban himnos militares.

El recrudecimiento de los combates entre Etiop¨ªa y Eritrea, una antigua provincia que logr¨® su independencia en 1993, dejando sin resolver un conflicto fronterizo que estall¨® en 1998, ha agravado la crisis por la que atraviesan estos pa¨ªses. Ambos est¨¢n afectados por una sequ¨ªa que amenaza con provocar la muerte por hambre de nueve millones de personas. Adem¨¢s, esta ¨²ltima ofensiva ha empujado a miles de eritreos a abandonar sus hogares. M¨¢s de 20.000 han atravesado la frontera con Sud¨¢n, seg¨²n el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR). Esta cifra podr¨ªa elevarse a 80.000, ya que muchos todav¨ªa no han sido registrados, y en Eritrea hay medio mill¨®n de desplazados internos. Algunas ciudades han quedado vac¨ªas.

"Llegan con lo puesto. Principalmente mujeres, ni?os y ancianos. Los hombres se quedan combatiendo, y tambi¨¦n las mujeres j¨®venes", afirma Alfredo Langa, delegado de Cruz Roja Espa?ola en Sud¨¢n, informa Natalia Rodr¨ªguez. El Gobierno de este pa¨ªs, que acoge ya a entre siete y ocho millones de refugiados, centroafricanos, ugandeses, et¨ªopes y eritreos -aunque se calcula que la mitad de esta cantidad son desplazados internos-, ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional para poder afrontar la nueva oleada. Las necesidades b¨¢sicas en los campos de acogida son el agua, tiendas e instalaciones sanitarias, seg¨²n Langa. ACNUR ha advertido de que otros 40.000 eritreos est¨¢n preparados para cruzar la frontera si se recrudecen los combates.