Uni¨® de Pagesos ve intereses especulativos en el plan de purines
"Si hubiera una buena gesti¨®n de los purines, m¨¢s que sobrar, en algunos campos faltar¨ªan", asegur¨® ayer Josep Puigpelat, responsable de medio ambiente de Uni¨® de Pagesos. El sindicato considera que las 23 plantas de tratamiento de purines (excrementos de cerdo) que prev¨¦ construir la Generalitat en los pr¨®ximos a?os responden m¨¢s a intereses empresariales del sector energ¨¦tico que a la voluntad de solucionar el excedente de purines que sufren 15 comarcas de Catalu?a. El sindicato se opondr¨¢ a las que no considere justificadas.
Joan Caball, coordinador nacional del sindicato, asegura que el plan dar¨¢ prioridad a las inversiones especulativas, al margen del sector agrario, en lugar de adoptar medidas para equilibrar las granjas de cerdos y los campos donde sus excrementos puedan ser usados como abono. Estas plantas generan energ¨ªa el¨¦ctrica consumiendo gas natural al tiempo que reducen los excrementos al 5% de masa s¨®lida. El sindicato asegura que s¨®lo aceptar¨¢ plantas en las zonas donde un estudio t¨¦cnico demuestre que el excedente es alarmante y no puede usarse en el campo.Caball reclama estudios rigurosos para determinar qu¨¦ zonas de Catalu?a ya no admiten m¨¢s purines y prohibir en ellas tanto la instalaci¨®n de nuevas granjas porcinas como la ampliaci¨®n de las existentes. El coordinador de Uni¨® de Pagesos asegura que la mayor¨ªa de las explotaciones familiares act¨²an con conciencia ecol¨®gica respecto a sus excedentes de purines y culp¨® de la mala gesti¨®n de los residuos porcinos a los inversores especulativos que se han introducido en el sector.
El coordinador de Uni¨® de Pagesos lamenta que la contaminaci¨®n del agua de boca de algunos municipios de Catalu?a -Medio Ambiente cifra en 203 los pueblos que superan o se acercan al l¨ªmite de nitratos tolerado- haya conducido a una cierta "criminalizaci¨®n" del pay¨¦s. Uni¨® de Pagesos sostiene que menos del 15% de las granjas porcinas de Catalu?a est¨¢ al cuidado de sus propietarios. La explotaci¨®n intensiva de algunas granjas con grandes cantidades de ganado ha alterado la estructura productiva y ha puesto la responsabilidad de la gesti¨®n de los residuos en manos de empresarios que s¨®lo se preocupan de los beneficios a corto plazo. Los residuos son para ellos un problema secundario. El sindicato teme que la construcci¨®n indiscriminada de plantas de cogeneraci¨®n para tratar los purines pueda facilitar la legalizaci¨®n de nuevas granjas en zonas que se han considerado excedentarias.PASA A LA P?GINA 5
Agricultores y ecologistas desconf¨ªan de la tecnolog¨ªa de las plantas de purines
VIENE DE LA P?GINA 1 Uni¨® de Pagesos reclama que la construcci¨®n de las plantas vaya acompa?ada de una moratoria para paralizar la instalaci¨®n de nuevas explotaciones ganaderas en la misma zona. Josep Puigpelat puso un ejemplo que, en su opini¨®n, pone en evidencia la mala planificaci¨®n agraria del Gobierno catal¨¢n.
En el puerto de Tarragona est¨¢n descargando barcos que transportan abono mineral para fertilizar los campos catalanes, en lugar de recurrir a los fertilizantes naturales originados en las granjas de cerdos. "Si estos excedentes tienen un buen uso generan riqueza, pero si se acumulan en exceso se convierten en residuos y acaban contaminando", indica Puigpelat.
Centrales energ¨¦ticas
Las plantas de tratamiento de purines que la Generalitat prev¨¦ autorizar son en realidad centrales de producci¨®n de energ¨ªa el¨¦ctrica con gas natural. Su rentabilidad reside en esta producci¨®n energ¨¦tica, que debe ser comprada obligatoriamente y obtiene de las arcas del Estado una bonificaci¨®n de 3,76 pesetas por kilovatio hora. El negocio parece asegurado, como lo corrobora el hecho de que una decena de empresas est¨¢n interesadas en la construcci¨®n de las 23 plantas previstas. Estas plantas energ¨¦ticas pueden, y deben seg¨²n la ley, centrifugar purines, solidificando y reduciendo su volumen.
El Grup de Defensa del Ter (GDT), el colectivo ecologista que demostr¨® con an¨¢lisis de laboratorio la contaminaci¨®n de las aguas y oblig¨® a la Generalitat a tomar medidas, ha sometido a control la ¨²nica planta de este tipo que funciona actualmente en Catalu?a, en Les Masies de Voltreg¨¤ (Osona), y sus conclusiones no son nada halag¨¹e?as. Adem¨¢s de las denuncias de los vecinos por el intenso olor que desprende la planta, en m¨¢s de un a?o de funcionamiento no ha conseguido rebasar, a causa de problemas t¨¦cnicos, el 25% de la capacidad de tratamiento de purines prevista originalmente, que es de 162.000 metros c¨²bicos por a?o.
Cada metro c¨²bico de purines tratado en la planta necesita una energ¨ªa equivalente a 13,5 bombonas de gas butano y 90 litros de agua. Dolors Caminal, del colectivo ecologista, asegura que resulta "parad¨®jico" que el Departamento de Medio Ambiente est¨¦ a favor de una planta que genera CO2 en la atm¨®sfera, cuando la cumbre de Kioto alert¨® a los gobiernos sobre la necesidad de reducir estas emisiones. "En lugar de enfrentarse al problema con sensatez, lo que han hecho es aplicar soluciones que crear¨¢n una nueva cadena de problemas contaminantes", asegura Caminal.
Uni¨® de Pagesos coincide con la mayor¨ªa de estas cr¨ªticas y advierte que tambi¨¦n se deber¨¢ buscar una salida para la concentraci¨®n de residuos resultante del tratamiento. El sindicato agrario ya ha advertido que no aceptar¨¢ que estos residuos se queden en las comarcas donde se hayan construido las plantas de cogeneraci¨®n.
Teme Uni¨® de Pagesos que una bajada del sector porcino, que actualmente representa entre el 35% y el 40% de la renta agraria de Catalu?a, pueda originar el cierre de las granjas. "?Qu¨¦ haremos despu¨¦s con estas plantas?", pregunta Joan Caball.
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