Con la historia a cuestas

Por historia, m¨ªstica y rango, Alemania e Inglaterra juegan hoy en Charleroi (20.45) un duelo con un halo majestuoso, con viejas y recientes cuentas pendientes que dirimir entre dos titanes del f¨²tbol mundial. Dos selecciones que levantan ampollas siempre que se citan. La memoria colectiva est¨¢ inundada de choques formidables entre ambos equipos, desde 1938, cuando Inglaterra desafi¨® a los germanos en Berl¨ªn bajo la atenta mirada de Rudolf Hess y Jozef Goebbels, atragantados con el 6-3 que endosaron a su tropa los brit¨¢nicos. Desde entonces, la ri?a se ha multiplicado, hasta el punto de que en las cinco ocasiones en que se han enfrentado en grandes torneos ninguno ha conseguido imponerse en 90 minutos, lo que pone de manifiesto la cerrada pelea entre ingleses y alemanes. La m¨¢s recordada, sucedi¨® en la final mundialista de 1966, cuando el ¨¢rbitro suizo Dienst y el l¨ªnea ruso Bakhramov mantuvieron en el minuto 100 de partido la tertulia arbitral m¨¢s famosa en la historia de este juego. Una charla que deriv¨® en la aprobaci¨®n del gol del ingl¨¦s Hurst, aquel remate que escupi¨® la l¨ªnea de gol antes de ser traspasada.La revancha alemana lleg¨® cuatro a?os despu¨¦s, en el Mundial de 1970. Alemania se impuso en cuartos de final, en la pr¨®rroga, con tres goles inolvidables de Seeler, Muller y Beckenbauer, tres ejes fundamentales del f¨²tbol alem¨¢n. En Madrid (1982) y en Tur¨ªn (1990) no pasaron del empate -en el Mundial italiano gan¨® Alemania por penaltis- y hace s¨®lo cuatro a?os, en la Eurocopa de 1996, los alemanes suturaron la vieja herida del 66, al eliminar a Inglaterra en Wembley, tambi¨¦n por penaltis.

Con todo el peso de la historia, alemanes e ingleses se cruzan en Charleroi con las dudas del primer partido a cuestas. Portugal ha cobrado seria ventaja en el grupo y quien patine puede quedar eliminado en la primera fase. En el bando ingl¨¦s, Kevin Keegan mantiene la inquietud que le acompa?a desde que reina en el banquillo ingl¨¦s: un 4-4-2 o un 5-3-2. Las bajas casi seguras de Adams y Mc Manaman, lesionados en la derrota con los protugueses, multiplican su dilema. Wise y Southgate se perfilan como sus sustitutos.

En Alemania, resuelto el amago de exilio de Matthaeus, Sir Erich Ribbeck, apodado as¨ª por sus maneras de noble caballero, ha previsto varios cambios para paliar el p¨¦simo partido realizado frente a los rumanos (1-1). Uno de ellos obligado, por la lesi¨®n de Bierhoff, al que sustituir¨¢ previsiblemente Carsten Jancker. La prensa alemana ha reclamado estos d¨ªas la presencia de Sebastian Deisler, un jugador de 20 a?os que procede del Hertha de Berl¨ªn. Demasiadas dudas para un choque de consecuencias imprevisibles. S¨®lo una certeza: dejar¨¢ huella, as¨ª lo dicta la historia.