A la caza del voto en M¨¦xico
El Partido Revolucionario Institucional (PRI) de Chimalhuac¨¢n someti¨® a 15.000 mujeres mexicanas a una coacci¨®n insoportable para obligarlas a votar el 2 de julio por el oficialismo. Seis macizos en calzoncillos boxer y botas charras bailaron hasta quedarse casi en cueros, intimaron con gl¨²teos y pudendos y no hubo piedad hasta que los aullidos del electorado fueron pri¨ªstas. Cuatro letras y un anagrama estampados sobre otros tantos traseros instaron al sufragio por la continuidad en las presidenciales m¨¢s re?idas de la historia de M¨¦xico: "V-O-T-A-PRI".Viendo desmayar a las suyas, observando el alzamiento de manos en procura de alg¨²n m¨²sculo indecente, Guadalupe Buend¨ªa, tambi¨¦n conocida como La Loba, no cab¨ªa en s¨ª de gozo. "Espero que nadie se haya ofendido. Es un regalo de coraz¨®n para diversi¨®n de las madrecitas, porque a todas nos gustan los hombres, no lo vamos a negar, por muy viejas que seamos", admiti¨® la presidenta del Consejo de Mujeres por el Cambio. "?O no, compa?eras? Por aqu¨ª vemos, y por ac¨¢ nos lamemos", agreg¨®, se?al¨¢ndose p¨ªcaramente ojos y vientre.
No tard¨® la oposici¨®n en aprovechar el atrevimiento de los Buend¨ªa para denunciar que "Labastida tiene nuevas ma?as para conseguir el voto". El hijo de La Loba, Salom¨®n, aspira, por su parte, a un esca?o en la C¨¢mara de Diputados. Pero no son esas ma?as las que preocupan a los observadores, a los obispos cr¨ªticos, a cuatro consejeros del Instituto Federal Electoral (IFE), al Partido de la Revoluci¨®n Democr¨¢tica (PRD), centro-izquierda, con Cuauhtemoc C¨¢rdenas, a la cabeza, o al conservador Partido de Acci¨®n Nacional (PAN), cuyo candidato, Vicente Fox, disputa el primer lugar en las encuestas a Francisco Labastida. Preocupa m¨¢s el abuso del analfabetismo pol¨ªtico, los temores de la ind¨ªgena Angelita en la plaza central Atlacomulco, Estado de M¨¦xico: "Nos dicen que si no votamos por el PRI nos van a quitar las ayudas".
Los ministros de Agricultura y Desarrollo Social, cuyas carteras administran los principales programas oficiales, negaron la manipulaci¨®n electoral de los recursos p¨²blicos porque el sistema de distribuci¨®n lo impide. El reparto de cheques para semillas, tractores, regad¨ªos o el efectivo para alimentaci¨®n o medicinas, dijeron, no obedece a la militancia de los beneficiarios, sino a sus necesidades como mexicanos. La oposici¨®n mayoritaria niega la proclamada equidad, y pact¨® un "acuerdo por la legalidad electoral", una iniciativa contra "los actos ilegales del r¨¦gimen pri¨ªsta", que fuentes oficiales calificaron de "m¨¢rketing propagand¨ªstico". El PAN fue m¨¢s all¨¢ y ofreci¨® una recompensa de 100 d¨®lares a quien logre capturar a un tramposo con las manos en la masa electoral, reteniendo carn¨¦s de identidad para amedrentar o fraguando trucos.
La limpieza del escrutinio de los votos ya depositados en las urnas parece asegurada, porque el IFE y los partidos en disputa establecieron las medidas imprescindibles para que as¨ª sea. Las advertencias apuntan a su compra o coacci¨®n. "La oposici¨®n tambi¨¦n presiona y compra a su manera all¨ª donde gobierna, pero tiene menos medios y maquinaria para hacerlo que el PRI", coment¨® un observador internacional. Imposible el robo de urnas y papeletas, las presiones revisten formas m¨¢s sofisticadas: acechan el voto del miedo, del necesitado o del ignorante. Jos¨¦ Woldemberg, presidente del IFE, reconoc¨ªa a este diario que muchos mexicanos prefieren un kilo de arroz que el sufragio.
Y nadie como el PRI, seg¨²n las denuncias, puede comprar arroz, distribuirlo a conveniencia por los cuatro puntos cardinales de M¨¦xico con su miriada de organizaciones. Lo ha hecho durante sus 71 a?os en el poder. "Todos sabemos que el problema est¨¢ en el campo, independientemente de que haya mampara , la gente tiene temor a perder las prestaciones sociales porque hay un control m¨¢s grande y pueden identificarlos", declar¨® Ra¨²l Vera, obispo de Saltillo. El voto de los 27 millones de mexicanos que viven en el campo ser¨¢ determinante en unas elecciones que son m¨¢s un refer¨¦ndum sobre el PRI. Quienes lo aborrecen rechazan hasta el jab¨®n de tocador Twister y el deteregente Arco Iris distribuidos por el oficialismo: "?Es de puro sebo de muerto!".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.