"El Arriaga deber¨ªa ser el centro dram¨¢tico nacional de Euskadi"

Jos¨¦ Mar¨ªa Viteri (Bilbao, 1959) fue nombrado director art¨ªstico del Teatro Arriaga en la ¨²ltima reuni¨®n del consejo de administraci¨®n, despu¨¦s de ejercer el cargo en la pr¨¢ctica desde el fallecimiento de Luis Iturri, hace dos a?os. Lleg¨® al Arriaga como jefe de programaci¨®n del equipo de Iturri en diciembre de 1986, y sigue ocupando el mismo despacho, presidido por una fotograf¨ªa de su antecesor. Pregunta. Ha llegado a la direcci¨®n art¨ªstica desde el campo de la programaci¨®n, un perfil m¨¢s cercano a la gesti¨®n y a la contrataci¨®n que a la creaci¨®n teatral.

Respuesta. Algo mixto. Yo fui actor y como no era precisamente bueno, lo dej¨¦. Llegu¨¦ a hacer el Hip¨®lito de Fedra, hace ya 20 a?os. En el grupo Akelarre empec¨¦ a dedicarme a los temas de producci¨®n. Cuando Iturri mont¨® oficina en Bilbao, yo me ocupaba de la contrataci¨®n y la distribuci¨®n. L¨®gicamente, dej¨¦ de actuar.

P. ?Y c¨®mo cree que se debe relacionar la parte de la producci¨®n con la creaci¨®n?

R. Son dos partes del mundo del teatro. Cuando Luis [Iturri] present¨® el proyecto para dirigir el Arriaga ya form¨¢bamos un equipo. En el teatro no hab¨ªa mucho personal contratado, no eran m¨¢s de diez personas. Habiendo un creativo como Luis, a m¨ª me correspondi¨® la producci¨®n y contrataci¨®n. Y encantado.

P. ?C¨®mo van a solventar la p¨¦rdida de la parte creativa del equipo que formaba con Iturri? Desde su fallecimiento, el teatro ha sufrido cierta par¨¢lisis.

R. El consejo de administraci¨®n me ha nombrado director art¨ªstico y est¨¢ buscando un director gerente. Haber trabajado con Luis los 10 a?os que estuvo de director del teatro me ha permitido aprender el camino para provocar cosas, para encontrar los ingredientes. Hay otra gente para dirigir.

P. ?Por d¨®nde va a encaminar las nuevas producciones?

R. Es cierto que ha habido un estancamiento, pero la nueva corporaci¨®n municipal, precisamente, lo que ha querido es relanzar el teatro. Antes lo importante eran los datos negros econ¨®micos. Por mucho que Iturri trajera espect¨¢culos fant¨¢sticos y siguiera haciendo producciones, esa era la noticia. Arreglado el tema econ¨®mico, el impulso debe llegar por las producciones. Es lo que le da marcha a un teatro, junto con las colaboraciones con otros teatros.

P. ?En concreto?

R. Vamos a producir teatro y vamos a intentar, como en la ¨®pera, que sean obras de autor vasco, en euskera o en castellano.

P. ?No dificultar¨¢ eso la colaboraci¨®n con otros teatros?

R. No. Son dos vertientes distintas. Tenemos que producir cosas que no existan en el mercado. Si ya est¨¢ hecho y es bueno, ?para qu¨¦ vamos a entrar? Tenemos que hacer propuestas que demanda el mercado o provocar esa demanda.

P. ?Eso es cubrir el hueco de una compa?¨ªa p¨²blica?

R. Ser¨ªa mi gran ilusi¨®n.

P. ?Para toda Euskadi?

R. El Arriaga es el teatro por antonomasia de Euskadi, y creo que debe ser apoyado no exclusivamente por el Ayuntamiento de Bilbao. S¨ª tiene una aportaci¨®n econ¨®mica de la Diputaci¨®n de Vizcaya, pero no hablemos del Gobierno. El Arriaga se merece ser ese punto de referencia, deber¨ªa ser el centro dram¨¢tico nacional de Euskadi. El camino es muy largo, pero es un proyecto que vamos a empezar. Claro que esto requiere m¨¢s apoyos.

P. ?Apoyos econ¨®micos?

R. Se requieren medios que no son s¨®lo econ¨®micos. Es mejor contar con m¨¢s infraestructuras, para poder trabajar en condiciones los proyectos que luego generan ingresos. El Arriaga carece de una sala de ensayos para las producciones importantes. Habr¨¢ que buscarla, igual resulta que hay instituciones con locales vac¨ªos. Alguna escuela, por ejemplo.

P. ?Y la producci¨®n de danza?

R. El problema es el sustrato. Podemos contar con cantantes l¨ªricos o actores, pero no bailarines. Desapareci¨® el Ballet de Euskadi y nunca supimos nada m¨¢s. Con el tiempo tambi¨¦n se har¨¢. Eso es contar con un teatro europeo. El Arriaga factory, el Arriaga f¨¢brica que queremos, un centro de producci¨®n, es la tercera pata, que se debe sumar a la programaci¨®n estable y al Arriaga como lugar de encuentro para otras actividades culturales. Pero requiere la participaci¨®n de instituciones p¨²blicas y privadas que se dedican a la ense?anza o a las artes.

P. ?Cu¨¢nto dinero necesita?

R. Para ser sincero, no puedo dar una cifra. No se trata tanto de dinero como de las infraestructuras, pero puede costar unos 300 millones m¨¢s al a?o. La ¨¦poca del voluntarismo, del teatro independiente, se acab¨® y la profesionalizaci¨®n es necesaria. Habr¨ªa que forzar la m¨¢quina para l que en enero de 2003 pudi¨¦ramos ofrecer una zarzuela, una ¨®pera y tender hacia dos obras teatrales al a?o.